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Yolanda Díaz se impone a las ministras moradas entre los votantes de Unidas Podemos
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Díaz y Montero son las más conocidas

Yolanda Díaz se impone a las ministras moradas entre los votantes de Unidas Podemos

La ministra de Trabajo supera a Ione Belarra e Irene Montero en valoración y, con mucho, como opción preferida para ser presidenta del Gobierno, según el CIS. En Podemos, hay quien reconoce que Iglesias eclipsa a su secretaria general

Foto: Yolanda Díaz, Irene Montero y Ione Belarra, en una reunión en el Congreso. (EFE/Mariscal)
Yolanda Díaz, Irene Montero y Ione Belarra, en una reunión en el Congreso. (EFE/Mariscal)

La cuenta atrás para que la izquierda aclare cómo concurrirá a las elecciones generales previstas a final de año tiene cada vez menos hojas, pero cada vez parece más claro que Yolanda Díaz tiene casi toda la ventaja. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo es la preferida para los votantes del espacio que hay a la izquierda del PSOE, aunque ella rechaza ese arrinconamiento. El barómetro del CIS de enero apunta a que la gallega tiene mejor valoración entre los electores de Unidas Podemos que las ministras moradas, Ione Belarra e Irene Montero. Y mucho más apoyo cuando se pregunta por su valoración como candidata a presidenta del Gobierno.

Casi la mitad de los votantes que optaron por Unidas Podemos en las generales de noviembre de 2019, el 49,7%, cree que Yolanda Díaz es la mejor opción de este espacio para conquistar la Moncloa. Le sigue Pedro Sánchez, con el 16,3%, lo que da pistas sobre el buen cartel que tiene el jefe del Ejecutivo entre los apoyos morados. Y la ministra de Igualdad, Irene Montero, es la preferida para el 1,3% de quienes cogieron la papeleta de UP hace poco más de tres años. Esta cifra no es muy halagüeña para la apuesta de Podemos por hacer candidata a Montero si no hay acuerdo para ir bajo el paraguas de Sumar o en una coalición que encabece la vicepresidenta segunda.

Foto: Ada Coalu y Yolanda Díaz, este sábado, en Barcelona. (EFE/Quique García)

No es el único dato del CIS que apuntala su primacía como candidatable. Díaz, sin carné de Podemos y militante del PCE, recibe una mejor puntuación de los electores de Unidas Podemos que sus compañeras de gabinete con carné morado. El sondeo de enero otorga a Díaz un 4,87 de valoración general, pero en los apoyos de Unidas Podemos logra su mejor nota, un 7,44.

Es casi un punto más que el 6,46 que recibe entre los suyos Ione Belarra, secretaria general del partido y ministra de Derechos Sociales. La ventaja con Irene Montero es incluso mayor, ya que la titular de Igualdad se queda con un 6,3 en el sondeo elaborado por el CIS entre los días 2 y 12 de enero. Esto es, cuando el goteo de rebajas de condenas de agresores sexuales y las excarcelaciones, tras la entrada en vigor de la ley del solo sí es sí, ya sumaba más de 150 casos.

Yolanda Díaz es la segunda ministra más valorada del gabinete de Sánchez, mientras que Montero es la segunda con la nota más baja

Hay un dato llamativo cuando se atiende a las valoraciones de los ministros del gabinete de Sánchez en el barómetro que elabora el organismo de José Félix Tezanos. Yolanda Díaz e Irene Montero son las dos integrantes del Gobierno con mayor nivel de conocimiento. La titular de Igualdad encabeza esta clasificación, ya que el 93,9% de los encuestados afirma saber quién es. Díaz arroja un porcentaje similar, con un 92,5%. Entre los ministros del PSOE, solo Fernando Grande-Marlaska (86,4%) y Margarita Robles (82%) se acercan a esos números.

Belarra y Montero, las peor valoradas

Ese alto nivel de conocimiento de las dos principales dirigentes del ala izquierda del Ejecutivo tiene una doble vertiente cuando se mira la valoración general que reciben de los participantes en el sondeo. La gallega es la segunda ministra más valorada del equipo de Sánchez, con un 5,11, solo superada por la titular de Defensa, que logra un 5,16. En el otro extremo están precisamente Irene Montero, con un 3,69, y Ione Belarra, con un 3,63, arrebatando a Montero el liderazgo de este ranking a la baja.

Foto: Alberto Garzón, Yolanda Díaz y Ada Colau. (EFE/Toni Albir)

La buena noticia para la titular de Igualdad es que el barómetro de enero le sirve para recuperar cierto oxígeno después de tres sondeos seguidos viendo cómo se hundía su valoración. Esto, en parte, tiene que ver con la recuperación que ha tenido la valoración entre los votantes de UP, que ha pasado del 5,84 de abril del año pasado al 6,9 de este mes. Los morados están convencidos de que en los últimos meses la número dos de Podemos se ha visto reforzada de cara a su electorado, y de que es su mayor activo político.

Belarra también recupera puntuación sobre el sondeo de octubre, donde puso su suelo, con un 3,42, y lo hace gracias a la misma mejora entre sus afines, que le dan un 4,46. Díaz, por su parte, ve caer levemente la nota que recibe de los votantes de Unidas Podemos, pero aún es mucho más alta (7,44) que la de sus compañeras.

El papel de IU ha quedado claro después de que Garzón apoyase la creación de una mesa de partidos con negociación multilateral

Estos datos llegan cuando los diferentes sujetos del espacio político empiezan a poner sus cartas encima de la mesa, con Alberto Garzón e IU presionando por activar una mesa de partidos que permita alcanzar un acuerdo para aglutinar todo el espacio de la izquierda bajo el paraguas de Sumar. Los morados insisten, en su lugar, por una coalición electoral que les permita mantener sus siglas, convencidos de que todavía son un patrimonio valioso. En Podemos insisten en que la ausencia de su nombre en la papeleta de las andaluzas fue uno de los motivos del fracaso de la coalición de izquierdas. Díaz, mientras tanto, da tímidos pasos hacia el anuncio de su candidatura, pero se guarda los ases en la manga.

Y así se acercan los distintos actores al momento crucial después de meses intercalando acercamientos y guerras frías. Casi siempre, en particular desde noviembre, con Pablo Iglesias planeando sobre muchos de sus movimientos, presionando a Díaz para que desvele sus planes.

Iglesias no acudirá al noveno cumpleaños de Podemos

El partido morado cumplió este martes nueve años desde la presentación del manifiesto Mover ficha, el germen del partido, inscrito en el registro del Ministerio del Interior un par de meses después. Desde entonces, y a pesar de la salida de Iglesias de la secretaría general en mayo de 2021, y de que este encumbrara a Díaz como líder del espacio en el Gobierno, la sombra del exvicepresidente ha sido alargada.

Foto: Pablo Iglesias. (EFE/Mariscal)

Iglesias no participará en el noveno cumpleaños del partido que fundó, como confirman fuentes moradas. En 2022, en plena campaña para las elecciones de Castilla y León, el partido no celebró un gran acto para conmemorar su nacimiento, como sí hará este año. Oficialmente, se trata de un acto más de su gira La fuerza que transforma, pero el mitin de este sábado, en Zaragoza, tendrá algo de celebración también.

La propia Belarra y Pablo Echenique, portavoz parlamentario de Unidas Podemos, subirán al escenario para reivindicar su espacio político y sus logros, y para intentar capitalizar las medidas del Gobierno de coalición. El papel de Belarra es incomparable al hiperliderazgo de Iglesias, histórico del espacio morado. En Podemos, asumen que la ministra de Derechos Sociales ostenta un liderazgo de "transición", y que guiará al partido hasta el cambio de ciclo, nada que ver con la etapa de siete años y medio de Iglesias al frente del partido.

También hay quienes reconocen que el peso mediático de Iglesias, que dirige su propio pódcast y colabora en varios medios de comunicación, y que ha sido el principal rostro público de su partido desde su nacimiento, "eclipsa" a Belarra y a otras dirigentes. El exvicepresidente segundo, fuera de la política institucional, cuenta aún con un gran predicamento entre sus votantes, y suele acaparar titulares cada vez que toma la palabra, aunque coincida con dirigentes en activo del peso de la propia Montero, como ocurrió durante la Uni de Otoño del partido.

La cúpula del partido siempre responde que Iglesias tiene sus propias opiniones, si bien en la inmensa mayoría de las ocasiones son compartidas. En otros casos, como ocurrió durante las negociaciones del escudo social frente a la crisis de Ucrania, el ex secretario general morado llegó a anunciar en medios de comunicación medidas que su propio espacio aún ni siquiera había desvelado. Y su salida del cargo fue precipitada, traumática para el espacio. Díaz tampoco ha cogido las riendas del grupo parlamentario, defiende propuestas propias y otras compartidas por Unidas Podemos, y no es Belarra quien fue ungida como líder de Unidas Podemos, sino la vicepresidenta segunda. Es un vacío difícil de llenar.

La cuenta atrás para que la izquierda aclare cómo concurrirá a las elecciones generales previstas a final de año tiene cada vez menos hojas, pero cada vez parece más claro que Yolanda Díaz tiene casi toda la ventaja. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo es la preferida para los votantes del espacio que hay a la izquierda del PSOE, aunque ella rechaza ese arrinconamiento. El barómetro del CIS de enero apunta a que la gallega tiene mejor valoración entre los electores de Unidas Podemos que las ministras moradas, Ione Belarra e Irene Montero. Y mucho más apoyo cuando se pregunta por su valoración como candidata a presidenta del Gobierno.

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