Rivera pisa el acelerador: "Estamos listos para gobernar pueblos, capitales y CCAA"

“Nos hemos conjurado hoy aquí para ganar. No porque nos guste, que nos gusta, sino porque si no ganas, no gobiernas. Y si no gobiernas, la transformación no llega”. Ciudadanos lo tiene claro y ya avanza con paso firme hacia las citas electorales que se celebrarán prácticamente dentro un año (europeas, andaluzas, autonómicas y municipales) en un momento de especial debilidad para los partidos tradicionales. Por eso, la formación naranja decidió celebrar este fin de semana su primer encuentro nacional, al que acudieron los 37 miembros de la ejecutiva en bloque y todos los comités autonómicos recientemente constituidos en las distintas CCAA. Se citaron en San Lorenzo de El Escorial (Madrid) para recibir las líneas maestras que el partido pondrá en práctica en los próximos meses para dar un vuelco al tablero político en 2019.

“Muchas gracias por vuestra labor, pero os tengo que decir que esto acaba de empezar”. La conclusión lanzada por Albert Rivera a sus filas, habló por sí sola, y ya avanzó la dureza de la contienda electoral que se avecina. El presidente del partido recordó a los suyos “la mayor fortaleza” que tienen: la unión. “En este partido trabajamos unidos y todos sabemos lo que tenemos que hacer”, insistió, al tiempo que recordó que el resto de partidos no trabajan de la mano “porque o tienen corrupción o no tienen democracia interna”. Miraba así de reojo a la luchas fratricidas de la izquierda y al malestar que existe en el PP con los casos de corrupción que lastran muy a menudo la imagen de los conservadores. “Somos un partido limpio y democrático”, insistió Rivera, recordando que lo más importante es no bajar la guardia.

El principal objetivo de este encuentro lo dejó claro el líder centrista: estar listos para todas las elecciones que están por llegar. Y la conclusión al respecto, también es a día de hoy nítida: “Estamos preparados para gobernar España, capitales de provincia, pueblos, comunidades autónomas. Tenemos la obligación de tener este proyecto. Ya no es una posibilidad. Ciudadanos es el partido que más se parece a la España del talento, a la España de los valores constitucionalistas y al país que nos reclaman”, zanjó. Advirtió a los suyos del trabajo que queda por hacer y reconoció que “las expectativas son altísimas” coincidiendo con todas las encuestas publicadas en los últimos meses en las que Ciudadanos ya aparece como primera fuerza nacional o empatado con populares y socialistas.

En ese sentido, Rivera sacó pecho por la labor desempeñada por su partido en la oposición, afirmando que Ciudadanos debe ser “el partido de las buenas noticias”, lanzando una vez más la retahíla de logros que, gracias a sus diputados en el Congreso, verán la luz si finalmente hay Presupuestos. “Bajada de impuestos, más permisos de paternidad, equiparación salarial de Policía y Guardia Civil, ayudas para las familias que quieran tener hijos… Pactamos para tener acuerdos que permitan a los españoles vivir mejor”, dijo el líder naranja, en una nueva pulla hacia el grupo parlamentario socialista.

Y llegó el turno de los reproches hacia sus rivales. “Los de las malas noticias son los del bipartidismo cuando todos los días leen las noticias. Se tienen que avergonzar porque no se me ocurre nada más inmoral que meter la mano en la universidad pública o en las ayudas (en referencia a los ERE de Andalucía)”.

Recordó que “los únicos” que han puesto “cortafuegos” en los pactos de investidura para luchar contra la corrupción han sido los dirigentes de Ciudadanos. “Tuvimos que votar hasta tres veces para que hubiera una investidura sin imputados en Andalucía. Y ahora exigimos lo mismo en Madrid”, insistió el líder de los centristas, en referencia al caso de Cifuentes y en una nueva exigencia para que los populares designen un candidato distinto para acabar la legislatura “de la mejor manera posible”. “Le pido al PP que por una vez tome una decisión. Cuanto más tarden, más bochorno”.

De esta manera Rivera ratificó que no hay marcha atrás en la Asamblea madrileña, pese a que los días avanzan hacia el 7 de mayo (fecha límite para celebrar la moción de censura propuesta por el Partido Socialista). “Nos preguntan que por qué exigimos cosas. Porque nuestros escaños les han hecho presidentes. No conocen a nuestros votantes, que están hartos de que las cosas no cambien”, zanjó.

Hubo tiempo para señalar los “dos principales problemas” del país, los mismos dijo Rivera, que Ciudadanos va a combatir: nacionalismo y populismo. El primero, “con valentía y sin complejos” como “ha hecho Inés Arrimadas” después de 37 años de nacionalismo en Cataluña, afirmó. Y, el segundo, en clara alusión a Podemos, insistió Rivera, se vence con trabajo y con propuestas reales que solucionen los problemas de los ciudadanos. Ciudadanos pisa el acelerador, y lo hace con viento favorable según las encuestas. Rivera advirtió que solo ganando se podrán cambiar las cosas: “Es agotador obligar a hacer cambios a los que no quieren cambiar nada. Queremos que la Fiscalía sea independiente, y no nos dejan. El bipartidismo intenta protegerse. Hemos propuesto suprimir los aforamientos y tampoco nos dejan”, afirmó.

En su alegato final agradeció a los suyos el esfuerzo y se aplicó en pedirles todavía más de cara al próximo año. Pidió a sus dirigentes “no tener miedo al talento” y sólo tenérselo a la “mediocridad”, advirtiendo —tras la noticia del ofrecimiento a Manuel Valls para que sea el candidato a la alcaldía de Barcelona— que el partido trabaja ya por “incorporar a más independientes” porque ganarán “con buenas candidaturas y ofreciendo a los españoles opciones ganadoras” que les hagan decir “se acabó”.