Luis Rubiales dimite como presidente de la RFEF y vicepresidente de la UEFA

Terremoto en la Real Federación Española de Fútbol. Luis Rubiales ha presentado su dimisión como presidente de la RFEF. El mandatario, tras ser suspendido por la FIFA durante 90 días, también había sido castigado sin empleo ni sueldo por la propia Federación Española tras su beso sin consentimiento a Jennifer Hermoso y su gesto obsceno en el palco. Los hechos ocurridos en la final del Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda, donde la Selección se coronó campeona del mundo, han puesto fin a cinco años de escándalo al mando del fútbol español.

El motrileño también ha anunciado que no continuará en UEFA, donde ocupaba una vicepresidencia y Aleksander Ceferin lo había protegido hasta hacía pocos días, al punto de asegurar que no le iba a suspender dos veces porque la FIFA ya lo había hecho. Luis Rubiales ha anunciado su decisión en una entrevista exclusiva con Piers Morgan. Antes y, con el escándalo internacional ya en marcha, el andaluz había aparecido en los medios de comunicación para llamar "gilipollas e idiotas" a quienes habían criticado su comportamiento en COPE.

De este modo, la actuación de la FIFA fue clave y desató una cascada de movimientos tanto del Consejo Superior de Deportes (CSD) como de la RFEF. El máximo organismo del fútbol internacional apartó a Luis Rubiales de todas sus actividades relacionadas con dicho deporte a nivel nacional e internacional durante 90 días.

El presidente de la RFEF aseguró en la Asamblea Extraordinaria en la Ciudad del Fútbol, en la que se negó a dimitir ante el cerco político y social, que el beso había sido "espontáneo y mutuo" y reprodujo una conversación con Hermoso sobre el beso. "Yo le dije, un piquito y ella me dijo, vale", afirmó el dirigente ante los aplausos de los que allí se encontraban.

Jennifer Hermoso se sintió "agredida"

Poco después, la jugadora publicó un duro comunicado donde decía sentirse "víctima de una agresión" tras el beso no consentido por parte de Rubiales. Dejando claro que no quería interferir en los múltiples procesos legales abiertos, la delantera se sintió "obligada" a denunciar las palabras de este viernes al mediodía por parte del mandatario español, las que calificó como "categóricamente falsas" y que forman parte de la cultura "manipuladora que él mismo ha generado".

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Desde entonces, se abrió un escenario incierto que se agravó tras la resolución del TAD, por la cual consideraban su infracción como "grave" y no como "muy grave", lo que impedía al Consejo Superior de Deportes inhabilitarle temporalmente.

En el comunicado publicado en sus redes sociales, Rubiales admite que "tras la veloz suspensión realizada por FIFA, más el resto de procedimientos abiertos contra mi persona, es evidente que no podré volver a mi cargo". En esta línea, el expresidente de la RFEF, denuncia que "insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación, ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta".

Denuncia una campaña

Rubiales remarca que "no quiero que el fútbol español pueda resultar perjudicado por toda esta campaña tan desproporcionada y, sobre todo, tomo esta decisión tras haberme asegurado de que mi marcha contribuirá a la estabilidad que va a permitir que tanto Europa como África sigan unidas en el sueño de 2030, que permitirá traer a nuestro país el mayor evento del mundo".

Por último, Rubiales señala que no se quedará callado. "Debo mirar adelante, mirar al futuro. Ahora hay algo que me ocupa con firmeza. Tengo fe en la verdad y voy a hacer todo cuanto esté en mi mano para que prevalezca. Mis hijas, mi familia y la gente que me quiere han sufrido los efectos de una persecución desmedida, así como muchas falsedades, pero también es cierto que en la calle, cada día más, la verdad se está imponiendo. Desde aquí transmito a todos los trabajadores, asambleístas, federativos y gente del fútbol en general, un fuerte abrazo, deseándoles mucha suerte".

La RFEF comunicó que iniciará el procedimiento descrito en el artículo 31.8 de los Estatutos de la RFEF. "Si el Presidente cesara por causa distinta a la conclusión de su mandato, la Junta Directiva se constituirá en Comisión Gestora y convocará elecciones para proveer al cargo; el que resulte elegido ocupará el cargo por tiempo igual al que restase por cumplir al sustituido, siendo además de aplicación, en lo que a este respecta, la norma que prevé el artículo 23.2, del presente ordenamiento", dictan los Estatutos.

El artículo 23.2 remarca que "en el caso de que, por cualquier circunstancia, no consumaran aquel período de mandato, quienes ocupen las vacantes ejercerán el cargo por tiempo igual al que restase por cumplir a los sustituidos, los cuales no podrán presentarse a una nueva elección hasta que transcurra el período olímpico para el que fueron elegidos". Las turbulencias en la RFEF no han terminado y la lucha de sables por suceder a Luis Rubiales solo está a punto de empezar.