Bruselas eleva la previsión de crecimiento de España al 2,6% por el menor impacto catalán

La economía española crecerá un 2,6% en 2018 según la última estimación de la Comisión Europea que eleva en una décima su previsión de PIB en su Informe de Invierno. Una mejora que refleja hasta qué punto los analistas habían sobrevalorado el impacto de la crisis de Cataluña sobre el PIB. Bruselas reconoce que España mantendrá un elevado dinamismo económico, aunque no conseguirá alcanzar el 3,1% de crecimiento logrado en 2017.

Esta revisión positiva en la previsión de crecimiento deja ya vía libre al Gobierno para que pueda mejorar su cuadro macroeconómico. En las últimas semanas, la mayor parte de las casas de análisis privadas han elevado su previsión de crecimiento para España, lo que hace que el Gobierno vaya a ser el último en subir su estimación. En octubre rebajó tres décimas la previsión de PIB para este ejercicio como consecuencia del desafío independentista, hasta el 2,3%. Una cifra que se antoja demasiado conservadora y que el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reconocido que tendrá que revisar al alza.

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Estas previsiones son, además, un gran impulso para el ministro de Economía, Luis de Guindos, en el día que ha presentado su candidatura al Banco Central Europeo (BCE). La buena marcha de la economía española, que ha sorprendido año tras año a todos los analistas, es el mayor respaldo que tiene hoy Guindos para ganar la carrera por la vicepresidencia del BCE.

[España creció un 3,1% en 2017, el cuarto año en positivo]

La Comisión Europea considera que la economía española seguirá ralentizándose en 2019, con un crecimiento del PIB del 2,1%. Esto significa que en dos años perderá un punto completo de crecimiento. Una ralentización del dinamismo económico que responde al agotamiento de los factores coyunturales y a la ausencia de reformas para elevar la productividad de la economía española y su crecimiento potencial.

La Comisión estima que el paro seguirá cayendo en los próximos años hasta el 14% en 2019, unos dos puntos y medio por debajo del nivel actual

En su Informe de Otoño, Bruselas ya mostró su prudencia a la hora de valorar el impacto económico de la crisis de Cataluña. Por ese motivo, decidió mantener su estimación de PIB en el 3,1% y acertó de pleno. Esta prudencia ha convertido a la Comisión Europea en el organismo que más ha acertado al valorar el resultado del desafío independentista catalán sobre la economía española.

La Comisión también estima que el paro se seguirá reduciendo en los próximos años hasta caer al 14% en 2019, unos dos puntos y medio por debajo del nivel en el que se cerró el año 2017. Una situación que dejaría a España ya por debajo de su tasa de paro estructural, que los economistas estiman en el entorno del 15%.