"Que piense lo que quiera". El pique entre Carlos Sainz y Nasser Al Attiyah pone picante el Dakar

El Dakar 2024 ya comenzó antes de la etapa prólogo del 5 de enero. Porque no faltaron las tradicionales declaraciones de algunos favoritos sobre la hipotética ventaja mecánica de sus rivales. Este año le tocaba el turno a Nasser Al Attiyah, ganador de las dos últimas ediciones. Lo hizo metiendo el dedo en el ojo de Audi, y con ganas.

"¿Audi? Les doy solo tres días y se van a casa, ya se vio en Marruecos y Aragón después de cien kilómetros", declaraba el qatarí antes de arrancar la prueba, recordando la precaria fiabilidad del complejo RS Qe-tron E2 alemán en los dos raids de preparación para el Dakar en 2023.

Al Attiyah ninguneaba a Audi como contrapeso a su descontento por el aumento de potencia que la máquina alemana recibía de la FIA para los vehículos con energías renovables, la categoría T1.U, en la que se incluye el RS Q e-tron E2, lo que suponen unos 28 cv de potencia adicionales.

"Que piense lo que quiera", contestó Carlos Sainz cuando todos los micrófonos corrieron a buscar su respuesta tras el comentario despreciativo de su rival. El español no quiso entrar al trapo. Sainz y Al Attiyah disfrutan una relación ambivalente, repleta de polémicas en el pasado, aunque manteniendo siempre las formas. El ambiente empieza caldeado, es parte del paisaje en cada edición, pero sin duda un acicate más para Audi y sus tres equipos.

Precisamente, fue Sainz quien ha denunciado en las dos anteriores ediciones el déficit de potencia de su montura, con cien kilos más de peso reglamentario frente a los T1 convencionales. La FIA dio la razón en parte a Audi en la edición de 2022. Como este año, Al Attiyah denunció los CV adicionales que recibió el coche alemán, y a punto estuvo de costarle un disgusto.

"¡Qué sorpresa darle a nuestro principal rival 11 CV más! Gracias por matar la carrera antes de tiempo", escribió el qatarí en las redes sociales, tras la decisión de los comisarios antes de comenzar la carrera. Tuvo que borrar el mensaje ante las amenazas de sanción por parte de la FIA.

Avisado, este año se mostraba más diplomático al cuestionar nuevamente la decisión de la institución. "No es mi decisión. Tenemos que aceptarlo porque la FIA tiene otra visión. Veremos durante los primeros tres días que Audi será rápido", declaraba, para luego aplicar su lanzada.

Al Attiyah compite en 2024 con una nueva montura, el BRX, junto a Sebastian Loeb, de fiabilidad irregular. El qatarí le habrá visto las orejas al lobo con el rendimiento de la evolución del Q e-tron E2, que en las dunas puede resultar imbatible por su propio concepto, pero también más rápido en todo tipo de terrenos.

Orgulloso, competitivo hasta rozar los límites de la deportividad, con una singular habilidad para sortear problemas en el desierto, Al Attiyah tampoco habrá olvidado las palabras de Sven Quandt, responsable de la estructura que soporta a Audi, cuando insinuó que el qatarí y su copiloto Matthieu Baumel "tenían información extra" para no perderse en un conflictivo punto de control de la polémica primera etapa de la edición 2022, a diferencia del resto de favoritos —con la excepción de Loeb, que le seguía—. "Es gracioso que solo un coche haya conseguido encontrar el camino correcto. Pensamos que tenían información extra. De otra manera, era imposible encontrar esa pista".

Andalucía 2021

Aunque Sainz no entrara al trapo este jueves, su experiencia con Al Attiyah en el Dakar —y fuera de él— es ambivalente. Ambos se respetan en público, pero no dejan de enviarse mensajes mutuamente desde que empezaron a coincidir a partir de 2009.

Fuera del Dakar, un reciente y sonado incidente tuvo lugar en 2021, cuando en el Rally de Andalucía el español públicó un mensaje en las redes sociales con las imágenes de Al Attiyah cortando el recorrido en una etapa. "Una pena ver estas imágenes de la última especial de ayer. Un piloto de la categoría de Nasser no necesita atajar un recorrido para luchar por una victoria", publicaba el español, con un largo mensaje en Twitter.

El qatarí respondía rápidamente con otro vídeo: "¿Recuerdas cómo recortaste por dentro del campo en la Baja Aragón 2017?", con las imágenes correspondientes del coche del español.

Tan pronto como Al Attiyah llegó al Extreme E en 2022, en su primera participación embistió a Carlos Sainz en uno de los duelos. Ante las cámaras, negaba su responsabilidad evidente. Cuando este medio le preguntó a Sainz antes de partir al Dakar por esa particular relación y la personalidad de su rival, el español se explayó entre bromas y veras. "Con Nasser, desde 2009, cuando él iba en Mini y yo en Volkswagen, y luego juntos en Volkswagen, hay anécdotas de que es un personaje que ahora no voy a...", se refrenaba Sainz. "Es un tío muy simpático y todos le conocéis, pero que al competir hace lo que haga falta para ganar. Tiene otro tipo de filosofía de entender las cosas de la que puedo tener yo", comentó, para recordar el incidente en el Extreme E. "Dicho esto, ya habéis visto en la Extreme E que le da igual que sea yo o que sea (Johan) Kristofferson, atiza al que lleva al lado y punto y se acabó... y luego se monta la película que quiere contar".

De naturaleza jovial, extremadamente generoso, a decir de quienes le rodean, el qatarí también juega con esa doble personalidad que ha marcado el tono al que Sainz se ha adaptado. "Es muy simpático, la verdad, un gran piloto. Esas cosas no le harían falta, porque es superbuen piloto, y es uno de los grandes favoritos. Fuera del coche me río mucho con él, aparte que es un buen deportista. Pero le falla eso, se pone el casco y se le va un poco la olla".

Sin duda, desmentir a Nasser Al Attiyah y restregarle una posible victoria de Sainz, Peterhansel o Eksttrom será otro aliciente que el príncipe qatarí ha regalado a Audi para este Dakar.