Fiebre por el mercado del 'gym': Portobello negocia comprar Supera por 200 millones

Portobelloestá en plan depredador. Tras cerrar este verano la adquisición de las clínicas Unidental y de constituir su cuarto fondo de capital riesgo, el mayor 'private equity' de España está en negociaciones avanzadas para comprar Sidecu, la compañía que explota la cadena de gimnasios Supera, propiedad precisamente de un ex director general de Portobello.

Así lo han confirmado varias fuentes próximas a la operación, dirigida por el banco estadounidense Greenhill en nombre de los accionistas de Sidecu. Entre ellos está Fernando Chinchurreta, precisamente el inversor que se fue de Portobello en 2015. Previamente, junto a su familia y con la colaboración del Banco Pastor (después Banco Popular), adquirió una participación mayoritaria en Sidecu en 2008 por 66 millones cuando estaba a punto de ser comprada por Corpfin Capital.

Chinchurreta abandonó Portobello a finales de 2015 y ahora está tratando de vender Sidecu gracias al 'boom' de las empresas dedicadas al cuidado físico

Esta sociedad tenía un acuerdo con los accionistas minoritarios de Sidecu, que controlaban el 35% del capital, pero a última hora Chinchurreta y el Banco Pastor movieron ficha y tomaron la mayoría. Aquel regate acabó en un litigio entre el inversor y Corpfin Capital, el segundo de relevancia del exbanquero de inversión de JP Morgan y socio de Ibersuizas entre 1997 y 2010. Ese año, los socios de esta firma de capital riesgo, liderada por Íñigo Sánchez Asiáin, Juan Luis Ramírez, Ramón Cerdeiras y Luis Peñarrocha, rompieron con sus partícipes, entre los que se encontraban la familia García Baquero o Fernando Martín, el dueño de Martinsa Fadesa y presidente interino del Real Madrid. El enfrentamiento cayó de su parte y de sus colegas, que montaron Portobello con 450 millones bajo gestión.

Chinchurreta abandonó Portobello a finales de 2015 y ahora está tratando de vender Sidecu gracias al 'boom' de las empresas dedicadas al bienestar y al cuidado físico. Según distintas fuentes, Green Hill ha mantenido conversaciones con el fondo francés Infravia Infraestructures, pero las negociaciones no prosperaron. Tras romper con la firma gala, el inversor se ha sentado a la mesa con sus antiguos socios de Portobello, que ahora tiene exclusividad sobre la transacción. Si cierra la compra, se tratará de la sexta adquisición en menos de dos años después de engordar su cartera con los hoteles Blue Sea, Centauro (alquiler de coches), Trison ('marketing' comercial), Sabater (especias) y Laulagun (rodamientos).

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La valoración que exigen los propietarios de Supera ronda los 200 millones, por lo que multiplicarán por cerca de tres veces la inversión inicial. Una transacción que va a llevar a cabo después de que en 2015 comprasen por 6,3 millones el 49% restante de una filial que estaba en manos de bancos como Ibercaja, CaixaBank, Kutxabank, BBVA, Sabadell y Mare Nostrum. Esta subsidiaria era dueña de cinco gimnasios de una red total del grupo de 40.

Los interesados tienen que dirigirse a Greenhill, el banco de negocios estadounidense que esta primavera fichó a parte del equipo de fusiones y adquisiciones de BBVA, Javier González y Carlos Gómez de la Rubia, para liderar su oficina en España. Fuentes financieras han indicado que la valoración que piden Chinchurreta y ahora Banco Santander es muy agresiva, pero en línea con la última transacción que se hizo en la industria del deporte, cuando Torreal y Mutua Madrileña tomaron la mayoría de Ingesport.

Un negocio en plena forma

El fondo de Juan Abelló y de la aseguradora adquirió el 80% de esta sociedad que opera 40 gimnasios municipales en régimen de concesión bajo la marca Go Fit por una cifra próxima a los 250 millones. La operación, adelantada por El Confidencial en diciembre de 2015, se firmó finalmente en abril de 2016 tras recibir la autorización de competencia y puso en valor competidores similares como Supera. El vendedor fue precisamente Corpfin Capital, que tras no poder adquirir Sidecu, se hizo con Go Fit ante los problemas financieros del Ayuntamiento de Madrid y de otras capitales de provincia de España.

Entre los interesados por Supera han estado Viva Gym, una cadena 'low cost' apoyada por el fondo Bridges Ventures; Forus, controlada desde 2014 por Baring Private Equity Parntres, o Enjoy Wellness, participada mayoritariamente por el fondo Espiga Capital. Se estima que el negocio de los gimnasios mueve cerca de 3.000 millones en España.

El anterior precedente en este sector fue la compra de la cadena de lujo Holmes Place en 2006 por parte de Mercapital y N+1 (ahora Alantra) a Permira y Bridgepoint por 110 millones de euros. La inversión, realizada en los meses previos al estallido de la crisis, acabó en manos de los bancos acreedores —Espirito Santo, Abanca y BBVA—, que en 2012 se la revendieron a la familia Fisher, los fundadores.