Cisma en Extremoduro. Iñaki promete que intentará que haya gira: "Os lo debemos"

A finales de diciembre de 2019, cuando la vida era lo que se consideraba 'normal', Extremoduro dio un duro golpe a sus seguidores anunciando su separación como banda. En un ejercicio de una de cal y otra de arena, la que ha sido y es uno de los grupos más míticos del rock estatal informaba de una gira de despedida, con conciertos por toda la geografía española a lo largo del año 2020. Tal fue el recibimiento de esta noticia que las entradas para las actuaciones en grandes ciudades, como Madrid, se agotaron en poco tiempo y decidieron sumar más conciertos, con el objetivo de atender a toda la demanda. No obstante, se declaró una pandemia mundial y toda la actividad cultural quedó paralizada tal y como la conocíamos.

Tuvieron que pasar meses hasta que se empezaron a dar conciertos, aunque nunca en las condiciones en las que se habían dado hasta marzo de 2020: con aforos muy reducidos, en espacios pequeños —a excepción de actuaciones como la de Raphael, en la que se juntaron cerca de 5.000 personas— y con mucha separación entre los asistentes, además de la mascarilla obligatoria en todo momento, pero esto no era suficiente para Extremoduro. La idea de Robe Iniesta, la cara más visible de la banda, era "tocar por cojones", fuera cuando fuera, en septiembre de 2020, en 2021... cuando se pudiera celebrar un concierto sin mascarillas, sin medidas de seguridad, en condiciones prepandemia. Después de tener que verse obligados a aplazar la gira en dos ocasiones, la noche de este martes, Robe anunciaba desde la cuenta oficial del grupo que ya no estaba "tan seguro" de poder tocar "por cojones", asegurando que, al menos en 2021, nadie pordrá ir a un concierto de 'Extremo'.

"Ya hemos aplazado dos veces (...). No tiene sentido volver a poner fechas para 2022 sin tener la más mínima seguridad de que se vaya a poder a hacer. No queda otra que adaptarse y hacer otro tipo de espectáculos más acorde con la situación que estamos atravesando. Y cuando todo se arregle, reprogramaremos la gira si es que para entonces todavía sigue teniendo algún sentido". Con estas palabras, Robe suspendía de manera indefinida el adiós del grupo sugiriendo, además, que el siguiente paso era la devolución de las entradas adquiridas. "Confiamos en que la empresa promotora, Live Nation, no os ponga ningún problema para recuperar el importe íntegro".

Apenas doce horas después, se alzó la voz de Iñaki Antón, alias 'Uoho', guitarrista del grupo (anteriormente también de Platero y tú y en la actualidad, de Inconscientes), para contrarrestar el pesimismo de Robe. "Tras leer esta mañana el comunicado unilateral de Robe, del que no tenía ningún conocimiento y cuyos plurales en absoluto me conciernen, me veo en la obligación de transmitiros que mi decisión firme durante todo este tiempo ha sido realizar la gira de despedida de Extremoduro en cuanto sea posible y la covid lo permita, ofreciendo fechas tantas veces como sea necesario y retrasándola cuanto haga falta siempre que nos veamos obligados por la situación sanitaria", ha escrito en su perfil de Facebook. "Seguiré intentando que así sea, creo que os lo debemos".

La decisión, aparentemente unilateral, de Robe no ha tenido muy buena acogida entre los fans, especialmente en lo que al tono pesimista se refiere. "Robe, no me jodas. No nos digas que a lo mejor cuando se puedan hacer conciertos la gira de Extremoduro "puede que no tenga sentido". Un concierto, una gira, un disco, una canción de Extremoduro siempre tiene sentido", escribe en su cuenta de Twitter Al Varone, miembro del grupo de rock urbano Calentón. "Lo de Extremoduro se esperaba, pero ese comunicado que deja la incógnica de si habrá gira de despedida duele como una puñalada en el pecho", escribe otro usuario de las redes sociales.