El palo a Modric: ¿Qué ha hecho el croata para ir a menos en el Real Madrid?

Para Luka Modric, es doloroso y supone una decepción comenzar el Clásico en el banquillo. No tiene ego, pero sí orgullo, y una alta autoestima. También es un rebelde cuando no le van bien las cosas. Pero este obstáculo es enorme. Si al principio de temporada nos dicen que el croata iba a llegar a este partido como el sexto centrocampista en las preferencias de Ancelotti, habría sido difícil de entender. Por jerarquía, calidad y experiencia entraba dentro de lo lógico contar con él en los partidos grandes.

Modric no es sospechoso de estar en baja forma física ni ha dejado de ser un futbolista tremendamente competitivo. El talento no se pierde y compromiso e ilusión le sobran para echarse al equipo a sus espaldas. Los 38 años le pesan más a Ancelotti en sus decisiones que al propio Modric en su rendimiento. El técnico italiano busca más intensidad en el juego.

No es un Clásico más para el croata. Es el primer Barcelona-Real Madrid en el que va a estar en el banquillo desde que llegó en 2012. En los 31 que ha disputado, siempre que ha estado disponible, ha empezado de inicio. El de Montjuïc queda para la historia como el que confirma el cambio de rol en el equipo. La tendencia es negativa. De intocable, pasa a ser un recambio y revulsivo. De llegar a jugar un Clásico como delantero, en una decisión extraña de Ancelotti, a estar fuera. De marcar un buen gol contra el Barcelona en octubre de 2020 en el Camp Nou, bailando a Neto con sus recortes y definiendo con el empeine, a esperar poder tener protagonismo en la segunda parte.

Modric va a menos en el Real Madrid con el reparto de minutos del entrenador. Es el sexto futbolista del centro del campo en el ranking, con 501 minutos en 11 partidos jugados de los 13 que se llevan disputados en la temporada, entre la Liga y la Champions. Por delante están Bellingham (1.036 minutos), Fede Valverde (994), Tchouaméni (930), Camavinga (758) y Kroos (629). Solo supera a los lesionados Ceballos (73 minutos) y Arda Güller (sin debutar). Camavinga suma minutos como lateral izquierdo y en los planes de Ancelotti está por delante de Modric.

La apuesta del Real Madrid por tener esta temporada un grupo de ocho centrocampistas y la gestión de las rotaciones pasa factura al 10 del equipo. Es el más veterano y, por lo tanto, no puede jugar todo. Así lo decide Ancelotti. Lo sacrifica para consolidar un centro del campo más joven y el cambio de sistema con la posición de Bellingham como mediapunta. Modric no ha hecho nada diferente que haya provocado que Ancelotti dude de su rendimiento. No ha sufrido ninguna lesión, tampoco da síntomas de fatiga y no ha tenido un mal comportamiento. Pero llega el Clásico y no tiene sitio en el once.

Ancelotti deposita su confianza en cinco jugadores que va rotando en el centro del campo. Los más necesarios son Bellingham y Fede Valverde. Los que se reparten las otras dos plazas son Tchouaméni, Camavinga y Kroos. Todos menos Camavinga han marcado goles, con especial impacto de los 11 tantos que lleva el inglés. Modric no ha marcado ni ha dado una asistencia en sus 501 minutos. Es el reflejo de cómo le afecta y perjudica tener menos continuidad.

Señalado en el derbi

El plan del club, consensuado con Ancelotti, pasa porque los jóvenes tengan más protagonismo esta temporada y que Modric y Kroos compitan por ganarse los minutos de calidad. El cambio de roles se esperaba con expectación. La cuestión principal está en qué sucedería cuando llegaran los enfrentamientos contra el Barcelona, Atlético de Madrid y los importantes de la Champions.

El entrenador italiano ya nos ha dado algunas pistas. Modric y Kroos empezaron de inicio en el derbi del Metropolitano y en el descanso, con el resultado en contra, Ancelotti quitó al croata. Un jarro de agua fría para un futbolista con peso en el vestuario, que se pregunta si hace menos méritos para jugar o si cuando renovó por una temporada más no fueron claros con él. Modric no quería ser un estorbo. Lo del Clásico es un palo.

TE PUEDE INTERESAR

El cambio para la historia que piden los socios: Ciudad Real Madrid Florentino Pérez

Ulises Sánchez-Flor

Esta es la radiografía del centro del campo del Real Madrid una vez que llega el primer Clásico. Modric no entró en el once hasta el cuarto partido de la temporada, contra el Getafe, y solo ha sido cinco veces titular. Tras la derrota en el derbi quedó señalado, no disputó ni un solo minuto en los dos siguientes encuentros (Las Palmas y Girona) y contra el Nápoles volvió a ser suplente. El hecho de que Ancelotti le haya dado todos los minutos en el partido contra el Sporting de Braga significa que volverá al banquillo en el Clásico.

El duelo contra el Barcelona es un encuentro importante para el Real Madrid y distinto para Modric. Si juega, llegará a los 500 partidos con el club madridista. Lo hará con un estado de ánimo molesto con su situación, decepcionado, pese a que no haga reproches. Se desahoga con su Selección para decir que se siente bien físicamente, motivado y lleno de energía.