Es noticia
Las pensiones vuelven a ganar poder adquisitivo con inflación diez años después
  1. Economía
El IPC se estanca en el entorno del 1%

Las pensiones vuelven a ganar poder adquisitivo con inflación diez años después

La revalorización del 1,6% superará ampliamente la subida de precios, que se situará en el entorno del 1,2%. El Pacto de Toledo ya pidió que se evitasen estas situaciones en 2011

Foto: Manifestación de pensionistas por la revalorización con el IPC real. (EFE)
Manifestación de pensionistas por la revalorización con el IPC real. (EFE)

En el año 2009 el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero aprobó una revalorización de las pensiones del 2% para asegurar el mantenimiento del poder adquisitivo. Habitualmente, los gobiernos aprobaban esta subida al inicio de cada año y como el IPC siempre era superior, compensaban el diferencial con una 'paguilla' extra al final del año. Sin embargo, en 2009 todo cambió, la crisis acababa de estallar y ya nada volvería a ser lo mismo. El 1 de enero los pensionistas vieron subir su paga un 2% mientras el IPC se hundía. Tanto que cerró el año con una caída media de los precios del 0,3%. Ese año los pensionistas vieron elevado su poder adquisitivo nada menos que un 2,3%.

Los desmanes del sector público hasta ese momento se vieron corregidos a partir de 2010. Con las pensiones, el ajuste fue inmediato: ese ejercicio se congeló la revalorización y los pensionistas vieron cómo se esfumaba todo lo que habían ganado en el ejercicio anterior. El Pacto de Toledo criticó la mala gestión de la revalorización que se había hecho y así lo incluyó en las recomendaciones aprobadas en 2011, que fue la última vez que hubo un acuerdo en el Pacto. En ese momento, se introdujo el concepto de IPC real, tan repetido en los últimos meses.

Foto: Cambio de ciclo en la economía: la crisis que nos acecha
TE PUEDE INTERESAR
La crisis que nos acecha
Javier G. Jorrín Pablo López Learte Luis Rodríguez

"El vigente sistema de revalorización ha dado lugar, en anteriores ejercicios, a desviaciones entre el IPC previsto y el IPC real, con la consiguiente desvirtuación de su finalidad de conservación de poder adquisitivo", señaló el Pacto de Toledo. Este año se repetirá esa "desvirtuación" de 2009, ya que el IPC previsto está claramente por debajo de la revalorización aplicada este año, lo que generará una importante ganancia de poder adquisitivo para los pensionistas.

En concreto, las pensiones han subido un 1,6% desde el 1 de enero, una subida que es la que dejó firmada el Ejecutivo de Mariano Rajoy en sus Presupuestos de 2018. Esto es, a pesar de la desaceleración de la economía y la recaída del petróleo de los últimos meses del año, el Gobierno de Pedro Sánchez aplicó una subida que se proyectó en abril.

[El gráfico que demuestra que el norte de España vive de las pensiones]

Como ocurrió en 2009, ya se preveía un frenazo de la inflación antes de realizar la subida de las pensiones, pero el Gobierno optó por hacer caso omiso a las recomendaciones del Pacto de Toledo. En enero, el IPC moderó su avance hasta el 1%, lo que significa que los beneficiarios han iniciado el ejercicio con una importante ganancia de poder adquisitivo. No solo eso, todos los indicadores apuntan a que la inflación se mantendrá contenida a lo largo del ejercicio. El IPC subyacente (que excluye los alimentos frescos y la energía) es el indicador que mejor refleja las presiones de precios en una economía y en España está en el 0,8%. Esto evidencia que, si no hay un fuerte repunte del precio del petróleo, es de esperar que los precios se mantengan moderados a lo largo del año.

El vigente sistema de revalorización ha dado lugar a desviaciones entre el IPC previsto y el IPC real, con la consiguiente desvirtuación de su finalidad

En cuanto al petróleo, la cotización actual del barril está en 67,5 dólares, esto es, un 6% por encima de la media de los últimos cinco años. No solo eso, en los meses centrales de 2018 el crudo repuntó hasta la cifra de los 86,3 dólares por barril. Esto significa que el precio tendría que subir al menos un 20% para que generase presiones inflacionistas. "En los próximos meses la inflación seguirá mostrando tasas muy moderadas, situándose en el entorno del 1%, en un entorno de desaceleración económica y ausencia de presiones inflacionistas", señala la CEOE en su informe económico de febrero.

Con esta coyuntura actual, los analistas contemplan que el IPC avanzará en el conjunto del año en torno a un 1,2%. Esto significa que la ganancia de poder adquisitivo para los pensionistas será de casi medio punto. De esta forma, recuperarán una parte del poder de compra perdido en 2017. Eso significa que la subida de las pensiones no respeta las recomendaciones del Pacto de Toledo por ser superior al "IPC real". Eso sí, ningún pensionista ha protestado porque las pensiones no respeten el "IPC real", ya que este año les beneficia.

El Gobierno tiene que dar explicaciones

El Pacto de Toledo estableció en 2011 que cuando un Gobierno subiera las pensiones por encima del IPC real, estaría obligado a corregir esta desviación para que no se consolide, o a dar explicaciones ante la Comisión. Nadie espera que la subida no se consolide, porque eso significaría recortar las pensiones en 2020 o subirlas por debajo del IPC, lo que políticamente es muy complicado. La alternativa, entonces, es que el Gobierno explique al Pacto de Toledo por qué ha tomado la decisión de subir las pensiones por encima del IPC y que lo acompañe "de las oportunas proyecciones macroeconómicas y datos financieros que fundamenten dicha decisión y que aseguren su adecuación al requisito de sostenibilidad del sistema".

Foto: Un robot camarero sirve las mesas en un café de Hungría. (Reuters)

Nadie duda de que esta subida de las pensiones del 1,6% agrava el déficit de la Seguridad Social y complica más la sostenibilidad futura del sistema. Pero esta decisión de subir las pensiones por encima del IPC no responde a ningún otro criterio que el electoralista. El pasado mes de diciembre, el Ejecutivo ya era consciente de que la legislatura tenía poco recorrido y, a pesar de ello, optó por aprobar una revalorización superior al IPC. Esto es, una decisión que, según las recomendaciones del Pacto de Toledo, supone una "desvirtuación" del principio de mantenimiento del poder adquisitivo.

Hasta el estallido de la crisis, era sencillo adaptar la subida de las pensiones con el IPC. Bastaba con revalorizar un 2% al inicio del año y compensar la desviación final con una 'paguilla' en el último mes del año. Sin embargo, desde entonces ha sido muy difícil. Bien porque la inflación era inferior al 2% y, por tanto, no era sencillo ajustar la subida; o porque el índice de revalorización introducido por el PP en 2013 obligaba a una revalorización del 0,25%.

Lo que sí pretende hacer el Gobierno es derogar el índice de revalorización de las pensiones que introdujo el Partido Popular en 2013

Desde el año 2008 los pensionistas han tenido una pérdida de poder adquisitivo de unos dos puntos. En este periodo, los precios han subido casi un 12%, mientras que las prestaciones se han incrementado casi un 9,5%. Esta pérdida de poder adquisitivo se compensará en parte este año.

[Las pensiones entran en la campaña electoral]

Lo que sí pretende hacer el Gobierno es derogar el índice de revalorización de las pensiones que introdujo el Partido Popular en 2013. Así lo trasmitió la Seguridad Social a los agentes sociales el viernes en la reunión que mantuvieron en el Ministerio de Trabajo, explican fuentes sindicales. Lo hará por real decreto-ley el próximo viernes, día 1 de marzo, en el último Consejo de Ministros antes de la disolución de las Cortes. Sin embargo, el Ejecutivo todavía no ha redactado ni siquiera el borrador del texto, ya que todavía no ha determinado qué fórmula de revalorización alternativa incorporará al texto. El PSOE lleva meses reclamando que las pensiones vuelvan a vincularse al IPC, pero hasta el momento no ha decidido si figurará así en el real decreto.

En el año 2009 el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero aprobó una revalorización de las pensiones del 2% para asegurar el mantenimiento del poder adquisitivo. Habitualmente, los gobiernos aprobaban esta subida al inicio de cada año y como el IPC siempre era superior, compensaban el diferencial con una 'paguilla' extra al final del año. Sin embargo, en 2009 todo cambió, la crisis acababa de estallar y ya nada volvería a ser lo mismo. El 1 de enero los pensionistas vieron subir su paga un 2% mientras el IPC se hundía. Tanto que cerró el año con una caída media de los precios del 0,3%. Ese año los pensionistas vieron elevado su poder adquisitivo nada menos que un 2,3%.

Revalorización pensiones Pacto de Toledo IPC Seguridad Social Inflación
El redactor recomienda