Primer revés al Gobierno: Funcas cree que la previsión de PIB y déficit está sobrevalorada

El Gobierno ha recibido este miércoles su primer revés a los números de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) solo dos días después de presentarlos en el Congreso de los Diputados. Ha venido de la mano de Funcas, quien considera que la previsión de crecimiento y de déficit del Gobierno está desviada al alza. En concreto, la fundación estima que el PIB crecerá un 2,1% en 2019 antes del ajuste fiscal requerido para cumplir con la senda de estabilidad, tres décimas por debajo de la previsión del Gobierno, que estima un 2,4% de crecimiento antes del ajuste. De esta forma, la desaceleración se mantendría durante todo el ejercicio, al contrario de lo que estima el Gobierno.

Es cierto que tras el ajuste fiscal, el Gobierno rebaja hasta el 2,2% su previsión de PIB, pero el problema es que Funcas no cree que los presupuestos incluyan una reducción del déficit de tal magnitud. La senda de estabilidad marca un objetivo de déficit del 1,3% para el conjunto de administraciones, esto es, sería necesario recortar el desfase presupuestario en 1,4 puntos del PIB, esto es, superior a 17.000 millones de euros. Funcas prevé que el déficit público cierre el año 2019 en el 2,1% del PIB, esto es, no se cumpliría la senda de déficit fijada legalmente y tampoco la que quiere aprobar el Gobierno, que es del 1,8%.

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Funcas no tiene en cuenta todas las medidas de ingresos y gastos incluidas en los presupuestos de Sánchez, ya que todavía no están aprobados y existen muchas dudas sobre cuándo entrarán en vigor. "Creo que es más prudente estimar que la recaudación de los nuevos impuestos solo entrará en vigor el año que viene", ha señalado Raymond Torres, director de Coyuntura de Funcas. Pero no solo eso, Funcas cree que las cuentas de Sánchez no se ajustan al 1,3% de déficit fijado en la ley, sino que se desviarán hasta el 1,8%, ya que el Gobierno tiene en cuenta los ingresos extra por el cambio de la gestión del IVA que no tienen efectos en términos de déficit en contabilidad nacional. "Nuestra estimación es que el déficit estructural se mantendrá sin cambios este año, la política fiscal es neutra", ha señalado Torres.

La ministra de Economía, Nadia Calviño, explicó el pasado viernes, tras el Consejo de MInistros, que si no hubiese sido por el ajuste fiscal, el Gobierno habría revisado una décima al alza su previsión de crecimiento. Funcas, por el contrario, cree que los últimos datos conocidos apuntan más bien a la desaceleración. "Los datos conocidos en los últimos meses nos han llevado a rebajar una décima la previsión económica para 2019 como consecuencia sobre todo del deterioro del sector exterior", ha explicado Carlos Ocaña, director general de Funcas.

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La principal diferencia entre la previsión del Gobierno y la de Funcas radica en dos indicadores: las exportaciones y la inversión empresarial, para las cuales, el Gobierno es más optimista. Funcas estima que las exportaciones crecerán en 2019 un 2%, muy lejos del 2,8% que estima el Gobierno. Esto hace que Funcas considere que la demanda externa restará 3 décimas al PIB, mientras que el Gobierno confía en que solo detraiga una décima. "Ya no es el sector exterior, sino la demanda interna, quien tira del crecimiento", ha explicado Torres.

Ya no es el sector exterior, sino la demanda interna, quien tira del crecimiento

Ocaña ha advertido de los riesgos derivados del deterioro del sector exterior, ya que pone en peligro el superávit de la balanza por cuenta corriente, que ha sido el mejor cambio experimentado por la economía española durante la crisis. "Es necesario mejorar la posición exportadora y evitar esa desaceleración actual y para ello hay que elevar la productividad de la economía española que no ha evolucionado bien", ha remarcado Ocaña. Funcas prevé que el superávit de la cuenta corriente caerá este año hasta el 0,6% del PIB, casi la mitad de lo que estima el Gobierno, que es un 1%.

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Respecto a la inversión en Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF), el Gobierno tiene una gran confianza en que sea uno de los grandes motores del crecimiento. También Funcas lo cree, pero no es tan optimista: prevé un avance del 4% frente al 4,4% que estima el Gobierno. Por el contrario, Funcas es más optimista que el Gobierno en cuanto al consumo de los hogares, ya que estima un avance del 2,2%, superior al 1,7% que prevé el Ejecutivo en su cuadro macroeconómico.