Un 'family office' catalán compra a los Capriles su última joya, Alcalá 84, por 16 millones

Un family office catalán ha comprado el edificio ubicado en el número 84 de la calle Alcalá. Se trata de la última gran joya inmobiliaria del grupo venezolano Gran Roque Capital, el vehículo de inversión inmobiliaria de los empresarios venezolanos Axel Daniel y Miguel Ángel Capriles, que durante los últimos años ha promovido una decena de proyectos y más de un centenar de viviendas de lujo en las zonas más exclusivas de Madrid capital.

Según las fuentes consultadas, el volumen de la operación ha sido ligeramente inferior a 16 millones de euros, lo que refleja una repercusión de aproximadamente de 7.200 euros el metro cuadrado.

Cuenta con 12 viviendas de lujo destinadas al alquiler por temporadas entre 4.500 y 6.200 euros al mes

El inmueble en cuestión, cuyas viviendas están disponibles en alquiler, cuenta con más de 2.200 metros distribuidos en planta baja y cuatro plantas sobre rasante, y fue íntegramente rehabilitado en el año 2020 con calidades de primer nivel e instalaciones de última generación. Un producto de muy alta gama en el mercado del alquiler de lujo.

Alquileres de lujo

En concreto, cuenta con 12 viviendas de dos y tres dormitorios con superficies entre 130 y 160 metros cuadrados y dos locales comerciales en planta baja. Algunas de las unidades disponen de amplias terrazas igualmente equipadas. Todas ellas se encuentran actualmente gestionadas en formato de alquiler de temporada por la empresa Welcomer Group, una compañía propiedad de Axel Daniel Capriles, dedicada, precisamente, al alquiler por temporadas.

Su excelente ubicación, junto al parque del Retiro, y el hecho de que se encuentren completamente rehabilitadas, reformadas y amuebladas, ha permitido que salgan al mercado del alquiler entre 4.500 y 6.200 euros al mes.

Según las fuentes consultadas, el importe de la operación —casi 16 millones— se situaría por debajo de los 17-18 millones en los que estaría valorado el inmueble, y sensiblemente por debajo de los 23 millones de euros —9.200 euros el metro cuadrado de repercusión— que los hermanos Alberto y Pedro Cortina Koplowitz, dos de los hijos de Alberto Cortina y Alicia Koplowitz, estarían pidiendo por el edificio vecino, Alcalá 86, como publicó El Confidencial.

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E. Sanz

Este edificio —el de los Cortina Koplowitz— está siendo sometido a una profunda reforma y rehabilitación con el objetivo de poner en el mercado 12 viviendas de lujo y dos locales comerciales. Ni Alcalá 84 ni Alcalá 86 disponen de plaza de garaje.

La operación ha estado asesorada por Tenigla Real Estate en la parte compradora y Trier Capital en la parte vendedora.

Tenigla fue fundada en 2015 por Jaime Perinat Escrivá de Romaní y Alberto Garcia Osa Tenigla —ambos salieron del Santander hace siete años—, y ya suma transacciones por un valor aproximado de más de 550 millones de euros. La compañía ha operado activos en España, Alemania, Reino Unido (principalmente en Londres) París, Portugal y Nueva York, y ha asesorado en la creación y gestión de 14 proyectos de coinversión en inmuebles add value por un valor de mercado aproximado de 150 millones de euros.

Una de sus mayores operaciones se cerró a finales de 2021, cuando Tenihabana, vehículo asesorado por las gestoras Tenigla y Doble Dígito, vendió a la Mutualidad de la Abogacía un edificio de oficinas con una superficie de 5.560 metros cuadrados situado paseo de la Habana 9-11 de Madrid, un espacio ocupado actualmente por Utopicus, la compañía de espacios flexibles de Colonial.

Por su parte, Trier Capital fue fundada por los gestores Francisco Gasset, Eduardo Hertfelder e Ismael Fernández, con experiencia compartida en Exan Group y Banco Santander.

Una decena de proyectos de lujo en Madrid

Gran Roque ha sido uno de los grandes grupos de inversión de capital venezolano que ha puesto España —y, en concreto, Madrid— en su punto de mira. Aterrizaron en la capital allá por 2013-2014, antes incluso de que se atisbaran los primeros destellos de recuperación inmobiliaria en nuestro país, cuando los inversores internacionales huían de España.

Desde entonces, han desarrollado una decena de proyectos residenciales, que suman más de 100 unidades, principalmente de lujo, ubicados en los barrios más exclusivos de Madrid. Uno de sus proyectos más significativos y uno de los últimos en finalizar sus obras fue Pablo Aranda 3, que se ha convertido en una de las urbanizaciones de moda en El Viso.

Según explicaban hace unas semanas a este diario fuentes cercanas a Gran Roque, inicialmente, al igual que otros proyectos de la compañía —como Pablo Aranda 3, Españoleto 19, Fernando VI 10 o Lagasca 38—, Alcalá 84 y sus 12 viviendas de lujo estaban destinadas a la venta, pero, una vez finalizada las obras de rehabilitación y con la inflación disparada, los inversores detrás del proyecto optaron por poner las viviendas en rentabilidad. Sin embargo, el edificio ha sido finalmente vendido a una familia catalana.