Pescadores gallegos contra el Gobierno: "Hay 11 ilegalidades en los planes de eólica marina"

Nuevo capítulo en el conflicto entre pescadores y el Gobierno de Pedro Sánchez por la eólica marina. “Lo que defendemos es que hay que saber qué efectos va a tener todo esto sobre los ecosistemas marinos y sobre la economía. Y no se ha hecho ni una ni la otra”, señala Torcuato Teixeira a este diario, portavoz de la plataforma de los pescadores gallegos, que han presentado una denuncia ante el Tribunal Supremo contra el Ministerio de Transición Ecológica, que dirige Teresa Ribera.

Los trabajadores del mar no están de acuerdo con la hoja de ruta marcada por Transición Ecológica. En concreto, con los planes de ordenación del espacio marítimo (POEM) que delimitan donde podrán ubicarse los futuros parques eólicos. Además, cabe señalar que Galicia será la región del país donde más se instalen estos nuevos parques. “Estos pueden afectar a la campaña del bonito o de la anchoa, entre otros [...] Para ordenar los espacios marinos hay que saber qué zonas son más o menos sensibles”, continúa el portavoz.

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El Tribunal Supremo ha admitido a trámite la denuncia. Esta, además, se sustenta en un informe Observatorio del Litoral de la Universidad de A Coruña (UDA) en el que identifican hasta “11 ilegalidades” en la normativa del Ejecutivo central, saltándose normas como la ley de protección del medio marino y la directiva marco de ordenación del espacio marino. Insisten, también, en que en el decreto aprobado en febrero no se tuvieron en cuenta “los impactos ambientales, sociales y de sostenibilidad para ajustarse a la legalidad vigente”.

Se trata de la última bala lanzada por los profesionales de la pesca para replantear el modelo energético. Los últimos meses estuvieron marcados por las manifestaciones contra los POEM. La plataforma llegó a solicitar la dimisión de la ministra. Esta vez, además, han querido reiterar su compromiso con el medio ambiente. "El sector pesquero no está en contra de las energías renovables, somos los principales perjudicados con la acidificación de los mares y los cambios de temperaturas de los océanos (...) pero no sacrificando a la pesca y a nuestros ecosistemas marinos", subrayan.

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Este argumento fue el mismo que utilizó el presidente de la Federación Nacional de Cofradías, Basilio Otero, en el mes de marzo. El directivo señaló que el foco del problema era la incertidumbre laboral a la que se enfrentaban los profesionales.

Decreto de febrero

La eólica es la principal energía renovable llevada a cabo en Galicia. Los 150 parques con los que cuenta la región se ubican en tierra firme. El pasado mes de noviembre, la ministra Teresa Ribera se reunió con el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, para valorar si daban un paso más allá y planteaban nuevos parques en el agua. Y así fue. A principios de 2023, se aprobó la estrategia del actual Gobierno en funciones sobre la eólica marina: la intención es aprovechar la fuerza del viento para generar energía renovable sobre el mar. Para ello, es necesario dividir el territorio y delimitar las zonas donde sí se pueden instalar los parques.

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“Las autoridades competentes analizan y organizan las actividades humanas en las zonas marinas con el fin de alcanzar objetivos ecológicos, económicos y sociales”, según dicta la propia hoja de ruta del ministerio. Y dentro de estos, se delimitan las zonas de acuicultura y pesca que, según el sector, afectan directamente a su actividad laboral. En Galicia, los cinco parques sumarían más de 2.350 metros cuadrados —de los 5.000 totales—, un 47% del total de toda España. Las otras regiones donde se planea levantar los parques eólicos marinos son Baleares, Canarias, Cataluña y Andalucía, respetando una distancia de 2.000 metros de la costa.