Lo mejor y lo peor | Este Barça da miedo y el Sevilla de Lopetegui huele a fin de proyecto

El Barça voló por los aires el buen planteamiento inicial del Sevilla con el gol de Raphinha. A partir de ahí, quedó claro que el Barça es un candidato serio a ganar LaLiga y que tiene pegada, determinación, contundencia defensiva y recursos para mirarle a los ojos al Real Madrid. También quedó demostrado que el Sevilla tiene un bloqueo goleador, mental y futbolístico capaz de dinamitar el proyecto de Julen Lopetegui. Fue encajar el primer tanto y el cuadro local se desinfló. El definitivo 0-3, con goles del citado Raphinha, Lewandowski y Eric García, ahonda en la herida sevillista, que ya tiene al Ramón Sánchez-Pizjuán en pie de guerra y que carga contra jugadores, entrenador y directiva y no tardará en hacerlo contra Monchi, puesto que la confección de la plantilla ha sido desastrosa.

Lo mejor | Xavi tiene un abanico temible

No estaba jugando bien el Barça. Superados por el planteamiento agresivo de Lopetegui, con las líneas de presión muy altas, Isco Alarcón a la espalda de Sergio Busquets y muchos jugadores a los costados del centro del campo azulgrana, el Sevilla sorprendió. Tuvo tres ocasiones seguidas para marcar y... no lo hizo. Fue entonces cuando el Barça hizo lo que suelen hacer los grandes equipos: pasarte por encima si les has perdonado.

Como ante el Valladolid o la Real Sociedad, el Barça enseñó un puño de hierro muy difícil de batir y que, independientemente de su juego, les acerca a ganar cada partido. Es lo que tiene gozar de una nómina de delanteros como Robert Lewandowski, Raphinha, Ousmane Dembélé, Ferran Torres, Ansu Fati o Memphis Depay. Los recursos desde el banquillo son amplios y si dudas, te matan. Esta delantera está diseñada para competir por todos los títulos.

Lo bueno | Confianza muy alta

El Barça juega al fútbol con la sabiduría y la esperanza de que todo le va a salir bien en todos los momentos. Es cierto que el Sevilla atraviesa uno de sus periodos recientes más negros, así lo acredita ese punto de 12 posibles, pero eso no quita que el Barça sea una máquina diabólica de verticalidad, desborde, electricidad y agresividad con y sin la pelota. Este equipo juega a un ritmo endiablado, incluso a veces se salta el centro del campo, y arriba tiene a uno de los arietes más mortíferos del panorama mundial: Robert Lewandowski.

Además, no está solo. Hasta siete futbolistas diferentes han marcado en este inicio de curso. Ansu Fati, Pedri, Dembélé y Sergi Roberto vieron puerta en las tres primeras jornadas y en Sevilla se sumaron a esta nómina los nombres de Raphinha y Eric García. Precisamente, los dos jugadores lograron su primera diana con la camiseta del Barça. Es cuestión de tiempo que se sumen más nombres en un conjunto que te puede liquidar de 1.000 maneras diferentes y que posee pólvora de sobras.

Lo normal | Koundé es pura élite

Cuando Xavi Hernández dio a entender que esta temporada se produciría un cambio de status en la zaga, el técnico catalán catalogó a Jules Koundé de "el líder natural de la defensa". El futbolista francés jugó de lateral y de central... para dar dos asistencias. La primera con un pase medido hacia Robert Lewandowski desde su propio cambio en un pase en largo fabuloso. La segunda, cargando el área y dejándole la pelota muerta a Eric García para que solo la tuviese que empujar. El francés tiene jerarquía, tesón, físico, velocidad y una salida de balón exquisita. Mejora a cualquier futbolista de los presentes en el lateral derecho y, junto a Ronald Araújo, es el mejor central posible.

Lo peor | Lopetegui es carne de destitución

El proyecto del técnico vasco como entrenador del Sevilla está en un momento crítico. Después de alargar en verano un camino que quizás se tendría que haber todo después de otro fracaso en Champions League al no pasar ni siquiera de la fase de grupos, el Sevilla, con Monchi a la cabeza, decidió seguir confiando en él. El problema es que las sensaciones fueron igual de malas que el resultado. El Sevilla tiene un bloqueo mental terrible que, sumado a la falta de determinación en ambas áreas, hace que al mínimo contratiempo se venga abajo. Fue encajar el primer tanto y los locales se diluyeron. Con un solo punto de 12 posibles, este miércoles llega el Manchester City al Sánchez-Pizjuán.

Lo malo | Monchi, señalado

Explicaba el director deportivo del Sevilla esta semana que habían vivido por encima de sus posibilidades: "Lo ideal sería que la plantilla del Sevilla costara 140 millones de euros y el coste actual de la plantilla del Sevilla es 170 millones. El dinero está en el campo y nuestro modelo de negocio se estudia en 1.000 sitios". Por primera vez en mucho tiempo, el gran artífice del Sevilla campeón parece haber fallado en una planificación deportiva llena de condicionales y de pocas certezas. Tras vender a la pareja de centrales titulares (Diego Carlos y Koundé) y obtener más de 100 millones de euros, Monchi fichó a Marcão (aún no ha debutado por lesión), Dolberg (cedido), Nianzou, Telles (cedido), Isco y Januzaj (sin haber hecho pretemporada). No son incorporaciones acertadas... por el momento. El Sevilla sigue teniendo problemas en el área rival y, ahora, además, en la propia.