Urkullu pide a Sánchez abrir desde el lunes la frontera de Francia para vascos y navarros

El Gobierno vasco ha planteado al español que permita desde este mismo lunes la movilidad en la denominada Eurorregión vasca, que aglutina a Euskadi, Navarra y la región francesa de Aquitania, lo que, de facto, implicaría la apertura de las fronteras terrestres con Francia, que permanecen cerradas desde el 17 de marzo, para el tránsito de los ciudadanos vascos y navarros. Es una de las medidas que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu ha propuesto al de Pedro Sánchez en el informe remitido este lunes de cara a avanzar este 8 de junio a la fase 3 de la desescalada, y cuya “única autoridad competente” será el lehendakari en virtud del acuerdo alcanzado con el PNV en el Congreso para apoyar la sexta y última prórroga del estado de alarma a raíz de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus.

También en materia de movilidad, el Gobierno vasco, dentro de la gestión que le corresponde en esta etapa de la desescalada, establecerá movilidad ilimitada entre los tres territorios históricos de Euskadi –en la actual fase 2 se permite este tránsito por motivos “socioeconómicos”–, al tiempo que ha propuesto al Ejecutivo español que se pueda transitar entre provincias limítrofes de comunidades autónomas diferentes que se encuentren en la fase 3 –a Navarra, Cantabria y La Rioja en el caso del País Vasco–, algo a lo que Sánchez se ha abierto ya a partir de este mismo lunes.

El Gobierno vasco establecerá movilidad ilimitada entre los tres territorios de Euskadi y pide el tránsito a provincias limítrofes de CCAA que estén en fase 3

La propuesta con "las medidas específicas" para Euskadi con motivo de su incorporación el próximo lunes a la fase 3 –lo que no pone en duda por cumplir “todos los requisitos tanto desde el punto de vista asistencial como epidemiológico” –, recoge que se eliminará el límite de aforo en los bares, restaurantes y sociedades gastronómicas y que se retomará el servicio de barra en la restauración con el único condicionante de mantener la distancia de dos metros entre los clientes o grupos de clientes. Igualmente, también se suprimirán las limitaciones existentes en el transporte público, que operará al 100% de aforos y frecuencias.

La solicitud de levantar las restricciones en la frontera con Francia para permitir la movilidad dentro de la Eurorregión vasca está justificada, según ha apuntado la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras y responsable del Ejecutivo en el proceso de desescalada en Euskadi, Arantxa Tapia, por las relaciones “de índole socioeconómico” que existen entre los tres territorios que la componen, y también por motivos “familiares”, ya que muchos de los residentes en esta zona en la que habitan cerca de nueve millones de habitantes “tienen sus allegados a ambos lados de la frontera” española y francesa.

El Gobierno vasco elimina desde el lunes el límite de aforo en bares, restaurantes y sociedades, y activa el servicio de barra con 2 metros de distancia

Y más allá de estos aspectos, también ha apuntado a la actual “evolución” del coronavirus en Euskadi, Navarra y Aquitania para defender que esta petición “está justificada”. En todo caso, según ha precisado, se trata de “un planteamiento” realizado al Gobierno español en el que “tampoco se ha empezado a trabajar”, por lo que “en estos momentos no existe nada más que la solicitud”.

La solicitud para, de facto, abrir la frontera francesa para los residentes en Euskadi y Navarra se ha plasmado en el informe remitido al Gobierno español de cara al salto a la fase 3, si bien ya la pasada semana el lehendakari, en su condición de actual presidente de la Eurorregión, planteó por carta a Sánchez que se permita el tránsito a ambos lados de la frontera por motivos socioeconómicos, familiares o sanitarios, aunque sin poner una fecha concreta. En la misiva, reclamaba que la movilidad transfronteriza se incluya dentro de las excepciones al cierre de la frontera por motivo del coronavirus.

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La del Gobierno vasco no es la única voz institucional que aboga por levantar las restricciones que existen desde el 17 de marzo en la frontera terrestre, que no solo comparten el Ejecutivo de María Chivite y la región de Aquitania –el presidente de esta última región, Alain Rousset, ha remitido una copia de la carta de Urkullu al primer ministro francés, Edouard Philippe–, sino que también suma a diferentes alcaldes de los tres territorios, entre ellos los de Irún y Hendaia.

El regidor de Irún, el socialista José Antonio Santano, ha lamentado los graves perjuicios económicos que está provocando en la ciudad el cierre de la frontera hispano-francesa, que está impidiendo la llegada de miles de ciudadanos galos a los comercios, los cuales viven en su inmensa mayoría del mercado francés, pero también las kilométricas retenciones que se producen de forma diaria en torno a la muga, y que están provocando el malestar de los vascos que residen en Hendaia. “Hay personas que necesitan una hora para trayectos de diez minutos”, ha denunciado.

El Gobierno vasco mantendrá activo en la fase 3 el tramo "prioritario" para personas mayoras y vulnerables para el desarrollo de la actividad física

De cara a la fase 3, en la que desaparecen todas las franjas horarias de salida a la calle, el Gobierno vasco mantendrá activo el tramo “prioritario” para personas mayoras y vulnerables para el desarrollo de la actividad física –esto es, de 10.00 a 12.00 horas y de 19.00 a 20.00 horas–. En materia de transporte, aboga por recuperar al 100% las frecuencias y aforos en todos los servicios públicos para reinstaurar la situación previa a la crisis sanitaria, aunque con la obligación del uso de las mascarillas y la existencia de controles aleatorios de temperatura en estaciones cerradas para impedir el acceso a aquellos que superen los 37 grados de temperatura.

En materia de hostelería y comercio, junto a la citada eliminación de los límites de aforo en bares y restaurantes, el Ejecutivo de Urkullu propone ampliar el aforo en los establecimientos y centros comerciales al 60%, incluidas las zonas comunes y espacios recreativos, mientras que para los hoteles y alojamientos turísticos defiende un aforo del 50% en zonas comunes. Por su parte, amplia hasta 30 el número de personas para la práctica del turismo de naturaleza y senderismo.

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Por su parte, en cuanto a las actividades culturales y de ocio, la propuesta vasca contempla abrir las bibliotecas a la mitad de su aforo, al igual que para los cines, teatros, salas de conferencias y auditorios, siempre con butaca preasignada. Además, plantea que se puedan celebrar conferencias y jornadas en espacios cerrados con aforo al 50% y con un máximo de 80 personas, así como que se puedan llevar a cabo actos y espectáculos al aire libre con un máximo de hasta 1.000 personas, sentadas y con distancia de dos metros. En materia de deporte, contempla el inicio de los entrenamientos en remo y pelota de alto nivel.

De cara a la fase 3, el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha celebrado que la “única autoridad competente” en el País Vasco será el lehendakari, lo que pondrá fin a "la situación de excepcionalidad” que ha existido desde que el 14 de marzo el Ejecutivo de Sánchez decretó el estado de alarma. “A partir del lunes decidiremos y gestionaremos todas las medidas de la desescalada en Euskadi”, ha resaltado. De momento, a expensas de que se conozcan las “condiciones definitivas” que el Estado va a establecer para el conjunto de comunidades que den el paso a la fase 3, el Ejecutivo de Urkullu ha trasladado a Sánchez “una propuesta con singularidades derivadas de un conocimiento más cercano a la realidad de Euskadi”.