Los cambios a cuentagotas en la RFEF: García Caba, responsable de Integración, cesado

La Selección española femenina se enfrenta quizás al partido más arduo de su historia, y no solo por el altísimo nivel del rival, Suecia, a la que se eliminó en el Mundial en la semifinal. La crisis sin precedentes en el fútbol español, desde que 15 jugadoras abandonaran por voluntad propia el equipo nacional hace un año, se ha agravado aún más desde la conquista del primer Mundial femenino, que conllevó la caída de Rubiales. Y la solicitud de numerosos cambios en la estructura federativa que llegan con cuentagotas. El último de ellos, el cese de Miguel García Caba, responsable de Integridad de la RFEF, al que Pedro Rocha, presidente en funciones, ya ha comunicado su despido, según adelanta El Mundo. Esta es la situación.

La convocatoria para este parón internacional no estuvo exenta de imprevistos. La nueva seleccionadora y sustituta de Jorge Vilda, Montse Tomé, no pudo siquiera dar la lista de convocadas el pasado viernes, porque había muchas jugadoras, más de 40, que no se veían capacitadas para acudir a vestirse con la camiseta de la Selección. Esto retrasó, sin fecha fijada, el anuncio de quiénes serían las internacionales. Finalmente, hubo futbolistas citadas que no estaban por la labor de presentarse. "No ha sido un fallo de comunicación, ha sido un fallo de interpretación. A mí me preguntaron si había hablado con jugadoras y dije que sí, porque si lo hice con algunas. Nadie me preguntó si había hablado con todas", explicó Tomé en la rueda de prensa previa al partido, con rostro serio y voz temblorosa.

"Unos hechos inadmisibles"

"Lo que tanto yo como mi staff hemos querido es proteger a las jugadoras, ayudarlas, estar con ellas, con Jenni, que es la que lo ha pasado realmente mal, igual que sus compañeras", continuó Tomé. Hermoso no ha estado en esta convocatoria con el objetivo de "protegerla", según aclaró la propia seleccionadora.

El fin de semana estuvo cargado de llamadas entre Las Rozas, el Consejo Superior de Deportes (CSD) y las jugadoras para conocer de primera mano cuáles eran sus intenciones. Así llegó la convocatoria de Tomé a 21 de las 23 campeonas del mundo. Al no haber hablado con todas, algunas fueron en contra de su voluntad a la Selección. "Después de la final del Mundial, sucedieron unos hechos inadmisibles desde nuestro punto de vista, con la gota que colmó el vaso en la asamblea. Ahí dijimos que no queríamos continuar por ese camino, que teníamos que decir que tolerancia cero ante la situación que había vivido nuestra compañera. Había que marcar precedentes por si esto volviera a ocurrir en nuestra sociedad y en el mundo", aclaró Alexia Putellas, en una rueda de prensa posterior a la de la seleccionadora, cuando fue preguntada por los hechos ocurridos desde el triunfo en el Mundial.

Las internacionales se desplazaron hasta Madrid, donde estaban convocadas en el Hotel Tryp Alameda de Barajas. Allí se vio el ánimo de algunas de las convocadas. "¿Contenta de estar en la lista de Montse Tomé?", le preguntaron a Misa. "No", fue su respuesta a la pregunta de los periodistas. El revuelo se formó cuando las jugadoras del Real Madrid y del Atleti aparecieron en el lugar de concentración.

La "protección" a Jenni

Oliva era el siguiente destino de esta concentración. Allí aparecieron las jugadoras del Barcelona, entre las que se encontraba Alexia Putellas. La vigente Balón de Oro fue preguntada por la "protección" a Jenni Hermoso en el aeropuerto de la Ciudad Condal. "¿Protegerla de qué? Si está todo bien, ¿no?", respondió Alexia cuando le consultaron acerca de la ausencia de su compañera.

Mapi León y Patri Guijarro, integrantes de las 15 que no acudieron al Mundial, fueron convocadas por Tomé y se personaron en la concentración, aunque posteriormente la abandonaron. "Tras acordar que la fórmula a usar no conlleve sanciones, no queremos entrar en una deriva así", explicó Víctor Francos, presidente del CSD.

La destitución de Camps

El miércoles, además, llegó al CSD una denuncia de Miguel Galán sobre la convocatoria de las elecciones en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), presidida de manera interina por Pedro Rocha. El jueves, Francos confirmó que se celebrarán en el primer trimestre de 2024.

La mano derecha de Rubiales, y hasta el miércoles también de Rocha, era Andreu Camps, al que destituyeron. Así se ha producido el primero de los cambios solicitados por las jugadoras. Camps fue inflexible en la negociación con las 15, que pugnaban por mejorar el fútbol femenino. Era el testaferro del expresidente en la Federación.

Rocha, en principio, no quería echar a Camps, pero lo hizo al estar acorralado por el CSD y las jugadoras, que ven al nuevo presidente como un continuista del rubialismo. Andreu, por cierto, no acudió a las últimas reuniones sobre la posible acogida del Mundial 2030, al buscarse caras nuevas en esta cita. La segunda salida de la RFEF fue Miguel García Caba, responsable del Área de Integridad.

Toda esta crisis envuelve el partido de España frente a Suecia de la Nations League y el posterior frente a Suiza. Según les dijo Rafael del Amo —presidente del Comité Nacional del Fútbol Femenino y otro del que piden la dimisión— a las capitanas, serán los dos únicos encuentros que Tomé dirigirá de la Selección, puesto que ya le buscan un sustituto, tal y como adelantó este periódico. Cualquiera diría que son las vigentes campeonas del mundo por todo lo ocurrido. Ahora es momento de que se hable de fútbol... aunque no sea lo más importante.