Hacienda estudia una 'tasa Google' del 3% para Airbnb, Uber o Amazon

El Gobierno quiere que las grandes tecnológicas paguen más. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se ha posicionado en la línea de la Comisión Europea y estudia que empresas como Airbnb, Uber, o Amazon deban pagar un impuesto del 3% -conocida como tasa Google- sobre los ingresos por publicidad, venta de datos y transacciones entre particulares y comercio que llevan a cabo en España. Así lo ha avanzado este jueves en el Senado, donde ha asegurado que trabaja para aprobar "un tratamiento fiscal adecuado" para las plataformas de economía colaborativa.

El plan, bautizado como "una nueva fiscalidad para el siglo XXI" se dirigiría a empresas con una cifra de negocio mundial anual superior a 750 millones de euros, tal y como propuso la Comisión Europea, y cuyo volumen de operaciones sujetas a este gravamen superara los 3 millones de euros. "Hay plataformas dedicadas a este servicio que generan miles de millones y no tributan de manera adecuada, porque la fiscalidad actual no reconoce este tipo de actividad y entran en competencia desleal con sectores tradicionales", ha afirmado Montero durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda del Senado.

Además de este plan, la ministra ha confirmado que el Gobierno aprobará en noviembre o "incluso antes" el impuesto a transacciones financieras, junto a la anunciada Ley de prevención y lucha contra el fraude fiscal.

Este gravamen se tramitará como una proposición de ley por tratarse de un impuesto nuevo, por lo que Hacienda busca el apoyo de otras fuerzas políticas. La ministra espera ganarse el apoyo de las fuerzas parlamentarias ya que, de lo contrario, estarían posicionándose en contra de una figura impulsada desde Bruselas. Además, el Partido Popular ya anunció que tenía la intención de crear este impuesto antes de perder la moción de censura el pasado junio, por lo que la aprobación debería estar asegurada.

En su comparecencia, Montoro ha seguido perfilando los cambios impositivos que recogerá el proyecto presupuestario de 2019, aunque ha admitido que todavía se están negociando.

El veto en el Senado

Montoro ha defendido que la modificación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria para eliminar el veto de la Cámara Alta al déficit no constituye un "menosprecio" ni una "falta de atención", sino que se trata de una disfunción normativa, por lo que el Ejecutivo continuará con su "interés legítimo y democrático" para que vea la luz la proposición de ley que sortearía ese veto y permitiría establecer la senda de déficit del Gobierno socialista que conlleva una relajación de 6.000 millones de euros.

También ha defendido la idea de que no se va a producir un adelanto electoral y que el Gobierno seguirá trabajando con Presupuestos o sin ellos, con una prórroga de los actuales. "Tenemos mucho proyecto por delante (...) Con o sin presupuestos vamos a intentar promover iniciativas políticas que cuenten con la mayoría de la Cámara y que permitan la sanidad universal, volver a un sistema de becas que premie el talento, ser capaces de impulsar una nueva capacidad para la dependencia o la reforma de la Seguridad Social", ha afirmado Montero, según recoge Efe.

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Montero también ha recordado que entre las medidas recogidas en el contenidos de los Presupuestos que última su ministerio con Podemos -y que espera presentar pronto al resto de grupor parlamentarios- está la rebaja de la conocida como tasa rosa, es decir, aquellos de higiene íntima femenina como las compresas o los tampones y seguir el ejemplo de las Islas Canarias, donde el IVA de restos productos se encuentra en el 4%.