La barbaridad de Dovbyk en el Girona y el mano a mano con el Real Madrid de Bellingham

La Liga se convierte en un mano a mano entre el Girona y el Real Madrid. El equipo de Míchel respondió a la victoria del Real Madrid contra el Villarreal con un contundente triunfo frente al Alavés, en el que destacó la efectividad de Artem Dovbyk. El delantero ucraniano marcó dos goles, llega a la cifra de los 10 en la Liga y se sitúa a tres de Jude Bellingham. Es el otro duelo en la parte alta de la clasificación. Dovbyk y Belingham marcan las diferencias con su acierto realizador en una pugna donde el Girona no falla y sigue confirmando que su liderato en solitario no es casualidad.

Hay muchas claves en el Girona para estar en lo más alto de la tabla. Es un equipo con una filosofía de juego ofensiva, valiente y coral. Míchel tiene trabajado al detalle los mecanismos colectivos. Los jugadores están convencidos de que es la mejor propuesta para competir y la que más les divierte. No renuncian a competir por la Liga, aunque son conscientes de que queda un mundo y hay que ser más humildes que nunca.

El funcionamiento colectivo es la base de un grupo que está en dinámica ganadora y en lo individual hay que poner el foco en la contundencia de Artem Dovbyk. Es la sensación de la Liga, el jugador que compite con Bellingham por ser el máximo realizador del campeonato. Las cifras del ucraniano son realmente positivas. Ha marcado 10 goles con 19 disparos a portería. Es un delantero letal (4 goles con la cabeza y 6 con el pie izquierdo). El Real Madrid se agarra a los 13 goles de Bellingham en la Liga y el Girona a los 10 de Dovbyk.

Los dos tienen algo en común. De ellos se decía que necesitarían un periodo de adaptación y se lo han saltado de una manera brutal. El rendimiento del inglés y el del ucraniano es inmediato. Dovbyk solo necesitó ocho minutos para marcar su primer gol con el Girona en el primer partido de Liga, contra la Real Sociedad en el Reale Arena. Salió en el segundo tiempo por el uruguayo Stuani y con un remate de cabeza, a centro de Tsygankov, puso el empate.

Para entender cómo el Girona logró el fichaje de Artem Dovbyk hay que señalar el papel clave que jugó su compatriota Viktor Tsygankov, el extremo derecho que llegó al club catalán a principios de año tras pagar 5 millones de euros al Dinamo de Kiev por el 50% de sus derechos. Tsygankov convenció a Dovbyk del proyecto del Girona, le habló de los métodos de Míchel, de un club serio y familiar y lo bien que le podría venir esta etapa para salir de Ucrania.

Un fichaje que es un chollo

La operación la pusieron en marcha Pere Guardiola, presidente del Consejo de Administración del Girona, y Quique Cárcel, director deportivo. Con la complicidad de Tsygankov se pudo fichar a un delantero que era desconocido y que hoy es uno de los mejores de las grandes Ligas europeas. El Girona pagó casi 8 millones de euros al Dnipro-1 por el 50% de los derechos de Artem Dovbyk. La apuesta está siendo un éxito.

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Ulises Sánchez-Flor

Artem Dovbyk, delantero con un físico imponente (1,90 cm.), tiene instinto asesino. A sus 26 años se decidió por la propuesta del Girona, tras pasar por el fútbol danés, moldavo y tener que salir de Ucrania por la invasión de Rusia. Es una de las estrellas del equipo de Míchel, un delantero demoledor, que abrió la goleada al Barcelona en Montjuic y al que se le ve enchufado en el campo y adaptado a España. Vive en el centro deportivo del Girona y la clave para su integración es tener cerca a Julius, un utillero ucraniano que trabaja en el Girona y que le hace de traductor, junto con Tsygankov.

Cuando llegó a Girona dijo que no sentiría la presión y que no se pondría un límite de goles. Es un futbolista diferencial, como afirma Míchel, y uno de los motivos por los que el Girona es el máximo goleador (41) de la Liga y está entre los mejores de Europa. Solo por detrás del Bayern de Múnich (47 goles) y Bayer Leverkusen (42 goles). Tres goles más que el Real Madrid.