Moreno quiere un Gobierno para la tercera semana de julio con independientes de Cs

Juanma Moreno quería una mayoría suficiente para poder aprobar un presupuesto y los andaluces se la han dado de sobra. Eso le permitirá cumplir los plazos para poner en marcha las cuentas de 2023 en tiempo y forma, pero los 58 escaños que logró en las elecciones del 19 de junio también le permiten irse de vacaciones en agosto con el Gobierno en marcha. Será un Ejecutivo monocolor pero con tintes naranjas, que podrá empezar a funcionar en la tercera semana de julio, según los planes del presidente en funciones. Eso significaría que el primer pleno ordinario sería los días 27 y 28 de julio, antes del parón legislativo de agosto.

En el segundo Gobierno de Juanma Moreno se espera una renovación moderada, pero lo llamativo es que se da por hecho que habrá miembros del actual equipo de Ciudadanos. La continuidad de Rocío Blanco, consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, es casi segura. Esta cordobesa, inspectora de Trabajo y jefa de la Tesorería de la Seguridad Social en Málaga, entró como independiente en 2019 y encabeza un departamento del que el presidente hace bandera, sobre todo en materia de autónomos. Su perfil independiente es un plus, pero no hay que olvidar que estuvo en el acto central de campaña del PP en Málaga y que es cercana a Elías Bendodo.

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En el entorno de Moreno también contemplan la posibilidad de mantener a Rocío Ruiz, titular de Igualdad. La onubense ha mostrado su disposición a seguir, a pesar de que no ha sacado su escaño por Cádiz por unos 4.000 o 5.000 votos. Objeto de las iras de Vox, entró en Ciudadanos para las elecciones de 2018 como independiente, pero se afilió a la formación y ha sido uno de sus referentes a pesar de la mala relación que ha mantenido con el jefe regional del partido, Juan Marín. Ha ayudado a centrar eel Gobierno de PP y Cs, por lo que su presencia sería un guiño a la transversalidad que ha llevado a Moreno a lograr el mejor dato para su partido en Andalucía.

El presidente de la Junta ya intentó contar con estos perfiles —y con el resto de consejeros de Ciudadanos— en sus listas. Pero Inés Arrimadas frenó el intento. A lo largo de la legislatura ha habido varios momentos en que se ha planteado la conformación de una coalición, como PP y Cs han hecho en Cataluña o Navarra. La marca Por Andalucía, utilizada por las izquierdas para estas elecciones, estaba registrada por un dirigente del PP malagueño como uno de los posibles nombres para esta alianza, que acabó descartada. 'De facto', los populares han absorbido a los naranjas, ya que son varios los exdiputados que pidieron el voto para Moreno e incluso hay dirigentes que, tras salir del partido, se han integrado en las filas de Moreno, como la exviceconsejera de Educación Marta Escrivá.

Entre los consejeros del PP, se da por segura la continuidad de Juan Bravo en Hacienda y es probable la de Jesús Aguirre en Salud

Juanma Moreno, en las entrevistas que concedió el lunes, tuvo buenas palabras para los cuadros de Ciudadanos. Además de Rocío Ruiz y Rocío Blanco, es probable que se busque hueco en el organigrama autonómico al consejero de Educación, Manuel Alejandro Cardenete, y que haya una oferta para Juan Marín, ambos en los segundos niveles. El vicepresidente y líder naranja anunció en la noche electoral la dimisión de todos sus cargos. Y apenas unas horas después, cuestionado sobre la posibilidad de que Moreno le guarde un puesto en la Junta, lo ha negado. En la campaña, el gaditano había hablado de ofertas del ámbito privado, pero también del público, pero su insistencia en rechazar integrarse en la Administración en esta legislatura es muy rotunda.

En el lado popular habrá una renovación relativa. Elías Bendodo dejará de ser consejero de Presidencia para dedicarse de lleno a su papel de coordinador general del PP nacional. Además, es posible que deba abandonar, más pronto que tarde, su puesto como presidente del PP de Málaga. Juan Bravo, que también está en la cúpula de Alberto Núñez Feijóo como responsable económico, seguirá en el gabinete. Y también tiene muchas posibilidades de hacerlo Jesús Aguirre, que mostró su voluntad por continuar al frente de Salud. Hay más dudas sobre qué ocurrirá con Carmen Crespo en Agricultura, Marifrán Carazo en Fomento y Patricia del Pozo en Cultura. Y también hay quien ve a Loles López, secretaria general de los populares en Andalucía, con una cartera en el segundo Gobierno de Juanma Moreno.

Los tiempos del Parlamento

El nombre de Patricia del Pozo ha salido en las quinielas como posible presidenta del Parlamento. La elección del jefe del legislativo y del resto de la mesa de la Cámara marca el inicio del calendario de la XII Legislatura andaluza, que echa a andar el 14 de julio con la constitución del legislativo. Del Pozo ya fue vicepresidenta del organismo y conoce perfectamente su funcionamiento por su formación jurídica. Si ocupa ese puesto, con el control absoluto que le dan los 58 escaños al PP, será la encargada de marcar los tiempos, pero la voluntad de los populares es acortarlos al máximo.

El reglamento del Parlamento establece que el jefe de la Cámara debe consultar con los portavoces de los grupos para comprobar si hay un candidato con mayoría y, si lo hay, tiene 15 días para convocar el pleno de investidura. El PP no agotará estos plazos y la intención es que la sesión que reelegirá a Juanma Moreno como jefe del Ejecutivo se celebre en la tercera semana de julio. El político malagueño tomará posesión esa misma semana y nombrará a su gabinete de forma casi inminente. La intención es que pueda celebrarse un pleno ordinario en los días 27 y 28 de julio, antes del parón de agosto, mes inhábil para la actividad parlamentaria.

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Hasta entonces, habrá una serie de símbolos encaminados a mostrar esa voluntad de presumir de gestión que Juanma Moreno ha avanzado. La primera ley que volverá al Parlamento, explican fuentes del PP, será la Ley de Economía Circular, que estuvo a punto de aprobarse en su debate final a finales de abril. Decayó con la disolución de la Cámara. También irá en las próximas semanas la Ley de Función Pública. Esta norma es la más importante de las que tiene en cartera el todavía titular de Presidencia. Ya la había pactado con los sindicatos mayoritarios en la Administración, por lo que no habrá contestación, toda vez que el Gobierno podrá aprobarla sin problemas.

Y a la vuelta del parón estival, comenzará el proceso de elaboración del presupuesto, el primero con las manos libres de Juan Bravo, que no tendrá que buscar apoyos fuera de su partido.