¿Podría la implantación de las ZBE en las ciudades acabar con cientos de talleres?

La compañía Solera, especializada en software, datos y servicios integrados para la gestión de las flotas y del ciclo de vida del vehículo, y entre cuyas líneas de negocio figuran los siniestros y las reparaciones, publica hoy el estudio 'La posventa sostenible', en el que aborda el potencial impacto sobre el sector de la posventa de la implantación de las ZBE (zonas de bajas emisiones) en las 149 ciudades españolas con más de 50.000 habitantes, y que ponen en el punto de mira especialmente a los vehículos sin etiqueta medioambiental de la DGT, que superan los 8,5 millones en nuestro país, uno de los territorios europeos donde el parque móvil es más antiguo.

Porque de los 8.577.281 vehículos sin etiqueta que hay en España, casi 4,2 millones se mueven por esas 149 ciudades, y los técnicos de Solera imaginan un escenario en el que unos 2 millones de esos vehículos carentes de distintivo ecológico, y con sus movimientos muy limitados por las nuevas restricciones, fueran dados de baja por sus propietarios y acabasen en el desguace. Según sus cálculos, eso mermaría la facturación de los talleres mecánicos en unos 568 millones de euros, es decir, un 3,9% de su facturación anual.

Según el informe de Solera, las tareas de posventa (mantenimiento y reparación) de los vehículos sin etiqueta en nuestro país generan actualmente una facturación anual de 2.329 millones de euros, de los que 502 millones corresponden a trabajos relacionados con la carrocería y 1.826 millones se relacionan con operaciones en mecánica. Y ante la hipótesis, que la empresa considera realista, de que 2 millones de vehículos de la parte más antigua del parque se achatarren rápidamente, estiman que podrían verse afectados 1.334 talleres, sobre todo aquellos que trabajan con automóviles más viejos. Y traducido a empleos, estiman que 2.668 profesionales podrían perder su trabajo. Es decir, una reducción de talleres y empleos en torno al 4,1%.

La clave, al parecer, estaría en el perfil de negocio en nuestro país, con talleres muy pequeños, ya que el 80% de las empresas de mantenimiento y reparación están formadas por uno o dos trabajadores. En contraposición, Solera expone el caso del Reino Unido, con un parque móvil de 38 millones de vehículos, que es un 33,6% más que en España (nos acercamos a los 29 millones), pero con un 28,6% menos de talleres que aquí. De ahí que en España tengamos un ratio de 867 vehículos por negocio, cuando en el Reino Unido a cada taller le corresponden 1.622 vehículos, prácticamente el doble. Y, según el informe, si en nuestro país reprodujésemos el modelo de posventa británico, los talleres serían más grandes pero habría un 47% menos de negocios en el sector.

Después, los de etiqueta B

Solera también advierte en su informe que los 4.181.000 vehículos sin etiqueta a los que afectará directamente la aplicación de las ZBE en España son solo el principio, pues será solo cuestión de tiempo que después se restrinja el movimiento de los vehículos con etiqueta ambiental B, y más tarde también a los de distintivo C. Y son muchos millones de vehículos. Por ejemplo, si tomamos como referencia los automóviles con más de nueve años de antigüedad que hay en nuestro país, un 28,7% tienen actualmente etiqueta B, mientras que un 36,5% portan la etiqueta C.

Por el contrario, la presencia en nuestras calles y carreteras de vehículos con las etiquetas medioambientales más ecológicas, que son los más favorecidos por las medidas de las ZBE, sigue siendo minoritaria, pues los Eco suponen el 2,8% del parque español, y solo un 0,6% los Cero Emisiones, que son los eléctricos puros y los híbridos enchufables.

Para José Luis Gata, Business Development Manager de Solera, "en España son mayoría los talleres pequeños, negocios que han podido alimentarse del envejecimiento del parque. Sin embargo, las ZBE, que en realidad son un 'Plan Renove', les afecta de lleno, ya que los vehículos que ahora reparan solo tienen tres destinos posibles, y ninguno les favorece: mudarse al pueblo, acabar en el desguace o estar aparcados indefinidamente sin poder circular". Y Gata se hace una pregunta que también parece servir de señal de alarma: "¿Serán las ZBE también un Plan Renove de talleres?"