Abu Dabi saca 1.100 millones de Cepsa y premia a su ex CEO con una gran jubilación
Las compañías españolas se han convertido en vacas lecheras para sus dueños extranjeros. Abu Dabi, el inversor mayoritario de Cepsa, retiró a finales del pasado año casi 1.100 M
Las compañías españolas se han convertido en una suerte de vacas lecheras para sus dueños extranjeros. Si Enel, el 'holding' público italiano, ha obtenido más de 30.000 millones en dividendos de Endesa en la última década, Abu Dabi, el inversor mayoritario de Cepsa, retiró a finales del pasado año casi 1.100 millones de euros de la petrolera en forma de dividendos extraordinarios, tres veces más de lo habitual. A la vez, abonó un bonus millonario a Pedro Miró, el consejero delegado que dejó sus funciones a mediados de octubre.
Mubadala, el brazo inversor a través del cual Abu Dabi controla el 62% de Cepsa, aprobó el 4 de marzo de 2019 pagarse 176,58 millones de euros, a razón de 0,33 euros por acción, en forma de dividendo complementario con cargos a los beneficios que había obtenido en 2018. La cifra fue ligeramente superior a la retribución que se concedió un año antes, por 160,54 millones, que habitualmente era el dividendo normal de cada año. Un dividendo que venía acompañado de otro a cuenta por 189,97 millones.
Pero el 26 de septiembre de 2019, el consejo de administración de Cepsa acordó por unanimidad pagarse una retribución a cuenta de los beneficios del curso de 216,41 millones, equivalente a 0,40 euros por acción, tras revisar los estados contables de Cepsa hasta el 31 de agosto y “poner de manifiesto que existía liquidez suficiente para la distribución del dividendo propuesto”.
Dos semanas más tarde, el 13 de octubre, Abu Dabi decidió quedarse íntegramente con los 550 millones obtenidos por la venta de Medgaz a Naturgy con cargo a reservas voluntarias. En esa misma fecha, Mubadala, además, procedía al reparto de un dividendo en efectivo por 38,57 millones con cargo también a las reservas voluntarias. Es decir, a los fondos propios.
Estas retribuciones se aprobaron justo dos días antes de que se autorizase la entrada en el capital de Carlyle, que en abril había alcanzado un acuerdo con Abu Dabi para adquirir el 37% de la petrolera española por unos 4.000 millones de euros. Ya con el fondo de capital riesgo en el consejo de administración, este convino el 19 de diciembre pagarse otro dividendo con cargo a reservas de libre disposición por 100 millones más, de los que 63 fueron a Abu Dabi. En total, 1.081 millones en un ejercicio en el que el grupo energético obtuvo un beneficio neto ajustado de 610 millones, un 19% menos.
Retiro dorado antes del ERTE
Precisamente, 2019 fue el último de Pedro Miró al frente de la dirección ejecutiva de Cepsa. El desembarco de Carlyle supuso la jubilación anticipada de Miró, que ocupó el cargo de consejero delegado durante los últimos cinco años. Según la memoria anual de la petrolera española, el consejo de administración percibió 9,35 millones de euros como remuneración, de los que casi 8,7 millones correspondieron al directivo saliente. Este salario incluye el pago de un bonus extraordinario de cerca de cinco millones por la venta precisamente de la participación del 37% a Carlyle. El resto de la cúpula ejecutiva percibió 10,39 millones, un 22% más, también gracias al abono de un incentivo vinculado al traspaso del paquete de acciones.
La petrolera con sede en Madrid anunció en mayo un ERTE para 2.500 empleados, cuyas nóminas serán abonadas por el Estado español
Cepsa anunció a mediados de mayo un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para 2.500 empleados, cuyas nóminas serán abonadas por el Estado español, tras el derrumbe de sus resultados en el primer trimestre de 2020. La compañía con sede en Madrid y muy vinculada a Andalucía por sus plantas de Huelva registró unas pérdidas netas de 556 millones de euros, comparados con los beneficios de 151 millones de los tres primeros meses de 2019.
La compañía ha realizado provisiones de 538 millones por una menor valoración de sus reservas de crudo y un deterioro neto de los activos de exploración y producción por importe de 188 millones de euros, principalmente a causa de la caída del precio del crudo en el trimestre. Un saneamiento que la ha llevado a anunciar una fuerte reestructuración del equipo directivo y la suspensión del dividendo.
Las compañías españolas se han convertido en una suerte de vacas lecheras para sus dueños extranjeros. Si Enel, el 'holding' público italiano, ha obtenido más de 30.000 millones en dividendos de Endesa en la última década, Abu Dabi, el inversor mayoritario de Cepsa, retiró a finales del pasado año casi 1.100 millones de euros de la petrolera en forma de dividendos extraordinarios, tres veces más de lo habitual. A la vez, abonó un bonus millonario a Pedro Miró, el consejero delegado que dejó sus funciones a mediados de octubre.