La UE irrumpe en el arbitraje clave para apoyar a España frente a fondos renovables
El Ciadi admite la personación de la Comisión Europea en el laudo clave que decide el futuro de las reclamaciones que suman 7.500 millones. La UE no valida esos arbitrajes
Los arbitrajes renovables contra España, la bomba de relojería en que los fondos de inversión reclaman 7.500 millones por los recortes de primas, penden de un caso. España pidió que se suspendiera la ejecución del laudo de Eiser, el primer revés contra España, alegando que la Justicia europea impide esos arbitrajes dentro de la UE. La Comisión Europea se personó en el caso para apoyar las tesis de España, un respaldo de nivel. Pero en el sector dudan de que finalmente el Ciadi, el organismo del Banco Mundial que dirime los arbitrajes, se inhiba.
España está en mitad de la vía y ve cómo se acerca a toda velocidad un tren de mercancías. Los fondos que invirtieron en renovables masivamente a partir de 2004 han reclamado compensaciones por los sucesivos recortes de primas. Cuatro de ellos ya han ganado reclamaciones que suman 357 millones, pero hay en total 7.500 millones en juego. Los inversores nacionales reclamaron sin éxito ante la Justicia española, pero los internacionales —generalmente fondos radicados en Luxemburgo y Holanda— acudieron a arbitrajes en el Ciadi, una cámara del Banco Mundial. Alegan que el Tratado de la Energía, de los años noventa, garantiza la estabilidad de las inversiones en esta materia.
La personación de la Comisión supone elevar el apoyo a España, pero el sector duda de que el Ciadi vaya a inhibirse
El caso que está más avanzado es el del fondo Eiser, que en mayo de 2017 ganó que España debía pagarle 128 millones más intereses de los 300 que reclamaba por los recortes que sufrió en sus centrales termosolares de Ciudad Real y Badajoz. Pero después llegó una sentencia del tribunal de la UE que prohibía estos arbitrajes entre partes de dentro de la Unión. El tribunal consideraba que estaba sujeto a derecho europeo. No hablaba de las renovables, pero era aplicable.
España alegó entonces rápidamente en todos los procedimientos que esa sentencia anulaba la competencia del Ciadi, pero siguieron adelante. Fuentes del sector estiman muy complicado que el Ciadi se vaya a inhibir. De hecho, en el laudo de Masdar que condena a España a pagar 64,5 millones, despacha esa alegación rápidamente. Pero en el caso de Eiser, en el que ya había laudo, pidió suspender la ejecución. Y en verano, la Comisión Europea se allanó, según fuentes del sector.
Es el primer paso legal de la Comisión a favor de España y eleva el conflicto de los arbitrajes a un caso UE-Ciadi. El caso de Eiser marcará un hito clave. El Gobierno busca fórmulas para zanjar estos arbitrajes. Tres de los fondos ya han abiertos casos en tribunales de EEUU contra España para exigir el pago. En caso de que se niegue, como ha venido haciendo hasta ahora, estos fondos pueden pedir el embargo de bienes de España en el exterior.
Esta es una situación que el Ejecutivo quiere evitar por la mala imagen internacional que daría. España está intentando relanzar las renovables con la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, pero a la vez los fondos ven estos arbitrajes y las negativas a pagar generan recelos entre los inversores internacionales.
Los arbitrajes renovables contra España, la bomba de relojería en que los fondos de inversión reclaman 7.500 millones por los recortes de primas, penden de un caso. España pidió que se suspendiera la ejecución del laudo de Eiser, el primer revés contra España, alegando que la Justicia europea impide esos arbitrajes dentro de la UE. La Comisión Europea se personó en el caso para apoyar las tesis de España, un respaldo de nivel. Pero en el sector dudan de que finalmente el Ciadi, el organismo del Banco Mundial que dirime los arbitrajes, se inhiba.