El lado amargo del oro negro: qué supone el veto judicial a la única mina europea de coltán

En la era tecnológica, materiales como el coltán son un tesoro. Y una aldea ourensana de 70 habitantes opta a convertirse en El Dorado de Europa. Allí arriba, a 1.300 metros de altitud, en un rincón de Viana do Bolo llamado Penouta, la montaña muestra las heridas provocadas por décadas de extracción. Primero fue granito, después estaño y, desde 2018, esa solución sólida de columbita y tantalio que por contracción se denomina coltán. De este material, también conocido como oro negro, es la primera y única mina existente en Europa. O lo era, hasta que la justicia ordenó paralizarlo todo. La razón: la omisión de un estudio de impacto ambiental en la Red Natura.

La decisión del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, que confirma la suspensión de actividad dictada en octubre, desestima los recursos contra la medida cautelar presentados por la minera canadiense Strategic Minerals Europe y por la Xunta de Galicia. El tribunal gallego da la razón a la organización Ecoloxistas en Acción, al considerar que la tramitación del proyecto omitió la preceptiva evaluación de los impactos en la Red Natura 2000, a pesar de lindar con la Zona de Especial Conservación de Pena Trevinca, el techo de Galicia. Se trata de un espacio natural protegido de casi 25.000 hectáreas, con cumbres por encima de los 2.000 metros de altitud, coronados por lagos glaciares como O Celo y Lagoa da Serpe.

La confirmación del cese de actividad, dictada el 1 de enero, pero conocida hace unas semanas, ha enfrentado una vez más a los ecologistas con la compañía minera, los alcaldes de municipios de la zona —como los de Viana do Bolo, A Veiga y Vilariño de Conso— y los trabajadores. La entidad que alegó contra la mina considera corroborados sus argumentos por el auto del TSXG, principalmente que la Xunta no corrigiese la ausencia de la preceptiva evaluación ambiental ya advertida inicialmente. También denuncian que buena parte de los cauces en el entorno de la mina presentan niveles elevados de arsénico, mercurio, plomo y cadmio, lo que entienden como un riesgo para las poblaciones que obtienen de ellos su suministro de agua, como es el caso de Viana do Bolo.

El proyecto cuenta con el apoyo de la Cámara Oficial de la Minería de Galicia y también de instituciones como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que en febrero de 2020 se implicó directamente a través del proyecto ESTANNIO, en el que participan Strategic Mineral y Krown. Su objetivo es diseñar procesos para aprovechar los residuos mineros. Un equipo de investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Metalúrgicas (CENIM) liderado por el investigador Félix Antonio López desarrolló un sistema para obtener estaño de alta pureza y, de la escoria restante, compuestos de niobio y tántalo, elementos con mucha afinidad química y compleja separación selectiva.

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Antonio Villarreal. Penouta (Ourense) Gráfico: Cristina Suárez

Los científicos consiguieron separar estos valiosos metales a través de distintas etapas de lixiviación y extracción con disolventes orgánicos, y alcanzar una calidad comercial imposible de lograr con los métodos tradicionales. Cuando se inició el proceso, López informó de la consecución de lingotes de estaño con una pureza del 95% y las primeras de sales de niobio y tántalo con una calidad comercial de hasta un 97% y un 99%, respectivamente.

La minera asegura que la explotación se caracteriza por el respeto por los derechos laborales y el medioambiente. En concreto, especifican que el mineral se extrae de una pequeña cordillera de escombros mineros y de dos balsas que son vestigios de la actividad extractiva de hace décadas, cuando la mina estaba en manos del grupo Rumasa y se dedicaba al estaño. Strategic Minerals también pone en valor un elemento que también destacó el CSIC cuando informó del proyecto ESTANNIO: la alternativa que supone la mina de Penouta frente a zonas conflictivas como la República Democrática del Congo.

"El rápido aumento de la demanda y el hecho de que su obtención esté vinculada a zonas con explotación infantil y conflictos bélicos, como el Congo, hacen esencial lograr una alternativa que permita obtener estos minerales en zonas libres de conflictos, caso de los países europeos", señala el CSIC. Según algunos cálculos, en ese país se encuentran el 80% de las reservas mundiales de coltán. Sea exacto o no, lo que sí es cierto es que su extracción en aquel país ha dado origen a sangrientos conflictos geopolíticos, que han implicado incluso a contrabandistas y a guerrillas que operan en la región.

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Los devastadores efectos del coltán en África están vinculados a la especial importancia de un mineral relativamente escaso y considerado estratégico por la Unión Europea, ya que sus propiedades son indispensables para fabricar la mayoría de los dispositivos electrónicos habituales, desde teléfonos inteligentes a consolas de videojuegos.

En España la situación no es comparable con la de países africanos, pero los intereses afloran. El producto es demasiado apetitoso como para que Strategic Minerals tire la toalla —ha anunciado un recurso de reposición—, aunque no logró su pretensión de imponer una fianza de más de tres millones de euros a los ecologistas. La decisión judicial provocó protestas y concentraciones de trabajadores y familiares ante la sede del Tribunal de Xustiza, en A Coruña. Todo ello, en medio de un enfrentamiento de alta intensidad en el que los demandantes acusan a la minera de una campaña de difamación, con "la utilización de sus trabajadores para presionar al órgano judicial".