La tecnología garantiza el agua en esta sequía, pero la reutilización pide paso de cara al futuro

España es uno de los países con mayor estrés hídrico de Europa, aunque la gestión del agua únicamente cobra relevancia informativa, social y política cuando la sequía evidencia nuestras vulnerabilidades. En estos momentos, algunas áreas de nuestro país están sufriendo uno de los peores contextos de escasez desde hace décadas. Pese a que los sectores doméstico, industrial y agrícola están pudiendo salvar la situación gracias a la tecnología actual, las nuevas investigaciones ya miran hacia la siguiente crisis poniendo encima de la mesa soluciones relacionadas con la eficiencia energética, la economía circular, la desalación, la potabilización y la reutilización.

Para evaluar cuánto se ha avanzado en esta materia en los últimos años y qué se puede hacer de cara al futuro, El Confidencial organizó junto a Acciona una mesa redonda titulada Innovación contra la sequía. El evento se celebró durante el Día Mundial del Agua, que tiene lugar cada 22 de marzo, y contó con la participación de Jorge Malfeito, director de Innovación del negocio de agua de Acciona; Enric Vázquez, vicedirector del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA); Joan de Pablo Ribas, catedrático de Ingeniería Química de la Universidad Politécnica de Cataluña; y Félix Francés, presidente de la Plataforma Tecnológica Española del Agua.

Jorge Malfeito comenzó su intervención explicando que "el cambio climático y el periodo de sequía actual evidencian la importancia que tienen los recursos alternativos y no convencionales, como la desalinización y la reutilización". Por eso, en su opinión, "es necesario continuar investigando para afrontar futuras situaciones críticas". Aunque también quiso transmitir un mensaje de tranquilidad a la población: "La tecnología está permitiendo garantizar el suministro y, además, hacerlo de la mejor forma porque el agua de España tiene una calidad excepcional".

Por su parte, Félix Francés aclaró que "si hablamos de innovación para combatir la sequía, hay que poner el foco en varias posibles líneas de actuación". Por un lado, el experto apuntó "la importancia que tiene incrementar la oferta de recursos específicos, vía reutilización y desalación, aunque la sequía tiene otros aspectos a tener en cuenta". El presidente de la Plataforma Tecnológica Española del Agua detalló que "podemos reducir la demanda de agua, por ejemplo, a través de la agricultura de precisión y la optimización de los procesos industriales". Al mismo tiempo, sostuvo que "se puede mejorar la gestión para que esos recursos limitados puedan incrementar las garantías y que la calidad del agua al final del proceso sea la adecuada", matizó.

¿Estamos preparados para el agua reutilizada?

Uno de los grandes ejes temáticos de la tertulia fue la reutilización. En los últimos años, desde el Gobierno de España se ha querido dar un nuevo enfoque a la gestión del agua potenciando fórmulas de regeneración y reutilización. El marco legislativo actual es amplio y complejo, y las cifras oficiales hablan de que una de cada cuatro estaciones depuradoras de aguas residuales —hay más de 2.000 en nuestro país— están preparadas para tratar el agua y que ésta se pueda reutilizar. ¿Dónde? Principalmente en la agricultura, la industria, el riego de parques y jardines o en la limpieza de alcantarillado, entre otros usos.

Pese a todo, el agua reutilizada no se puede emplear para consumo humano, ya que los usos admitidos en el Real Decreto 1620/2007, de 7 de diciembre así lo especifican. En este sentido, Jorge Malfeito aseguró que "la tecnología está ahí y las herramientas se pueden utilizar en cualquier momento, pero falta voluntad política. Además, hay que realizar un gran trabajo en lo que respecta a la educación de la población". Sobre los procesos, precisó que "son muy eficientes. Están basados en tecnologías de membranas, pero también de oxidaciones avanzadas o nanofiltración. De hecho, en regiones como Murcia se está recuperando el 95% del agua depurada".

Pero la reutilización tiene otras bondades. Joan de Pablo Ribas concretó que "se está trabajando mucho en la recuperación de los recursos que acompañan al agua. Existe un valor económico en los productos que componen la salmuera". Esto llevó al catedrático a introducir en el coloquio un nuevo término: biorrefinería. "En los procesos de depuración, podemos obtener nitratos y fósforo. Este último es uno de los raw materials más importantes y escasos, y con esta forma de obtenerlo evitaríamos tener que importarlo", enfatizó.

Sobre la regeneración, Enric Vázquez se lamentó de que "aunque sea un proceso que da cómo resultado el agua más perfecta que existe, no se puede verter en la red por ley. De hecho, solo se permite su reintroducción en el ciclo natural mediante el cauce de los ríos o recargando los acuíferos de forma más o menos controlada". "No obstante —continuó—, en algunas zonas del mundo como los estados de California o Texas la legislación ya lo permite". Y puso un ejemplo cercano para que el público que seguía el evento a través de la retransmisión vía streaming pudiera reflexionar: "Parte del agua potable de Barcelona procede del río Llobregat. Solo hay que pensar que estamos en el tramo final de su cuenca, donde llegan aguas de otras estaciones depuradoras. Es decir, en parte, el río se nutre de agua regenerada y no se trata de un recurso procedente de un manantial".

La cuarta revolución industrial al servicio del agua

La innovación ha llevado a algunas compañías españolas encargadas del agua a situarse entre las mejores del mundo. Los campos de actuación son variados y, en palabras de Félix Francés, los principales son "la predicción en tiempo real, la optimización de las reglas de operación o la prevención". El experto remarcó que "una de las tecnologías más disruptivas de los últimos años ha sido la supercomputación unida a la inteligencia artificial y el big data. Esto nos ha proporcionado una gran capacidad de predicción. Tenemos desde teledetección a escalas más groseras, hasta drones y microsensores en los campos. Todo ello nos facilita mucha información y hace que las decisiones sean más adecuadas".

Joan Pablo de Ribas coincidió con su compañero de mesa redonda, pero quiso alertar de que "aunque la robótica y los avances tecnológicos nos ayuden mucho, no van a hacer llover y, al final, este es el origen del agua". En tono distendido añadió: "Es cierto que la innovación hará posible tener agua al margen del clima y el tiempo, pero va a ser muy triste que no llueva".

"La innovación hará posible tener agua al margen del clima y el tiempo, pero va a ser muy triste que no llueva", Joan de Pablo Ribas (UPC)

Otras investigaciones punteras relacionadas con el agua "han llegado de la mano de la actual capacidad analítica de los laboratorios", subrayó Enric Vázquez. "En las últimas dos décadas hemos conseguido ver en el agua cosas que antes no veíamos. Esto está abriendo nuevas posibilidades de investigación enfocadas, por ejemplo, a conocer qué efectos tienen determinados compuestos en la salud humana o el medioambiente". Sobre este tema, su compañero Jorge Malfeito aclaró la importancia que tiene implementar todas las medidas posibles encaminadas a mitigar los contaminantes que llegan a los acuíferos, como son los microplásticos, los productos de farmacéuticos o, incluso, los polialquil cloro compuestos, que podrían tener efectos negativos para la salud.

Precisamente, cómo reducir el impacto medioambiental de la actividad humana centró la siguiente intervención del director de Innovación del negocio de agua de Acciona: "La tecnología nos está permitiendo utilizar energías renovables para descarbonizar los procesos de desalación y regeneración".

Concienciar a la sociedad y que perdure

A pesar de toda la tecnología, continúa vigente una cuestión desde hace décadas, que sigue siendo útil y lo será en el futuro: la concienciación social. Sobre esta cuestión, los expertos se mostraron tajantes y defendieron que "el único camino es una buena educación de la población para que minimice el uso de este recurso al máximo posible", destacó en este caso Jorge Malfeito.

En una línea similar, Félix Francés remarcó que "cuando hay una sequía es cuando nos acordamos de la gestión eficiente y de las formas de encontrar nuevos recursos. Esto ofrece una oportunidad para incidir en el tema de la educación y la concienciación porque es más fácil que los mensajes calen a nivel individual y colectivo". De igual forma, Enric Vázquez corroboró que "en estos momentos de máximo estrés es cuando el mensaje llega de verdad, pero no basta con eso. Tenemos que esforzarnos para que perdure y no se olvide la lección".

Para finalizar, Joan Pablo de Ribas puso un ejemplo real de lo volátil que puede ser el sentir popular: "En la última sequía se planteó construir la actual desaladora del Prat y a la población le pareció bien. Pero empezó a llover y surgieron críticas relacionadas con el gasto económico que suponía. Sin embargo, en la actual sequía, esta instalación ha demostrado ser imprescindible para garantizar el suministro y la situación sería muy diferente si no la hubiéramos construido", concluyó el catedrático de Ingeniería Química.