Aston Martin AMB001 Pro: exquisitez sobre dos ruedas, pero a 108.000 euros la unidad

En 2019, Aston Martin anunció su entrada en el mundo de las dos ruedas, una extravagancia con motor bicilíndrico turboalimentado de 180 CV de potencia desarrollada en colaboración con Brough Superior, un fabricante también británico. Más allá de su llamativo aspecto, de sus formas de diseño vanguardista como no podía ser de otra manera y de sus generosas prestaciones, en aquel momento nos quedamos con una cifra impresionante: los 108.000 euros de su precio.

Han pasado tres años, y en el mismo escaparate del Salón EICMA de Milán el fabricante británico ha renovado su apuesta; o, mejor dicho, la ha subido, porque ha vuelto a mostrar su prototipo bajo los mismos parámetros del anterior pero con una potencia mucho mayor, 225 CV, lo que supone un notable incremento del 25% con respecto a la primera versión. Pero vayamos por partes.

El proyecto de la AMB001, que se puede englobar a medio camino entre una naked y una deportiva, es fruto de la colaboración de Aston Martin con Brough Superior, y difícilmente podremos encontrar una asociación que exalte con más vehemencia el glorioso pasado de la industria del motor británica. Aunque Aston Martin sigue presente a través de sus deportivos y su equipo de Fórmula 1, ahora más de moda que nunca con la llegada de Fernando Alonso, Brough Superior es una firma que pertenece completamente al pasado. Hace unos años fue recuperado su nombre para asociarlo a proyectos tecnológicos avanzados, trabajando en diseños sobre fibra de carbono principalmente. En 2014 desarrollaron una Moto2 que compitió en el Gran Premio de Reino Unido con el veteranísimo Jeremy McWilliams, que consiguió llegar a meta.

Lo cierto es que finalmente en 2019 apareció la espectacular AMB001, que ahora se ha mejorado y completado al desarrollarse la versión Pro, una moto inspirada en el exclusivo modelo de circuito Aston Martin Valkyrie AMR Pro.

225 caballos para 180 kilos

La potencia de la AMB001 Pro ha crecido ese 25% hasta llegar a los 225 CV gracias al uso de la sobrealimentación por medio de un turbocompresor. El motor sigue siendo un V2 con un ángulo de 88° entre los cilindros (94 milímetros de diámetro por 71,8 de carrera), culatas DOHC de cuatro válvulas y distribución con cadena y polea realizado en material composite. Reúne todas las exquisiteces que se pueda imaginar, como una caja de cambios de tipo casette y embrague en baño de aceite.

La mejora de sus prestaciones ha elevado la relación potencia/peso a unas cotas cercanas a las de las mejores motos de SBK, con una relación de 1,28 CV/kg, que es una cifra próxima a la Fórmula 1, gracias a sus 180 kilos de peso. El cárter motor se ha realizado mediante mecanización CNC a partir de un bloque de aluminio AL 5000, lo que permite que disfrute de gran rigidez, y es algo fundamental porque el motor ejerce de elemento portante.

La suspensión delantera está encomendada a una horquilla rígida de brazos triangulares con un monoamortiguador de 112 milímetros de recorrido, mientras que la suspensión trasera tiene un basculante de aluminio de sección triangular sobre el que se ancla un amortiguador de 124 milímetros de recorrido.

Comparada con la primera versión presentada en 2019, esta evolución Pro cuenta con unas formas más afinadas y definidas, y ha cedido sus redondeces iniciales a un perfil más afilado. La carrocería ha incrementado el efecto aerodinámico al incorporar un spoiler delantero y unos alerones laterales; y también se le ha dotado de un alerón trasero para aumentar la estabilidad del conjunto.

Lógicamente, se trata de una moto muy especial y exclusiva; no solo por su precio, sino también por el limitado número unidades que se van a realizar, pues únicamente habrá 88 afortunados poseedores de esta maravilla de la ingeniería, que será fabricada de forma artesanal en la planta de Brough Superior en Toulouse (Francia), y que no estarán disponibles hasta finales de 2023.