Villacís se queda sin margen: seis días para aclarar su futuro en Ciudadanos

Begoña Villacís se queda sin margen para su estrategia electoral. La vicealcaldesa de la capital, sin revelar sus planes desde hace meses, pidió a su partido hace unos días contar con libertad para coaligarse con el PP antes del 28 de mayo. Su propuesta, sin embargo, ha chocado de lleno con dos realidades. La nueva dirección de Ciudadanos no solo le niega esta posibilidad, sino que además le ha dado un ultimátum para que aclare sus intenciones antes del próximo lunes, cuando vence el plazo para formalizar las candidaturas municipales a las primarias. A esto hay que sumar el rechazo de Isabel Díaz Ayuso a incorporarla entre sus filas, convencida de que no tiene mucho que aportar a su proyecto en Madrid. Un error de cálculo que deja en el aire su futuro con las elecciones a la vuelta de la esquina.

El fichaje de Villacís por los populares ha alimentado todo tipo de rumores y quinielas desde que Ciudadanos comenzó a desmoronarse. Del partido que fue apenas quedan los escombros, pero no fue hasta el pasado viernes cuando todo adquirió una nueva dimensión. La también líder de la formación en la Comunidad de Madrid por fin descubrió sus cartas y preparó el terreno para una alianza con sus socios en Cibeles, a pesar de que durante meses repitió una y otra vez que no iba a cambiar de chaqueta y que su futuro político estaba atado al de los naranjas. Primero se conoció que había trasladado a algunos compañeros que valoraba convertirse en una "corriente interna" dentro del PP. Después, a través de un vídeo colgado en Instagram, lanzó la oferta: "En este momento del partido, lo más inteligente sería ejercer como verdadero partido liberal, y dar libertad a los municipios para que ellos decidan cuál es la manera más inteligente de concurrir en esos territorios".

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La vicealcaldesa llevaba tiempo jugando al gato y al ratón. Mientras negaba su marcha al PP, como reiteró en El Confidencial, se dejaba querer y no confirmaba su candidatura con los naranjas. Ciudadanos, de hecho, es el único partido con representación en el Ayuntamiento de Madrid que no ha designado aún a su cabeza de lista para los próximos comicios, aunque el liderazgo actual está más que definido. El último guiño a los populares fue tras la crisis en Castilla y León a cuenta del aborto. Una oportunidad que Villacís utilizó para reivindicarse como la mejor aliada posible de los de Alberto Núñez Feijóo, con su coalición con José Luis Martínez-Almeida como gran aval.

Algunas voces en Ciudadanos, muy críticas con los planteamientos de la madrileña, ya intuían hace semanas que estaba preparando su salida. Las fuentes consultadas remiten a las primarias que enfrentaron a la candidatura apoyada por Inés Arrimadas y la propia Begoña Villacís con Edmundo Bal. Muchos piensan que la concejala en la capital estaba esperando la victoria del abogado del Estado para abandonar las filas de los naranjas bajo el argumento de que no se sentía representada, al considerar a Bal como una especie de muleta del sanchismo. Pero finalmente fueron Adrián Vázquez y Patricia Guasp los que se impusieron, en teoría, sus favoritos para refundar el partido.

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La vía Villacís cayó como un bombazo a todos los niveles. Desde la cúpula a cargos municipales. Nadie se explica por qué ha hecho la propuesta ahora y no durante el proceso de refundación, convocado precisamente para abordar cuestiones como esta. La nueva dirección de Ciudadanos tiene pendiente una reunión con la líder madrileña, sobre todo después de conocer que en las últimas horas ha mantenido contactos con el coordinador general del PP, Elías Bendodo, para tratar su posible fichaje antes de las elecciones. También para encontrar un sentido a sus palabras en una entrevista con El Mundo, donde elevó el órdago e insistió en la necesidad de dar un vuelco a los postulados de la formación. "Cs tiene que arriesgar. A veces hay que sacrificar las siglas", dijo. El encuentro estaba previsto para este lunes por la tarde, en plena marejada interna, pero finalmente no se produjo. El único que se celebró fue el de Villacís con sus diez concejales, donde la situación también es límite.

El grupo municipal, formado por once ediles, atraviesa el peor momento de la legislatura. Representa a escala la crisis que atraviesan los naranjas, divididos y abocados a su descomposición. Uno de los momentos más críticos se vivió este lunes, en plena polémica por la propuesta de Begoña Villacís. Según publicó El País, la líder del grupo reunió a todos los concejales para justificarse y explicarles que aún no ha decidido nada sobre su futuro y que los rumores sobre su marcha al PP son cosa de los medios de comunicación.

La respuesta fue dispar, aunque una parte importante le reprochó su actitud y dio por hecho que todo ha sido un montaje en su beneficio para cambiarse de partido con la conciencia tranquila y arropada por todo su equipo. Uno de los más beligerantes, siempre según esta publicación, fue Santiago Saura, el número dos de la candidatura de Edmundo Bal en las primarias.

Tensión en Ciudadanos

La tensión en Ciudadanos está por las nubes, apenas dos semanas después de las primarias que dividieron a la formación. El futuro ante el 28 de mayo es una incógnita, pero en la cúpula de los naranjas tienen claro que la propuesta de Begoña Villacís no prosperará en ningún caso. La nueva portavoz, Patricia Guasp, compareció este lunes para tratar de zanjar la polémica y lanzar un mensaje a lo que todavía consideran como uno de sus principales activos electorales. "Quiero aclarar que el nuevo Ciudadanos no va a ir en coalición ni con el PP ni con el PSOE. Nunca con el bipartidismo", subrayó en rueda de prensa. En la misma línea que el pasado viernes, la dirección respaldó a Villacís como su candidata en Madrid, a la espera de que dé el paso definitivo.

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A cuatro meses para el 28-M, el tiempo apremia. Y si la vicealcaldesa de la capital quiere liderar de nuevo a Ciudadanos en el ayuntamiento, tendrá que confirmarlo en los próximos días. Como en el resto de territorios de España, el plazo para la presentación de candidaturas expira el domingo a última hora. Una vez registradas, la votación tendrá lugar los días 15 y 16 de febrero, según informó Guasp durante su intervención. "Contamos con ella para que se presente a las primarias para ser la alcaldesa de Ciudadanos en Madrid y no tengo ninguna duda de ella", añadió la portavoz nacional.

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La estrategia de Begoña Villacís, sin embargo, encuentra resistencia más allá de Ciudadanos. La dirección nacional del PP mantiene su política de "puertas abiertas" ante el talento vacante de los liberales, pero en Madrid no lo tienen tan claro. Isabel Díaz Ayuso evidenció este lunes que la dirigente naranja no está entre sus prioridades para reforzar su equipo a corto plazo. "Lo mejor de Ciudadanos ya se vino conmigo en 2021", subrayó la presidenta de la Comunidad de Madrid en alusión a incorporaciones como la consejera Marta Rivera de la Cruz, rebajando así las expectativas de la vicealcaldesa.

65.000 votos el 4-M

Aunque Ayuso no se opuso directamente al fichaje, a nadie se le escapa que sus palabras son un frenazo en seco a cualquier movimiento enfocado a incluirla en sus listas. Fuentes de Sol explican que el futuro de Villacís está lejos del PP de Madrid, al considerar que no tiene gran cosa que aportar. Y lo cierto es que la influencia de la dirigente naranja apenas se notó en los comicios del 4 de mayo de 2021, cuando Ciudadanos apenas superó los 65.000 votos en la capital, solo por delante de Pacma y otras fuerzas residuales.

Si se suma al proyecto de los populares, añaden las mismas fuentes, tendrá que ser para otras administraciones o territorios. “Las conversaciones que se han producido a nivel nacional las desconozco, pero las respeto. Yo ahí no tengo nada que decir”, declaró la dirigente madrileña este lunes, antes del Comité Ejecutivo Nacional. Lo que sí descartan, al menos de momento, es que pueda ser una imposición de la dirección.

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La realidad es que ni Isabel Díaz Ayuso ni José Luis Martínez-Almeida han mantenido contacto alguno con Begoña Villacís. "Es una cuestión de Génova", apuntan fuentes municipales. Y aunque al PP le interesa que la líder de Ciudadanos no concurra el 28 de mayo para absorber el mayor número posible de sus votantes, no es menos cierto que en Cibeles tampoco agrada la idea de su incorporación. La coalición en la capital es una de las pocas que han sobrevivido, pero las tiranteces han sido una constante en muchos temas. El Área de Medio Ambiente y Movilidad, dirigida por Borja Carabante, uno de los concejales de mayor confianza del alcalde, fue el escenario de algunos de los conflictos entre ambas formaciones.

El descarte de Ayuso contrasta en cierta manera con la estrategia de Génova, que mantiene abierta la posibilidad de fichar a Begoña Villacís y otros cargos de Ciudadanos. Este mismo lunes, tras la Ejecutiva Nacional, varios barones valoraron positivamente la posibilidad de que la vicealcaldesa de Madrid se uniera a sus filas. El presidente de Murcia, Fernando López Miras, y su homólogo en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, destacaron el "talento" y las "capacidades" de Villacís. Alberto Núñez Feijóo, sin mencionarla ni a ella ni a Ciudadanos, reivindicó el compromiso de su partido para ser un "punto de encuentro" para la mayoría. "Acertar significa presentar los mejores candidatos, presentar los mejores proyectos y presentar los mejores equipos para implementarlo", declaró el gallego.