Lancia prepara su regreso a los principales mercados, y esta vez habrá coches eléctricos

Si en España preguntásemos por la calle a cien personas por la marca Lancia, los más jóvenes quizás arquearían las cejas, intrigados, y los de 30 años hacia arriba probablemente responderían en pasado: "era una marca lujosa", "era de Fiat", "ganaba casi siempre en los rallies"... Y es curioso, porque Lancia sigue existiendo. De hecho, si repitiésemos la encuesta en Italia no solo responderían todos en presente, sino que muchos nos dirían que ellos mismos, o personas que conocen, tienen o acaban de comprar un Ypsilon, el único modelo a la venta en el único país donde Lancia sobrevive. Y basta con meterse en la web italiana de la firma para comprobar que es cierto, y que por 13.023 euros te puedes llevar un Ypsilon Silver con motor de gasolina Mild Hybrid 1.0 de 70 CV, aunque las promociones en aquel país lo dejan en menos de 11.000 euros. Así las cosas, no extraña tanto que este veterano utilitario de 3,84 metros, cuya actual generación nació allá por 2011 y que se vende también con mecánica de GLP, fuese todavía en 2020 el segundo coche más vendido en el mercado italiano. 43.033 unidades matriculadas exactamente, solo superado por el Fiat Panda, que arrasa sin rubor en aquel país.

Pero llegados a este punto, un fabricante solo tiene dos caminos: ir a menos y desaparecer o, por el contrario, ir a más. Y Lancia ha optado por la segunda vía. O, mejor dicho, lo han decidido los principales responsables del grupo Stellantis, con Carlos Tavares a la cabeza, al idear la estrategia para las 14 marcas que componen este puzzle gigante del automóvil tras la fusión de PSA y FCA hace unos meses. No obstante, en FCA siempre tuvieron claro que Lancia, un icono del automóvil creado en 1906 y que pasó a manos de Fiat en 1969, debía recuperar algún día el esplendor vivido en épocas pasadas, como en la primera mitad del siglo XX, cuando la marca inventaba soluciones técnicas inéditas constantemente, o en los años 70 y 80, décadas en las que ponía firmes a sus rivales en los rallies con máquinas como el Fulvia, el Stratos, el 037 o el Delta.

Hace unos años, durante un Salón del Automóvil de Ginebra, cuando el actual CEO de Lancia era máximo responsable de Fiat para los mercados EMEA (Europa, Oriente Medio y África), preguntábamos a Luca Napolitano por el incierto futuro de Lancia, pues poco antes esa firma centenaria había abandonado todos los mercados exteriores para centrarse únicamente en Italia, donde tras liquidar las existencias de sus últimos coches grandes (Voyager, Thema y Flavia, un curioso trío basado en modelos de Chrysler) centró su actividad en el coqueto Ypsilon. Corría el 2017, ese coche tenía ya seis años a sus espaldas y no parecía viable plantear un sustituto, pero Napolitano contestó aparentemente ilusionado a nuestro 'ataque' que Lancia volvería a tener su momento, y que viendo fenómenos como el de Tesla, por qué descartar un retorno de Lancia convertida en "la Tesla de Fiat", basando su producto en vehículos eléctricos. Aquello se me grabó, pero pasaba el tiempo y aquella idea no tomaba forma.

Lancia, junto a DS y Alfa Romeo

Hasta comienzos de este 2021, cuando Luca Napolitano se convierte en el principal ejecutivo de Lancia, dentro ya de la estructura de Stellantis, que sitúa a la marca italiana en un grupo de firmas premium donde también aparecen Alfa Romeo y DS, las tres por debajo de la súper exclusiva Maserati. Eso ya era un primer indicio de que algo se gestaba. Aunque muchas cosas han cambiado desde aquella entrevista con Napolitano hace cuatro años en el evento suizo, empezando porque las decisiones no se toman ya en Turín sino en la sede de Stellantis en Ámsterdam. O quizás en París. Y esa nueva Lancia podría no empezar por coches grandes, tecnológicos y cien por cien eléctricos, al estilo de los Tesla, sino por modelos más pequeños aunque también lujosos, y con diferentes grados de electrificación, lo que abre la puerta a híbridos e híbridos enchufables. El nuevo lema de la marca, 'The most elegant way to protect the planet' (la forma más elegante de proteger el planeta) así lo deja entrever.

En la nueva hornada de modelos de Lancia ya trabaja Jean-Pierre Ploué, el máximo responsable de Diseño en PSA en el momento de la fusión con FCA y el hombre que tiene la última palabra en ese importante capítulo dentro del grupo Stellantis, ocupación que desde ahora simultanea con la de jefe de Diseño de Lancia. Ploué, nacido en 1962, fue el autor del primer Renault Twingo, y tras pasar rápidamente por Volkswagen y Ford recaló finalmente en 1999 en Citroën, donde acometió una renovación completa de la gama de la que nacieron el primer C4, la segunda generación del C5, el C6 o el DS3.

Tres novedades hasta 2027

Todo apunta, aunque no haya confirmación oficial desde la marca italiana, a que la nueva etapa de Lancia traerá tres nuevos coches en los seis próximos años, y que el primer fruto del binomio Napolitano-Ploué podría estar listo a mediados de 2024. Parece mucho tiempo pero es que el proyecto empieza a tomar forma ahora. Y se trataría de un pequeño utilitario urbano, concebido para sustituir al actual Ypsilon y dotado probablemente de la plataforma eCMP que ya emplean el Citroën ë-C4, el Opel Corsa-e y el Peugeot e-208, entre otros, y que al ser multienergía permitiría ofrecer una versión eléctrica pero también otras con motor de combustión, que para entonces ya contarían con algún tipo de hibridación suave, o Mild Hybrid. En algunos medios se apunta a que ese sustituto del Ypsilon previsto para 2024 usaría ya la nueva plataforma STLA Small de Stellantis, pero las cuentas no salen, pues el grupo dirigido por Tavares anunció la llegada de esa plataforma eléctrica, destinada a sustituir a la eCMP, para el 2026.

El segundo Lancia en esta nueva etapa llegaría en la primera mitad de 2026 y sería un todocamino muy compacto, perteneciente al segmento SUV-B donde ahora se mueven modelos de Stellantis como Fiat 500X, Jeep Renegade, Peugeot 2008 y Opel Mokka, y que podría ofrecerse exclusivamente con mecánica cien por cien eléctrica, para lo cual existen varias posibilidades: que recurra aún a la eCMP creada en su día por PSA, que estrene la STLA Small o, incluso, que utilice la plataforma STLA Medium, lista para 2023 e inicialmente prevista para modelos de los segmentos C y D. Todo dependerá del tamaño que tenga finalmente ese segundo Lancia.

Por último, y siempre según los planes que se han filtrado, el equipo de Luca Napolitano estaría trabajando también en un coche compacto de talla Serie 1, Clase A, Golf o A3 Sportback, pero que no llegaría hasta finales del 2027. La lógica apunta a que este 'nuevo Delta' (especular con un nombre en este caso no parece muy arriesgado) emplearía la plataforma STLA Medium, compatible con versiones eléctricas de entre 125 y 180 kW de potencia (de 170 a 245 CV).