Alerta policial por telegrams de la izquierda radical en el inicio de la campaña de Madrid

La Policía Nacional ha activado un dispositivo especial para hacer frente a la marcha convocada este sábado en el Paseo del Prado por el Movimiento Antirrepresivo de Madrid, la plataforma promotora de las últimas protestas contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél. Los servicios de información de las Fuerzas de Seguridad han detectado un alto nivel de movilización entre los sectores más radicales de la izquierda en foros privados de Telegram y se prevé que las concentraciones desemboquen en altercados, según han confirmado a El Confidencial fuentes policiales.

La cita coincide con el inicio de la carrera electoral hacia la Presidencia de la Comunidad de Madrid y se produce, además, en un ambiente de alta polarización política. Los expertos preguntados señalan que ambos factores pueden actuar como un acelerante de posibles disturbios y apuntan que la extrema izquierda pretende que esta cita se convierta en el inicio de una escalada de movilizaciones que condicione la campaña y active a sus seguidores de cara a los comicios. Las primeras manifestaciones cosecharon el respaldo en Twitter de Pablo Echenique, portavoz parlamentario de Podemos y secretario de Acción de Gobierno, Institucional y Programa del partido.

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“Por nuestros derechos y libertades. ¡Amnistía total! Libertad Pablo Hasél” es el lema de la manifestación, que arrancará en Atocha y terminará en la Plaza de Cibeles, frente al Ayuntamiento de Madrid. Será a partir de las 19 horas, por lo que concluirá ya entrada la noche, un momento más propicio para los choques con los efectivos policiales. Entre sus exigencias incluyen la “derogación de la legislación represiva”, la “depuración de las fuerzas represivas” y otros mensajes de carácter social con una audiencia más amplia, como “viviendas sociales para todos los trabajadores”, “servicios públicos y de calidad” y “derechos para las personas migrantes”.

Uno de los rostros visibles de Movimimiento Antirrepresivo de Madrid es la abogada Alejandra Matamoros, que es representante legal del propio Hasél y actúa como portavoz de la plataforma. Otros líderes, como Miquel Pujol y Karim Benamar, están también vinculados con la Coordinadora 25-S, que se ha sumado a la convocatoria de este sábado y fue la principal responsable de las protestas de Rodea el Congreso y Asedia el Congreso, en el otoño de 2012 y abril de 2013, respectivamente.

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Tanto el Movimiento Antirrepresivo como la Coordinadora 25-S están relacionados con la Coordinadora Antifascista, el paraguas asociativo de grupúsculos como Yesca, células anarquistas y Bukaneros, entre otros, a los que se ubica en los ataques de las llamadas Marchas de la Dignidad de 2015, en las que resultaron heridos 67 policías y uno de ellos fue incluso acorralado por los violentos. Uno de los históricos cabecillas de Bukaneros, Iñaki Jiménez, alias ‘Pirrakas’, presta servicios de escolta a Pablo Iglesias e Irene Montero en su chalé de Galapagar, como ha revelado recientemente 'El Español'.

Las plataformas convocantes tamibén mantienen lazos organizativos con los CDR de Cataluña y La Forja —juventudes de Poble Lliure, el partido heredero de Terra Lliure integrado en las CUP—, principales dinamizadores de los actos vandálicos que se desencadenaron en Barcelona por la entrada en prisión de Hasél. Allí, esos grupos sufrieron menos presión policial que en Madrid y lograron mantener la tensión en las calles más de una semana. El Ayuntamiento de la Ciudad Condal ha tasado en un millón de euros el coste de los destrozos del mobiliario urbano, que incluyó la quema de 300 contenedores.

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En la capital, una primera protesta en apoyo a Hasél en la Puerta del Sol y otra posterior en la Plaza de Callao fueron aplacadas por un amplio dispositivo de las Unidades de Intervención Policial (UIP). El de este sábado será incluso más numeroso, ante la detección de mensajes en los canales de Telegram utilizados por la extrema izquierda para intercambiar información confidencial en los que se incita directamente a la violencia. El escenario político, con las elecciones de la Comunidad de Madrid a la vuelta de la esquina y la polarización social en cotas máximas, sopla a favor de la convocatoria. Por precaución, se ha activado también un despliegue considerable de personal médico, explican fuentes próximas al operativo.