Es noticia
El PSOE celebra las primeras reuniones con los grupos minoritarios para atar su investidura
  1. España
A TRAVÉS DEL NÚMERO DOS DE BOLAÑOS

El PSOE celebra las primeras reuniones con los grupos minoritarios para atar su investidura

El secretario de Estado de Relaciones con las Cortes en funciones, Rafael Simancas, se ha sentado durante los últimos días con los representantes de partidos como EH Bildu y BNG

Foto: Rafael Simancas y Félix Bolaños. (EFE/Javier Lizón)
Rafael Simancas y Félix Bolaños. (EFE/Javier Lizón)
Más información
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Sin esperar a que fracase la investidura de Alberto Núñez Feijóo, el PSOE ha comenzado ya a explorar el apoyo a Pedro Sánchez de los partidos del bloque soberanista. A través del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes en funciones, Rafael Simancas, los socialistas se han sentado durante los últimos días con los representantes de partidos como EH Bildu y BNG, según fuentes próximas a los protagonistas de dichos encuentros. Con Coalición Canaria hubo también contactos, pero el pasado mes de agosto, en el marco de la negociación para la Mesa del Congreso. Les ofrecieron a cambio de su voto la gratuidad del transporte público durante el próximo año, sin acceder a firmar la "agenda canaria", como sí hizo el PP, con quien gobiernan en su territorio. Los nacionalistas canarios, que han pactado el apoyo a Feijóo en su investidura, se han abierto a negociar igualmente cuando Sánchez reciba el encargo del jefe del Estado.

El número dos del ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, que encabeza las negociaciones para la investidura junto a la titular de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, se está encargando de abrir el camino. Con alguno de estos partidos ha mantenido más de un contacto para "abordar diferentes cuestiones". Desde Ferraz y la Moncloa, apuestan por mantener su estrategia, basada en la discreción y no dar por oficializadas las negociaciones hasta que se produzca la ronda de contactos con Felipe VI para fijar la posible investidura de Pedro Sánchez. Fuentes de la dirección parlamentaria del PNV, en cambio, apuestan por iniciar las negociaciones formales inmediatamente después de la investidura de Feijóo, sin esperar al encargo de Felipe VI.

Foto: El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, durante la primera sesión del debate de investidura. (EFE/Sergio Pérez)

Las mismas fuentes jeltzales en el Congreso consideran que la metodología más fructífera para las negociaciones con el bloque soberanista sería que el PSOE comenzase cerrando los acuerdos menos complejos. Un paquete en el que se incluyen, al reconocer que la parte más difícil será el acuerdo con los independentistas catalanes, bajo la premisa de la ley de amnistía. No solo por desconocer hasta dónde está dispuesto a llegar el PSOE, apuntan en el PNV, sino por sus dudas sobre si Carles Puigdemont "sabrá jugar la pelota". Otro de los negociadores del bloque soberanista avala la metodología de ir pactando primero con el resto de formaciones gallegas y vascas, lo que añadiría presión a ERC y Junts a modo de efecto dominó. Con todo, este mismo diputado del bloque soberanista advierte de que, debido a la pugna entre ambos partidos, los dos forzarán las negociaciones para intentar convertirse en los últimos en pactar.

Las conversaciones con ERC y Junts se están tratando de encapsular, aunque los republicanos se han apartado de la regla de la discreción para intentar recuperar el protagonismo perdido frente al partido del expresident catalán. Si la pasada semana era el presidente del ERC, Oriol Junqueras, quien daba por hecho el acuerdo con el PSOE para una ley de amnistía, este lunes la portavoz, Raquel Sans, iba un paso más allá. En rueda de prensa, afirmaba que "corren documentos" entre los negociadores porque la ley se encontraría en fase técnica. Asimismo, concluía que "la parte política ya está resuelta".

Foto: Pedro Sánchez, en la fiesta de la rosa de Sigüeiro. (EFE/Lavandeira jr)

En la Moncloa, no son ajenos a la "pugna" entre los dos partidos independentistas catalanes. Una competición que, reconocen, "dificulta" las negociaciones. La lucha por quién capitaliza los acuerdos y consigue arrancar compromisos sin mostrar cesiones propias "es la pugna", según subrayaba una ministra socialista cercana a las negociaciones. Los republicanos, por un lado, tienen que poner en valor su estrategia durante los últimos años, mientras que el empeño de Junts pasa por censurarlo y tratar de demostrar que no han conseguido ningún avance por la independencia.

Desde el PNV, apuestan por iniciar la negociación formal con el PSOE sin esperar al encargo del jefe del Estado

La gobernabilidad les importa relativamente poco, lo que les importa es quién tiene la hegemonía en Cataluña, señalan las mismas fuentes. A ello añaden que están compitiendo con vistas a las próximas elecciones catalanas. Una prioridad que no hace más que generar incertidumbre en el resultado de las conversaciones. Entre los potenciales socios, nadie quiere descartar nada, tampoco la repetición electoral. Pedro Sánchez, en cambio, mantiene que no prevé nuevas elecciones, como insistía el pasado domingo desde Barcelona en la celebración de la Fiesta de la Rosa del PSC: "Va a haber un Gobierno socialista".

Está previsto que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, tome la palabra este martes tras la intervención de Feijóo. Según fuentes parlamentarias, lo haría en calidad de presidente y posteriormente, por el grupo socialista, sería Patxi López quien interviniese. En el PSOE se centran en cargar contra la "pérdida de tiempo" de Feijóo en su investidura, al no conseguir ningún voto más de los 172 con los que partía, y redoblan sus críticas con lo que entienden como apelaciones al transfuguismo dentro de sus filas. "Apelan a la peor de las corrupciones, que es el transfuguismo. El PP echó a su anterior líder por denunciar un caso de corrupción de la señora Ayuso, y ahora vemos a Feijóo apelar al transfuguismo", censuraba Sánchez el pasado domingo en Barcelona. La misma línea que seguía la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, este lunes en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.

Foto: Sánchez, en Gavá durante la Fiesta de la Rosa del PSC. (EFE/Toni Albir)

Los socialistas siguen sin mencionar la amnistía, aunque la pasada semana Sánchez giraba el barco en esa dirección. Durante una comparecencia ante los medios desde Nueva York en los márgenes de la Asamblea General de la ONU, el presidente del Gobierno en funciones lanzó el mensaje de que estaba dispuesto a dar más pasos en la desjudicialización del procés. Su argumento fue que "una crisis política nunca tuvo que derivar en acción judicial ni en una judicialización, como vimos en toda esta crisis". Para dejar claro su viraje, defendió esta posición al ser preguntado sobre si mantenía, como antes de las elecciones, que Puigdemont debe responder ante la Justicia.

El escaño bisagra

El PSOE ya ensayó una mayoría de 179 escaños en el pleno para aprobar el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso. Lo hizo con los partidos del bloque del no a la investidura de Feijóo y a ellos sumó a Coalición Canaria. El PSOE retrató con esta mayoría de 179 escaños el aislamiento de Feijóo y dibujó un escenario de cara a la investidura de Pedro Sánchez en que el voto de Coalición Canaria le permitiría reducir su dependencia de Junts. Los nacionalistas canarios cuentan con un solo escaño en el Congreso, pero suficiente para que, si apoyan la hipotética investidura de Sánchez, el PSOE pase a necesitar solo la abstención de los siete diputados del partido de Carles Puigdemont en lugar de su voto a favor.

Foto: Cristina Valido, diputada de Coalición Canaria en el Congreso. (EFE /Ramón de la Rocha)

De cara a la investidura, fuentes de la Moncloa entienden que no modificaría sustancialmente las condiciones de los junteros para dar su apoyo, pero sí que facilitaría la gobernabilidad el resto de la legislatura. El último editorial de El Socialista, la publicación semanal de Ferraz, arrancaba con la reflexión de que "si las votaciones en el Congreso de los Diputados siguen por este camino, puede que la investidura de Alberto Núñez Feijóo se resuelva con resultado abultado. Si en la votación de la Mesa del Congreso el PP perdió los 33 votos de Vox, en las siguientes ha cedido los de Coalición Canaria, e incluso alguno de sus propios diputados no pulsó el botón que tocaba y le indicaba el jefe de bancada".

Desde el partido que lidera el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, no tienen nada claro que el PSOE vaya a acceder a sus exigencias para la investidura. Estas pasan, en primer lugar, por transferir las partidas de los actuales presupuestos que consideran todavía no traspasadas. Según sus cálculos, se trataría de hasta 776 millones de euros. De las partidas que no puedan ejecutar por falta de tiempo, reclaman un compromiso para incluirlas en las siguientes cuentas. Una vez aseguradas dichas transferencias, Coalición Canaria reclamará que Sánchez firme la misma agenda canaria que pactaron con el PP. Solo con estas condiciones accederán a cambiar de bloque.

Sin esperar a que fracase la investidura de Alberto Núñez Feijóo, el PSOE ha comenzado ya a explorar el apoyo a Pedro Sánchez de los partidos del bloque soberanista. A través del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes en funciones, Rafael Simancas, los socialistas se han sentado durante los últimos días con los representantes de partidos como EH Bildu y BNG, según fuentes próximas a los protagonistas de dichos encuentros. Con Coalición Canaria hubo también contactos, pero el pasado mes de agosto, en el marco de la negociación para la Mesa del Congreso. Les ofrecieron a cambio de su voto la gratuidad del transporte público durante el próximo año, sin acceder a firmar la "agenda canaria", como sí hizo el PP, con quien gobiernan en su territorio. Los nacionalistas canarios, que han pactado el apoyo a Feijóo en su investidura, se han abierto a negociar igualmente cuando Sánchez reciba el encargo del jefe del Estado.

PSOE
El redactor recomienda