Guadarrama acota los lugares de escalada para proteger la nidificación de rapaces

La Comunidad de Madrid ha prohibido la escalada en más de 20 lugares (y en otros 18 lo han restringido) dentro del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama con el objetivo de proteger la nidificación de rapaces en peligro de extinción, como es el caso del buitre leonado, el halcón peregrino, el águila real y otras especies de aves más pequeñas.

Desde el pasado mes de enero se ha regulado el tránsito en las inmediaciones y a pie de vía de sectores de escalada y la escalada en los sectores y vías regulados en el paraje de La Pedriza, como medida de protección de especies rupícolas durante su época de cría y reproducción.

Las zonas se han dividido en A (donde no se permite la escalada), B (donde se restringe la escalada temporalmente) y C (donde se permite la escalada todo el año). Así, por ejemplo, en la Peña del Águila estará prohibida la escalada del 1 de enero al 31 de julio, mientras que en los Aljibes o en la Peña Arcón estará prohibida todo el año.

Compatibilizar escalada y nidificación

“En líneas generales, los periodos sensibles para la nidificación de estas especies y en los que no se debería autorizar la escalada son: para el buitre leonado desde el 15 de diciembre hasta el 31 de agosto, para el águila real desde el 15 de enero al 31 de julio, y para el halcón peregrino desde el 15 de febrero al 30 de junio” explican desde SEO/BirdLife.

Para nidificar, las aves necesitan unas condiciones con el menor número de molestias posible. Están acostumbradas a la tranquilidad y seguridad que le da anidar en lugares inaccesibles situados a gran altura y encontrarse con un humano en las cercanías podría suponer un inconveniente. El ave podría abandonar el nido a causa del estrés que esta situación podría causarle y, además, podría ni siquiera intentar una nueva puesta en otro lugar.

El objetivo es proteger la nidificación de rapaces en peligro de extinción, como el buitre leonado

Por eso, y para compatibilizar la escalada y la nidificación es “necesaria una planificación espacial y temporal para regular en qué zonas y épocas del año se puede autorizar la práctica”. Las especies en peligro de conservación necesitan décadas para recuperarse, por lo que hay que disponer de territorios en el mejor estado posible para posibles hábitats y fomentar su recuperación. Este problema también lo sufren en Pirineos, Picos de Europa, Navarra, Cuenca, Aragón, así como en Asturias y Castilla y León.