España no jugará el Mundial de rugby de Japón: varapalo de la World Rugby

España no estará en el Mundial. Las demandas de alineación indebida contra jugadores de origen francés que jugaron con España han salido adelante y los Leones no jugarán la Copa del Mundo de 2019 en Japón. Un varapalo para los españoles, que tenían muchas expectativas puestas en la participación en el Mundial para consolidar el crecimiento que ha experimentado nuestro rugby en los últimos meses.

El Comité independiente de magistrados designado por World Rugby ha decretado que Bélgica, Rumanía y España han incurrido en un caso de alineación indebida por lo que hay una reducción en los puntos y eso coloca a Rusia en la primera posición de Europa (que da derecho al jugar directamente el Mundial) y Alemania peleará en la repesca por conseguir su plaza. Los ingleses James Dingemans y Peter Fraser y el sudafricano Lex Mpati han estudiado durante varias semanas la diferente documentación aportada por España y ha confirmado que al menos uno de los casos de los cinco denunciados contra los Leones incumple la legislación, por lo que la selección que dirige Santiago Santos no estará finalmente en el Mundial de Japón en 2019.

El caso de Mathieu Belie era el más comprometido, ya que el apertura había jugado partidos con Francia Sub-20 y durante cierto periodo esa selección se consideró equipo B de Francia. La máxima institución del rugby mundial había propuesto la repetición del Bélgica-España tras comprobar la parcialidad del arbitraje del rumano Vlad Iordachescu, cuya intervención fue decisiva en el resultado final del partido, pero el aluvión de demandas de alineación indebida dejó en un segundo plano esa posibilidad.

Opinión

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Irregularidades en el cumplimiento de la norma

España presentó una alegaciones en las que se informaba que los jugadores no habían sido informados de la inelegibilidad con otra selección una vez jugasen con Francia Sub-20, la irregularidad de que esa selección no completase los cuatro años consecutivos manteniendo el status de segundo equipo de Francia, y, finalmente, que la Federación advirtió que los jugadores eran elegibles por España. Irregularidades que han hecho debatir mucho al Comité sobre la decisión.

Esta decisión será un tsunami para el rugby español que salpicará al staff técnico de la selección, en el que el propio seleccionador Santiago Santos ya se había planteado su continuidad, para los jugadores que con las sanciones verán cómo se complica su participación en el futuro con la Selección y debería serlo para la Federación, donde es inevitable que se depuren responsabilidades y se señale a los responsables de las negligencias.

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España se queda a las puertas de un Mundial de nuevo y ya son 20 años sin jugarlo. Se vuelven inútiles las victorias en Rusia y en Madrid ante Rumanía. A esta decisión se suman las sanciones decretadas por Rugby Europe contra los jugadores españoles por los incidentes del final del partido ante Bélgica: Sébastien Rouet (43 semanas), Guillaume Rouet (36 semanas), Pierre Barthere (14 semanas), Lucas Guillaume (14 semanas) y Mathieu Belie (14 semanas).

Ahora resta conocer la reacción de la Federación Española de Rugby y su presidente, Alfonso Feijoo, que viajó el pasado jueves a Londres a defender las alegaciones ante el Comité. España podría acudir ahora al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) para recurrir esta decisión, dadas las irregularidades manifiestas que han existido.