La España que quiere comerse las uvas lejos de todo: 'boom' por pasar fin de año en una casa rural

Los años pasan y los tiempos cambian. La anual estampa familiar comiendo las uvas el 31 de diciembre ya no tiene por qué darse en la casa de uno mismo, ni de la abuela ni del tío. Cada vez más personas optan por pasar el último día del año con los suyos en un alojamiento rural. Alejados del barullo y de los ríos de gente que llenan las calles de las grandes ciudades. Este 2023 confirma una fuerte subida en los datos de personas que pasarán la nochevieja en casas rurales. Cinco puntos más de ocupación que en 2022, situándose en una media del 67% en todo el territorio nacional.

"Buscamos tranquilidad, alejarnos del ruido de la ciudad, desconectar de verdad", cuenta Fernando García, un sevillano que junto con su familia pasará fin de año en una casa rural en Huelva.

"Yo vivo el día a día en casa con el teletrabajo, con los niños corriendo por todo el salón y con mil cosas. Yo para desconectar necesito alejarme de mi rutina que es mi casa", explica María Jesús, su mujer, que también reconoce "que será un experimento", ya que este año es el primero que pasarán esta fecha fuera de su hogar.

A Fernando y Maria Jesús le recomendaron esta idea sus amigos Carlos y María, que ya han pasado varias veces fin de año en una residencia rural. "El primer año vinimos solo mi mujer, mis dos hijos y yo. Nos gustó y ahora se vienen también los tíos, los primos, nos traemos a los abuelos…", expone Carlos. "Lo hemos convertido en una buena tradición", recalca su mujer.

"Nos gustó y ahora se vienen también los tíos, los primos, nos traemos a los abuelos… se ha convertido en una buena tradición"

Murcia es la comunidad autónoma por excelencia donde más triunfa la idea de comerse las uvas en un alojamiento rural. Para este fin de año presenta un 89% de ocupación total, según los datos del estudio realizado por la plataforma digital de turismo rural EscapadaRural. Cataluña ostenta la segunda plaza de ocupación de casas rurales con un 82% y le siguen Andalucía y Comunidad Valenciana (ambas con un 76% de ocupación), siendo estas cuatro comunidades en la que más ha calado esta nueva tradición para finalizar el 2023.

"Muchas provincias españolas registran su pico de ocupación en la noche de fin de año", asegura Judith Monmany, responsable de comunicación de EscapadaRural. Argumenta que esto "confirma que disfrutar de esta celebración en una casa rural es una opción totalmente extendida entre familias y grupos de amigos".

Los desplazados para esta fecha suelen hacerlo a lugares cercanos a su residencia habitual, según indica Monmany. "A diferencia de lo que ocurre en otros períodos vacacionales más largos en los que solemos desplazarnos más lejos de casa para descubrir nuevos destinos, vemos que las provincias con mayores ocupaciones para fin de año son, principalmente, aquellas que cuentan con capitales muy pobladas. Es decir, que los desplazamientos para fin de año se realizan mayoritariamente cerca de casa para pasar la Nochevieja y regresar el día siguiente".

Por su parte, el norte de España es donde menos se ha asentado la idea de pasar el 31 de diciembre en un alojamiento rural. Galicia es el lugar donde menos ocupación habrá (un 48%), siendo la única comunidad por debajo del 50%. Le siguen a la cola La Rioja (50%), Cantabria (52%) y Asturias (53%).

En Barcelona o Las Palmas llega con fuerza la moda

Hasta ocho provincias españolas presentarán una ocupación superior al 80% para este final de año. Al líder indiscutible que es Murcia, con el 89% de residencias llenas, le acompañan en el podio dos provincias catalanas como son Barcelona (85%) y Girona (83%).

En las Islas Canarias, Las Palmas se sitúa como el gran bastión del turismo rural de Nochevieja con un 82% de ocupación, convirtiéndose en la cuarta provincia de España con el índice más alto. Un dato más que relevante teniendo en cuenta que las Islas Canarias está en un 68% de ocupación de todo el territorio español, solo un punto por encima de la media nacional.

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Huelva y Córdoba son las provincias de Andalucía donde más personas oirán las campanadas desde una residencia rural. El territorio onubense presenta un 82% de ocupación y el cordobés, un 81%.

A las provincias ya mencionadas se le unen Castellón y Segovia como lugares donde el turismo rural estará por encima del 80%. En el área castellonense hay un 81% de ocupación y en el área segoviana un 80%. En el resto de provincias españolas, hasta 25 de ellas registran datos por encima de la media nacional situada en un 67%.

"Es cuestión de que familias y grupos de amigos lo vayan probando. De aquí a unos años yo creo que habrá más gente que pase fin de año en una casa rural", opina Fernando, habitual en pasar con su familia la Nochevieja fuera de casa. "Y no solo te hablo de familias y gente mayor, creo que a los jóvenes les podría molar también. Con la barbaridad que cuesta ahora la entrada para una fiesta de fin de año, se la pueden montar con sus amigos por su cuenta en una casa rural", esgrime con una visión optimista del crecimiento en los próximos años de personas que se unan a esta práctica.