Robe vence a Live Nation y se libra de pagar 4,3 millones por la gira fallida de Extremoduro

Robe Iniesta ha ganado el pulso a Live Nation España. Tras más de dos años de acusaciones cruzadas por la cancelación de la gira de despedida de Extremoduro, un juzgado de Pamplona acaba de concluir que el cantante no tuvo la culpa. Live Nation reclamaba 4,3 millones de euros a Iniesta y su empresa por la resolución del contrato y por supuesta difamación, pero la jueza apunta a que no procede "indemnización alguna".

La sentencia, a la que ha tenido acceso El Confidencial, se notificó el pasado 15 de noviembre. Casualidad o celebración, el que fuera vocalista de Extremoduro adelantó al día siguiente una canción de su nuevo disco: Nada que perder.

Esta canción marca —por ahora— el final de una batalla que se remonta a 2019, cuando Extremoduro anunció su separación y lanzó la gira de despedida. Programada en principio para 2020, la pandemia obligó a aplazarla y en 2021 se canceló de forma definitiva: Iniesta, que poco después anunció una gira en solitario, acusó a Live Nation de tomar esta decisión de manera unilateral, mientras que la empresa se escudó en que la "negativa" del cantante a fijar otra fecha hacía imposible su celebración.

Los problemas con la gira provocaron un nuevo choque entre los miembros de Extremoduro y dejaron miles de entradas en el limbo. En marzo de 2022, cansado ya del cruce de comunicados, Live Nation fue un paso más allá y demandó a Iniesta para reclamarle 1,4 millones por la resolución del contrato y otros 2,9 por "actos de difamación". El propio cantante resumió los argumentos que contenía la demanda dos meses después a la agencia EFE: "Básicamente, por llamarles zoquetes".

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Live Nation aportó un informe pericial al juzgado sobre cómo las declaraciones de Iniesta estaban "perjudicando su fama", pero la sentencia rechaza todas sus pretensiones: "No se puede apreciar ninguna frase o expresión injuriosa, calumniante ni ofensiva, sino discrepancias entre las partes". Para la jueza, Iniesta se limitó a lanzar "opiniones enfocadas a explicar públicamente su opinión en las negociaciones establecidas".

Iniesta contra Iñaki Uoho

La sentencia refleja el enfrentamiento entre Iniesta e Iñaki Antón, Uoho, guitarrista de los grupos Platero y Tú y Extremoduro. El 21 de noviembre de 2019, Live Nation firmó con ambos la compra de la gira, pero sus desavenencias no tardaron en aflorar con los aplazamientos: por un lado, Iniesta apoyaba la devolución de entradas y advertía a la compañía de que no pusiera trabas y, por otro, Antón se comprometía a ofrecer nuevas fechas tantas veces como fuera necesario.

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Al tratarse de uno de los firmantes del contrato, Live Nation también incluía a Antón y su empresa como demandados, pero a ellos no les pedía que fueran condenados a ningún pago. De hecho, el artista se allanó "a la totalidad de la demanda" y apoyó sus reclamaciones, lo que solo dejó tres de los demandados contra Live Nation: Iniesta, su empresa Producciones 16562 y la discográfica Dromedario Records, a la que exigían el pago de otros 147.378 euros por la cancelación de los conciertos.

Los tres basaron su defensa en que la gira se había ido aplazando como "consecuencia de la pandemia" y en que fue Live Nation la que procedió "a la resolución unilateral del contrato" en 2021. La sentencia da por buenos sus argumentos y remarca que al acuerdo inicial se incluyeron anexos para atender "la crisis sanitaria", lo que prueba que "la voluntad de las partes no era dejar sin efecto el contrato".

2023 era el año bueno

La conclusión es simple: la empresa pudo aplazar los conciertos en lugar de suspenderlos. "Resulta evidente que el contrato no deviene ineficaz, que puede llevarse a efecto y que todas las circunstancias de la pandemia que llevaban a un aplazamiento de la gira a la espera de la evolución de la pandemia se tuvieron en cuenta a la hora de suscribir los dos anexos del año 2020". "No hay una imposibilidad de cumplimiento del objeto del contrato y no se genera en la demandada una vinculación a cumplir lo imposible, dado que actualmente los conciertos se pueden celebrar".

2023 hubiese podido ser el año del adiós de Extremoduro, pero todo apunta a que ya es demasiado tarde para despedirse. "No puedo perder nada, que vengo de la nada y solo vivo provisionalmente. / No puedo caer más bajo, que vengo del fracaso", canta Iniesta en su última canción.