Así es la Voge 525 DSX, una 'trail' media de buena nota y con un precio increíble

Hace unas semanas tuvimos la oportunidad de probar la Voge 525 ACX, el primer modelo de la marca china que se beneficia del nuevo motor de 494 cc. Ahora, acudimos a la presentación de la nueva 525 DSX, la trail media que disfruta de ese mismo propulsor. En esencia, la 525 DSX es una actualización de la 500 DSX, pero la realidad es que se trata de una moto completamente nueva, que ha sido revisada y mejorada en todos sus apartados.

El segmento trail es la categoría de moda en la industria motociclista. Nunca antes tuvimos a nuestro alcance una oferta tan amplia y variada, en la que entran en juego multitud de fabricantes, con lo que esta guerra comercial sirve para enriquecer las diferentes categorías del segmento, y de ello sale beneficiado el usuario, que dispone de una oferta mayor y más variada. Voge, la marca prémium del fabricante chino Loncin, lleva cinco años en nuestro país y quiere ser un actor protagonista en este terreno. Y con la 525 DSX tiene todos los argumentos para que así sea.

La clave de la 525 DSX es su nuevo motor, que ha crecido de los 471 cc a los 494 cc, un propulsor que ofrece mayores prestaciones y que está adaptado a la futura normativa Euro 5+. De hecho, la potencia de origen está en 54 CV, pero Voge la ha limitado al máximo legal para poder usar el permiso A2: 35 kW (47,6 CV), a un régimen de 8.500 rpm. Disfruta de una curva de potencia muy plana y aprovechable, con un par motor de 44,5 Nm. El fabricante chino anuncia un consumo muy ajustado, 3,9 l/100 km, lo que supone una garantía de máxima eficiencia; y con un amplio depósito de 16,5 litros, eso supone más de 400 kilómetros de autonomía.

Otro detalle importante en la nueva 525 DSX es la implementación tecnológica que recibe. Dispone de dos modos de conducción, embrague antirrebote y control de tracción, que es desconectable (único modelo del segmento con esta opción), así como el ABS, para los usuarios que así lo deseen para rodar más a gusto fuera del asfalto. También tiene iluminación full LED, conectividad por Bluetooth y un sistema de navegación básico, todo como equipamiento de serie.

Los cambios también abarcan la parte ciclo, con un nuevo chasis tubular en acero al cromo-molibdeno, con subchasis desmontable, y una carrocería completamente nueva, moderna y de líneas más definidas. Las suspensiones son Kayaba multirregulables, tanto en la horquilla invertida como en el amortiguador, un detalle que distingue al mercado español de otros mercados europeos. Las llantas de radios, de 19 pulgadas delante y 17 detrás, aptas para gomas sin cámara, cuentan con los reconocidos Metzeler Tourance como neumático de primera monta. En cuanto a los frenos, confía en un doble disco delantero de 298 mm y uno trasero de 240 mm, con ABS de doble canal.

Una de las claves de esta moto está en su contenido peso, de 190 kilos (202 en orden de marcha con todos los líquidos), y este es un factor que la distingue claramente de algunas competidoras. Y a pesar de su notable equipamiento, sin duda el mayor de su categoría, el PVP de la Voge 525 DSX es muy ajustado: 6.587 euros. Además, como oferta de lanzamiento durante los próximos meses, tiene un precio promocional de 6.187 euros, al que se suma una campaña de venta de maletas y baúl de aluminio al 50% de su coste, 650 euros, una estrategia de posicionamiento de marca a cargo de su importador, Onetrón Motos, que seguramente dará buenos resultados.

En marcha

La Voge 525 DSX ya entra por los ojos nada más verla. Sus acertadas formas, vanguardistas pero no extremas, resultan agradables, y sus dos opciones cromáticas, azul o gris, parecen de lo más atractivas. El asiento está a una altura razonable, 830 mm, y como es compacta y estrecha se llega bien al suelo en la ciudad. El asiento resulta cómodo, pero tras una larga jornada sobre él se echa en falta algo más de mullido.

La posición de conducción es correcta, y las manetas regulables permiten ajustar correctamente los mandos a tu gusto, igual que el parabrisas, que es regulable en dos posiciones fácilmente de forma manual. La pantalla LCD de 7 pulgadas ofrece una amplia y completa información, pero tiene un incómodo brillo que dificulta su lectura, aunque según confesaron los responsables de la marca es un problema que se va a resolver de inmediato.

En marcha, el motor responde con solidez. Es muy agradable de conducir porque tiene un medio régimen muy amplio que ofrece una rápida respuesta. Son las virtudes de su motor cuadrado (cilindros de 68 x 68 mm), que ofrece mucho par. En ciudad se maneja bien, tiene una respuesta suave y una relación de cambio que permite usar la tercera velocidad casi como monomarcha, porque responde muy bien desde abajo y su desarrollo es sorprendentemente largo.

En carretera, la 525 DSX se comporta de maravilla. Su ligereza y estabilidad permiten que se maneje con comodidad. Curiosamente, ese largo desarrollo del que hablamos en tercera y cuarta velocidad permiten manejarse con soltura en ambas marchas, dejando la quinta y la sexta para recorridos por autopista, donde la excelente protección aerodinámica que ofrece la convierte en una gran opción para viajar.

Su punto fuerte son las carreteras reviradas: es estable, el motor responde, frena bien y la suspensión delantera es acertada y da confianza, junto a los neumáticos, aunque conviene trabajar un poco en el ajuste de la suspensión trasera si se abordan tramos más bacheados y rotos, donde acusa un excesivo rebote. Fuera del asfalto se comporta bien, sin olvidar que, a pesar de su recorrido más amplio, las suspensiones, la distancia al suelo y los neumáticos no permiten aplicarse a fondo, porque no se trata de una moto de enduro. Pero a ritmo de excursión, la 525 DSX ofrece grandes satisfacciones.

En definitiva, por equipamiento y precio, la Voge 525 DSX es, sin duda, uno de los modelos más atractivos del mercado, una sensación confirmada una vez que rodamos con ella, porque es divertida y ágil, y da plena confianza.

Ficha técnica: Voge 525 DSX

Motor: Bicilíndrico, DOHC, 4 válvulas, refrigeración líquida.

Cilindrada: 494 c.c.

Potencia máxima: 47,6 CV a 8.500 rpm.

Par máximo: 44,5 Nm a 7.000 rpm.

Distancia entre ejes: 1.450 mm.

Peso: 198 kg.

Frenos: ABS de doble canal, dos discos de 298 mm delante, un disco de 240 mm detrás.

Neumáticos: 110/80-19 delante y 150/70-17 detrás.

Depósito de combustible: 16,5 litros.