Los canarios que no viven del turismo agonizan: "No puedo mantener a mis vacas"

Canarias tiene actualmente 4.124 explotaciones ganaderas (bovino, caprino, ovino, porcino, cunícola, avícola, apícola, equinos y camélidos). Una cifra que se ha visto reducida en más de 100 explotaciones desde 2014, primer año del que se tiene registro en el ISTAC (Instituto Canario de Estadística). Las islas que más cabezas concentran son Gran Canaria, con 1.459, y Tenerife, con 1.453. La que menos es La Gomera, con solo 145 animales.

Un sector que ha sido la subsistencia económica de familias durante décadas. Era extraño el canario que no tenía algún animal en su hogar para consumo y elaboración propia o para comercialización. La ganadería ha sobrevivido a la crisis del covid, pero ahora agoniza. Muchos profesionales están contando las horas para echar el cierre de las puertas de sus cuadras.

El archipiélago se unió al resto del país en una manifestación sin precedentes por las capitales isleñas: salieron más de 6.000 personas a la calle para protestar por la situación que atraviesan. Mercedes Pérez, una ganadera de 58 años de San Cristóbal de La Laguna, en Tenerife, que lleva toda una vida dedicada a esta actividad, no dudó en cargar su camión con vacas y acudir a la concentración.

"Todo ha subido menos mi renta, en vez de un negocio ya es una pérdida, venden mi producto al doble y mis beneficios son los mismos, o menos, que hace 20 años", así se lamenta cuando le preguntan por su oficio. Un trabajo sacrificado que le ocupa todas las horas del día y, a veces, de noche. Ha tenido que reducir el número de vacas que tiene de 40 a 25 porque "no puedo seguir sustentándolas".

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Una caja de 300 kilos de forraje ha pasado de costar 50 euros a 100 y un saco de millo de 5 euros a 12. "No dan los números, para que una vaca dé 20 litros de leche hay que echarle 15 kilos de forraje y me pagan el litro de leche a 30 céntimos", lamenta. Y es que mantener cada cabeza de ganado son diariamente 5 euros.

Más costes, pero menos ganancias

Pérez insiste en que los costes de producción ahora mismo son más que las ganancias "porque te venden el producto en el mercado al doble, o incluso al triple, de lo que te lo compran". Eso cuando se lo compran porque la competencia desleal en el mercado canario cada día aumenta y "muchos ya traen y venden productos de Marruecos que no pasan los controles de la Política Agraria Común (PAC), además de usar productos fitosanitarios prohibidos en nuestro país, y con una mano de obra muy barata".

"No es normal que a mí se me exija un carnet para fitosanitarios, un libro de campo, un libro de ganadero y a lo que viene de fuera, nuestros alimentos, nuestra vida, no le pongan control". Además, y respecto a la apertura de nuevas explotaciones, comenta que la dificultad administrativa es mayor porque "si un ganadero quiere poner dos vacas en una cuadra de la finca de sus abuelos, por ejemplo, no puede porque no le dejan abrir la actividad ganadera si hace más de cinco años que esa cuadra está cerrada".

Admite que la burocracia hace "imposible" recibir ayudas económicas. "Las exigencias de las subvenciones de la Unión Europea son tan elevadas que no podemos recurrir a ellas y, cuando las solicitamos, es tal la reducción que aplican que salimos perdiendo", añade. Asimismo, señala que "no hay personal en la Administración que nos asesore y no tienen en cuenta que a muchos de nosotros nos cuesta entender todos los trámites que tenemos que llevar a cabo para pedir ayuda".

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Pérez lamenta que las pocas subvenciones que tiene "vienen tarde y muy poco y cuando vamos a cobrarlas, ya estamos ahogados por otro lado, a las cooperativas o allá donde vamos a buscar el pienso. Entran y salen con la misma". Porque, según ella, "hasta hace pocos años se podía vivir de la ganadería, pero ahora, sin ayuda, es un sector abocado a desaparecer".

Por último, solicita al Gobierno una regulación que sancione la competencia desleal, que se revise la cadena alimentaria, que se le facilite y agilice la burocracia administrativa para la solicitud de subvenciones y que se deje de traer productos de países como Marruecos porque “mientras ellos tienen ayuda, los de aquí, los que llevamos toda la vida dedicados a esto, nos estamos quedando sin nada”.

"No hay relevo generacional"

Theo Hernández, secretario general de ASAJA Canarias (Asociación de agricultores y ganaderos de Canarias) confirma que "en 2022 y, en menor medida en 2023, se sacrificaron muchos animales en las Islas porque no se podía cubrir los gastos de alimentación". Añade que es notorio en el Régimen Específico de Abastecimiento (REA), una ayuda europea para la importación de cereales y forraje: "Ha sobrado dinero dos años seguidos y es llamativo porque siempre ha sido una partida deficitaria".

Hernández pone el foco en el ritmo alarmante al que está descendiendo el ganado porcino en las islas, con un descenso anual del 13% y alude a las carnes importadas como la principal causa. "Se importa muchísima carne, subvencionada por el REA, y competir con esas producciones es muy complicado para los ganaderos canarios", incide.

Asimismo, lamenta la falta de relevo generacional en el sector. Actualmente, según Hernández, "se está cubriendo el 50% del queso que se consume en Canarias con producción local pero, al no tener relevo, año tras año se pierden cada vez más explotaciones". Sin embargo, aclaró que es "un dato muy positivo" que las mujeres sean quienes estén apostando por este trabajo.

"El sacrificio del ganado de Fuerteventura"

Respecto a la competencia con terceros países y, en Canarias se mira hacia Marruecos, Hernández es claro: "Que el Gobierno de Canarias se muestre a favor de reabrir el puerto de Tarfaya es algo que no entendemos". "Nos afecta muchísimo, ya no solo porque vayan a traer productos más baratos, sino porque es una posible entrada de enfermedades ganaderas", aclara.

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Además, recalca que el puerto marroquí "va a ser pequeño y de tránsito de vehículos rodados, no de contenedores que se pueden inspeccionar, y no sabremos las condiciones en las que vienen los productos, pudiendo traer enfermedades ganaderas importantes que están establecidas en este país y que pueden causar el sacrificio de toda la cabaña ganadera de Fuerteventura, por ejemplo". Por último, concluye asegurando que "seguiremos en la lucha y en las reivindicaciones para hacer ver que ese puerto no es una solución, todo lo contrario".