El PSOE decreta tregua hasta el congreso federal en las regiones donde habrá lío
El consenso para elegir los compromisarios del congreso federal de los socialistas se impone en casi todas las provincias. Se aplazan para después las batallas en Madrid, Galicia y otros sitios como Cantabria, La Rioja y Murcia
Pedro Sánchez tendrá alfombra roja en el congreso federal del PSOE del próximo mes de octubre, pero tras el cónclave en que saldrá ratificado como secretario general y con una profunda renovación de las estructuras de dirección se sucederán los menos apacibles congresos regionales. Habrá batalla por el liderazgo al menos en Madrid y Galicia, a la espera de lo que ocurra en otras plazas como Cantabria, La Rioja y Murcia. Sin embargo, se ha decretado una tregua para no visibilizar estas disputas en el gran encuentro de los socialistas, que se celebrará en Valencia del 15 al 17 de octubre, con listas de integración de delegados en la práctica totalidad de provincias. De entre estos puntos calientes, solo en Cantabria se ha presentado una propuesta alternativa a la oficialista del secretario general, Pablo Zuloaga, la encabezada por Teresa Montero, exalcaldesa de Molledo. Este lunes se proclamarán los cabeza de lista de delegación para la cita federal tras la recogida de avales.
Un armisticio a través de listas limpias que, en el caso del gallego Gonzalo Caballero, quien se resiste a dar un paso atrás tras perder el respaldo de Ferraz para su reelección, no ha sido sencillo. Al contrario que en 2017, Caballero no encabezará ninguna plancha por la falta de apoyos internos. Si bien consiguió aplazar la batalla a través de listas de consenso en tres de las cuatro provincias (menos en Ourense, por disputas al margen del congreso regional) e integrar en las encabezadas por los críticos a la mayoría de nombres que propuso. Se ahorra el trauma de tener que votar y tampoco tendrá que acudir a Valencia solo en calidad de secretario general del PSdG y sin plaza, al cerrar la lista de Pontevedra que lidera el alcalde de Vigo. Su tío, Abel Caballero.
Después de intentar adelantar las primarias gallegas para situarse antes del congreso federal, sin éxito, Caballero acudirá tocado al cónclave de Valencia, pero no hundido. El rival que coge más fuerza para disputarle el liderazgo del partido en Galicia, puesto en duda tras descender a tercera fuerza en las pasadas autonómicas, es Valentín González Formoso. Encabezará la lista de delegados por A Coruña, provincia donde preside la diputación.
A Coruña es la provincia gallega que más delegados aporta y en la que Caballero situó finalmente a un tercio de sus afines. Con todo, la consigna repetida por el actual secretario general es que no es momento de “aparentar ningún tipo de división artificial”. Formoso conforma el sector crítico, en el que también se incluyen el delegado del Gobierno en Galicia y uno de los encargados de redactar la ponencia marco del congreso federal, José Manuel Miñones, y el ex secretario general José Ramón Gómez Besteiro.
En Madrid, también se ha evitado una guerra de delegados a través de una lista de consenso que encabezará Fran Martín, nuevo hombre fuerte en el Gobierno de Pedro Sánchez como secretario general de la Presidencia tras la remodelación del Ejecutivo el pasado mes de julio y secretario de Organización de la comisión gestora. La presidenta de la gestora, Isaura Leal, no puede ser compromisaria al formar parte de la ejecutiva federal saliente del PSOE.
Los dos competidores que ya se han lanzado a la carrera por la secretaría general de los socialistas madrileños, el alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala, y el diputado regional Juan Lobato, accedieron a la fórmula decidida por la gestora para una lista única. No sin tensiones. "Un claro mensaje de unidad y de la mejor voluntad para trabajar de cara a los próximos meses y a los próximos años", recalcaba el propio Martín tras presentar esta fórmula.
Ferraz y la gestora buscan la neutralidad en esta batalla por el liderazgo en Madrid, en 'shock' tras su descalabro electoral
Ferraz y la gestora madrileña buscan la neutralidad en esta batalla por el liderazgo del PSOE en Madrid, que sigue en 'shock' tras su descalabro electoral y el sorpaso de Más Madrid arrebatándole el liderazgo de la oposición a Díaz Ayuso. Tras ello, se aplicó el rodillo en la organización, reseteándola por completo y descabalgando tanto al que era su secretario general, José Manuel Franco, como al portavoz en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo.
Desde entonces, es una gestora la encargada de pilotar la organización hasta su próximo congreso regional, en el que los principales rivales serán Ayala y Lobato. Sobre este último ya se están escenificando apoyos más o menos subrepticios desde el sector oficialista. La pretendida neutralidad e imagen de unidad interna que se busca mantener, al menos hasta pasar el congreso federal, quedaba reflejada en un tuit desde la cuenta del PSOE en el ayuntamiento, donde la portavoz municipal, Mar Espinar, daba su apoyo a Lobato. El congreso autonómico se celebrará el 13 y 14 de noviembre, menos de tres semanas después del federal, hasta el que se ha decretado la tregua.
El reglamento federal de desarrollo de los estatutos, con la modificación aprobada el pasado mes de enero, comprende la creación de la 'Agrupación Municipal de Gran Ciudad'. En Madrid, se prevé constituirla y todas las miradas están puestas en la delegada del Gobierno, Mercedes González, con amplia experiencia en el Ayuntamiento de Madrid como concejala y en la que Ferraz tiene depositadas grandes esperanzas. Su nombramiento al frente de la Delegación del Gobierno en Madrid el pasado mes de marzo se interpretó ya como un escaparate de cara a una futura candidatura.
La falta de consenso en Cantabria para presentar una lista única abre la puerta a una disputa por la secretaría general, que ocupa Jorge Zuloaga. Si bien su rival ha rechazado de momento dar este paso, limitándose a remarcar la necesidad de que se presente una alternativa. En Murcia, algunos sectores críticos buscan dar la batalla contra el actual secretario general, Diego Conesa, señalado tras el fiasco de la fallida moción de censura, mientras que en La Rioja se busca acabar con la actual bicefalia y el secretario general, Francisco Ocón, ya ha comunicado que no se presentará, dejando vía libre a la presidenta regional, Concha Andreu.
Los barones críticos optarán a la reelección sin vislumbrarse oposición interna, una vez disipada la incógnita de Aragón, donde Javier Lambán ya ha anunciado que volverá a presentarse y será el único candidato. La entrada en el Ejecutivo tras la remodelación del pasado mes de julio de políticas como Pilar Alegría e Isabel Rodríguez se interpretó como una amenaza para los barones Javiar Lambán en Aragón y Emiliano García-Page en Castilla-La Mancha, respectivamente. No será el caso en los venideros congresos regionales, pero sí emergen como hipotéticos recambios a futuro en caso de que sea necesario, al igual que la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, en la Comunidad Valenciana.
Pedro Sánchez tendrá alfombra roja en el congreso federal del PSOE del próximo mes de octubre, pero tras el cónclave en que saldrá ratificado como secretario general y con una profunda renovación de las estructuras de dirección se sucederán los menos apacibles congresos regionales. Habrá batalla por el liderazgo al menos en Madrid y Galicia, a la espera de lo que ocurra en otras plazas como Cantabria, La Rioja y Murcia. Sin embargo, se ha decretado una tregua para no visibilizar estas disputas en el gran encuentro de los socialistas, que se celebrará en Valencia del 15 al 17 de octubre, con listas de integración de delegados en la práctica totalidad de provincias. De entre estos puntos calientes, solo en Cantabria se ha presentado una propuesta alternativa a la oficialista del secretario general, Pablo Zuloaga, la encabezada por Teresa Montero, exalcaldesa de Molledo. Este lunes se proclamarán los cabeza de lista de delegación para la cita federal tras la recogida de avales.