EY busca en fondos internacionales inversión para la hipoteca inversa en España
La consultora tiene el mandato de Óptima Mayores para obtener recursos en fondos de capital riesgo y de pensiones que apuesten por el mercado
Hay más demanda que oferta y, con esta premisa, EY está buscando inversiones en el mercado español de hipotecas inversas. Óptima Mayores, consultora y asesoría en productos financieros para jubilados, ha dado mandato a esta ‘big four’ para tantear fondos de inversión, de capital riesgo y de pensiones para captar recursos.
Óptima Mayores se ha encontrado en los últimos años con más demanda que oferta para este producto, que consiste en que personas con más de 65 años y vivienda en propiedad reciben un préstamo en que el inmueble es la garantía hipotecaria. La deuda la tienen que devolver los herederos tras el fallecimiento, ya sea entregando la vivienda y cancelando el crédito, asumiendo el préstamo o cancelándolo con una nueva hipoteca.
La hipoteca inversa volvió a comercializarse en España en 2018 a través de un acuerdo entre Óptima y el banco portugués BNI, con 30 millones de euros prestados desde entonces. Caser también se ha sumado, aunque con pocas operaciones, según fuentes del mercado, mientras que CaixaBank lanzó una prueba piloto en parte de sus oficinas de la mano de Vidacaixa y lo ha dejado en ‘standby’ por el coronavirus primero y la fusión con Bankia después.
Desde Óptima Mayores, señalan siempre que hay decenas de operaciones que no se pueden realizar por falta de recursos para ello, a pesar de que es un producto más rentable que otros préstamos hipotecarios. Por ello, a la espera de que otras entidades españolas decidan si se suman a la oferta, está explorando el mercado de la financiación alternativa.
Para ello, ha dado mandato a EY, que ha iniciado conversaciones con 24 fondos, entre los que hay fondos de capital riesgo y de pensiones principalmente. Algunos son españoles, pero la mayoría son internacionales que tienen liquidez de sobra para invertir en el producto. De hecho, la primera barrera está siendo el tamaño de la operación.
En concreto, el mercado potencial es elevado, pero por ahora solo lo está explotando Óptima Mayores. La firma de Ángel Cominges se encuentra con que estos fondos invierten con ‘tickers’ elevados, con lo que sería un desafío absorber a corto plazo cantidades que multiplicarían la inversión actual.
La sociedad, que hace asesoría e intermediación de hipotecas inversas, intermediación de créditos inmobiliarios y es correduría de seguros, recuerda que hay ocho millones de personas con más de 65 años y vivienda en propiedad, pero solo el 12% sabe que existe el producto de la hipoteca inversa. Por otro lado, este colectivo cuenta con un ahorro de 600.000 millones de euros en vivienda frente a los 119.000 ahorrados en planes de pensiones por el total de la población.
Hace dos años, la consultora Alvarez & Marsal Spain estimó una aceptación potencial del 9% entre los ocho millones de españoles con más de 65 años y vivienda en propiedad, lo que supondría un mercado de 700.000 particulares. Además, consideró que hay una fuente alternativa de rentabilidad para los bancos titulizando estos préstamos con cédulas hipotecarias.
Estos productos se suelen ofrecer con un ‘loan to value’ del 40%. Es decir, por cada 100.000 euros, se pueden recibir en préstamo hipotecario hasta 40.000 euros. Así, para una vivienda tasada en 300.000 euros de un matrimonio de 79 años, por ejemplo, la hipoteca puede ascender hasta los 73.500 euros, según la calculadora de Óptima Mayores. Otra opción es percibir una mensualidad indefinida de 218 euros y, en tercer lugar, una combinación de un pago de 36.750 euros y una mensualidad de 109 euros. Hay que tener en cuenta que hay proveedores que optan por ofrecer rentas vitalicias u opciones similares.
La industria de la hipoteca inversa, que mueve mucho más negocio en países como Reino Unido, se ha autorregulado para intentar alejar el riesgo reputacional que frena a muchas entidades. La asociación europea que agrupa a proveedores y asesores, EPPARG, aprobó un decálogo de buenas prácticas. En el caso de Óptima Mayores, está entre los ejemplos citados en el Libro Blanco de la 'silver economy' (economía para mayores), elaborado por la Comisión Silver Economy de MAD FinTech, asociación del Ayuntamiento de Madrid, y que se publicará este año.
Hay más demanda que oferta y, con esta premisa, EY está buscando inversiones en el mercado español de hipotecas inversas. Óptima Mayores, consultora y asesoría en productos financieros para jubilados, ha dado mandato a esta ‘big four’ para tantear fondos de inversión, de capital riesgo y de pensiones para captar recursos.