Cospedal dice que contactó con Villarejo porque temía que estuviesen espiando al PP

La ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal ha declarado este miércoles en la Audiencia Nacional como investigada en el caso Kitchen y ha desvinculado al PP y a ella misma del presunto espionaje al extesorero de la formación, Luis Bárcenas. En su lugar, ha admitido sus contactos con el comisario Villarejo, pero ha dicho que se reunió con él porque estaba preocupada por los posibles espionajes que estaba sufriendo su partido. Asegura que conoció a través de su marido, ya que se conocen desde hace muchos años.

Según informan fuentes jurídicas presentes en su declaración, Cospedal le ha dicho al juez que el PP no tiene nada que ver con los seguimientos a Bárcenas y su entorno. Tanto ella como su marido, diversos mandos policiales y la entonces cúpula del Ministerio del Interior están imputados por una operación parapolicial desarrollada entre 2013 y 2015 que tenía por objeto arrebatar al extesorero documentación sensible que pudiese afectar al PP y al presidente del Gobierno Mariano Rajoy.

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Las preguntas del magistrado se han centrado principalmente en la documentación que presuntamente le robaron los policías a Bárcenas con el conocimiento o consentimiento de sus superiores y el PP. Cospedal ha negado la participación del partido y lo ha justificado en que el extesorero, con el que ella mantuvo una agria enemistad personal, tuvo almacenadas durante mucho tiempo cajas con documentación en una sala de la sede del PP en la calle Génova de Madrid, incluso después de abandonar el cargo. Ha dado a entender que si el partido hubiese estado interesado en arrebatarle documentos, lo hubiese hecho sin necesidad de movilizar a la cúpula policial.

En sus declaraciones como víctima ante el juez, Bárcenas sostuvo que en marzo de 2013 mandó a su chófer a recoger esas cajas para que las llevase a un taller de restauración que tenía su mujer. Las pesquisas policiales y de la Fiscalía Anticorrupción indagan si los policías implicados acudieron a ese lugar a robar documentos. Meses después del traslado de esas cajas, el extesorero ingresó en prisión y se puso en marcha la operación Kitchen. Incluyó la captación como confidente del chófer, Sergio Ríos, con el pago de fondos reservados.

Bárcenas sostuvo que en marzo de 2013 mandó a su chófer a recoger esas cajas para que las llevase a un taller de restauración que tenía su mujer

Los vínculos de la que fuera secretaria general del PP y Villarejo se remontan al menos al año 2009. Este periódico publicó en 2018 audios captados por el polémico comisario cuando todavía estaba en activo reunido con la dirigente en su despacho de la sede central del partido. El nexo entre ellos era el esposo de la política, el empresario Ignacio López del Hierro. En las conversaciones, Villarejo planteaba, entre otras cosas, la posibilidad de boicotear la trama Gürtel que había sido desarticulada ese año y que marcó el destino del PP durante una década.

En otro momento de su interrogatorio, De Cospedal ha dicho que sus conversaciones con Villarejo eran de temas sociales y que no sabía que en ese momento se encontrase en activo en el Cuerpo, aunque tenía conocimiento de que era una figura importante dentro de la Policía. La exdirigente del PP ha dicho desconocer a qué se pueden referir las anotaciones en las agendas de Villarejo que le aluden y el juez ha terciado para recordar que algunos de esos apuntes se pueden corroborar con hechos que sucedieron realmente.

Los encuentros en la sede del PP de los que hay evidencias sonoras son del verano de 2009. En aquellas fechas De Cospedal llegó a comparecer en rueda de prensa para denunciar que su altos cargos de su partido estaban siendo espiados y sometidos a vigilancias. El PP estaba en ese momento en la oposición y culpaba al Gobierno y en concreto el entonces ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de dirigir una policía política al servicio del PSOE.

La difusión de estas relaciones con Villarejo precipitó la salida de la actividad política de María Dolores de Cospedal. Hasta hace días, trabajaba en el despacho de abogados CMS Albiñana & Suárez de Lezo, pero ha solicitado recientemente una excedencia tras conocerse su imputación el caso Kitchen que se investiga en la Audiencia Nacional en el marco del caso Villarejo.

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El Confidencial desveló apuntes recogidos en las agendas incautadas a Villarejo que han sido claves para que el juez Manuel García Castellón haya decidido imputar a María Dolores de Cospedal, su marido y el jefe de gabinete de la dirigente cuando ejercía como presidenta de la Junta de Castilla-La Mancha y el Ministerio de Defensa, José Luis Ortiz. En esas anotaciones se refuerza la sospecha de que Cospedal estaba al corriente de que la cúpula de la policía había captado al chófer de Bárcenas para acceder a su documentación.

La defensa de la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal ha presentado este mismo martes coincidiendo con su declaración en calidad de imputada en Kitchen un escrito en el que apunta que el extesorero del PP Luis Bárcenas —perjudicado en el espionaje que se investiga— carece de credibilidad, y en el que subraya que el trabajo del inspector que dirigió las pesquisas en Gürtel, Manuel Morocho, no se resintió cuando fue adscrito temporalmente a la Dirección Adjunta Operativa de la Policía (DAO).

En la declaración, María Dolores de Cospedal ha ido en la misma línea que el escrito remitido por su abogado Jesús Santos, que también ha sido el abogado del PP en diferentes procesos judiciales. Se ha quejado de que ha habido mucho interés en conocer los llamados papales de Bárcenas sobre la contabilidad B del partido, pero poco en investigar su dinero en Suiza. Bárcenas cumple actualmente condena por su implicación en la primera etapa de la trama Gürtel.