Acciona reclama 30 millones a Paramés para librarle de su cláusula anti Bestinver

Tiene pinta de convertirse en La guerra de los Rose. El divorcio radiado que protagonizan el gestor estrella Francisco Paramés y la firma de inversión Bestinver (propiedad de Acciona) va camino de llegar a los tribunales. De momento, tras meses de enconamiento y el súbito portazo de ruptura de hace tres semanas, no hay acuerdo entre las partes para formalizar su separación, pues las interpretaciones sobre las cláusulas contractuales y el coste millonario de cancelarlas son muy dispares.

Casi como los hollywoodienses Oliver y Bárbara Rose, la pugna entre Paramés y Acciona tuvo que ver con la propiedad y el futuro de Bestinver, su casa en común durante los últimos 25 años. Siendo imposible cualquier reconciliación, la gestora reclama a su antiguo gurú el pago de 30 millones de euros para librarse de la cláusula de no competencia que afecta a los dos próximos años, según reconocen los protagonistas, tres veces más que los 10 millones ofrecidos por el gestor.

Así las cosas, todo parece que terminará en algún juzgado de lo Laboral. Mientras las cuentas de Paramés para comprar su libertad profesional llegan a 10 millones, desde Acciona tienen plena intención de que el gestor se ciña al cumplimiento del contrato, que le obliga a estar dos años de no competencia y a mantener el 75% del patrimonio medio invertido durante los últimos tres años, aunque puestos a zanjar el asunto con dinero se han descolgado con una cifra de 30 millones.

Las cantidades que se mueven son inasumibles para cada parte, salvo que acepten un término medio

Las cantidades que se mueven son inasumibles para cada parte. Salvo que acepten un término medio, la baraja está rota desde hace tiempo y el entuerto contractual terminará en manos de un juez. Hasta entonces, cada bando sigue labrando su camino. Paramés, por ejemplo, está reuniéndose con inversores y posibles clientes, al tiempo que decide cómo articula su regreso. Por otro, la nueva Bestinver aguarda la llegada de Beltrán de la Lastra a finales de año para pasar página.

A pesar de toda esta tensión, tanto Acciona como Paramés son conscientes de que ambos pueden salir perdiendo en este envite. La gestora de la familia Entrecanales ya sufrió el impacto del conflicto con una salida del 10% del dinero de los fondos (600 millones) durante la primera semana, con el efecto bursátil negativo que eso tuvo, además, para algunas compañías medianas invertidas por la firma. Aun así, el peor escenario puede plantearse cuando su antiguo gurú sea un competidor.

Por parte de Paramés, su desplante ante Acciona ha generado incertidumbre en su círculo más íntimo de familiares, amigos y clientes, que tenían el dinero confiado a su gestión. El desconcierto provocado ha obligado al gestor a dar explicaciones a quienes le inquieren recomendando que, como él y su familia, mantengan intactas las inversiones en los fondos de Bestinver. De momento, allí siguen sus gestores de confianza (Alvaro Guzmán y Fernando Bernad) y fuera no hay alternativas mejores.