Es noticia
Por qué Brahim Díaz no ve el peligro de quedarse en el Real Madrid
  1. Deportes
  2. Fútbol
eclipsado por vinicius y rodrygo

Por qué Brahim Díaz no ve el peligro de quedarse en el Real Madrid

Brahim Díaz es un caso a estudiar en el Real Madrid. Tiene clubes que preguntan por su situación y en el Madrid le sugieren que le conviene una cesión para que deje de ser marginal

Foto: Brahim Díaz, sonriente, en un entrenamiento del Real Madrid
Brahim Díaz, sonriente, en un entrenamiento del Real Madrid

Seguimos sin saber qué es lo que quiere hacer el Real Madrid con Brahim Díaz y a qué aspira el malagueño si mantiene su postura de no salir cedido. Corre peligro de ser un jugador marginal cuando tiene muy buena pinta. Este chico es, desde que llegó, un relleno en la larga plantilla que gestiona Zinédine Zidane. No se puede decir que no tiene nivel para jugar en el Real Madrid, aunque tampoco nos escandalizamos cuando el entrenador le deja en la grada, que suele ser habitual, o en el banquillo. Brahim es un caso a estudiar en el Real Madrid. Tiene clubes que preguntan por su situación y en el Madrid le sugieren que le conviene una cesión. El chico se resiste y pide más oportunidades para hacerse valer, dejarse ver y demostrar sus habilidades.

El caso es que Zidane habla maravillas del desparpajo y las condiciones técnicas de un jugador que tiene facilidad para conducir el balón, encara, dribla y finaliza las jugadas. Con 20 años es de ese tipo de jugones que te alegra la vista. Pero está a la sombra de los dos ‘fantásticos’. De esta forma se les conoce a Vinicius y Rodrygo. Los brasileños son el capricho. Tienen un plan de crecimiento más definido que el del malagueño. En ellos hay más miradas puestas para que salgan adelanten y completen esa fase de adaptación y explosión en el primer equipo. Vinicius y Rodrygo (45 millones de euros cada uno) eclipsan a Brahim Díaz (17 millones de gasto). Están por delante en el plan del Real Madrid y con ellos no hay debate en el club sobre si tienen que salir a foguearse. Se quedan. Vigilados de cerca por Florentino y la pareja (Zidane-Raúl) que son de fiar.

placeholder Brahim Díaz en un partido con el Real Madrid en el Bernabéu
Brahim Díaz en un partido con el Real Madrid en el Bernabéu

Cuanto antes maduren Vinicius y Rodrygo más alegrías deportivas y, también económicas, darán al club. Son los dos fenómenos en potencia que están señalados para llegar a la Selección absoluta de Brasil. Esto son palabras mayores. Mucho nivel y pasta. Son los que tienen que coger el relevo de Neymar. No queda claro, entonces, cuál es el sitio y el plan con Brahim Díaz. Claramente perjudicado en una plantilla con exceso de jugadores en las dos bandas y en la mediapunta. Por la izquierda pueden jugar Eden Hazard, Vinicius e, incluso, Gareth Bale. Zidane utiliza por la derecha a Lucas Vázquez, Rodrygo y llega Marco Asensio. Por dentro se mueve Isco y está James.

La esperada carambola

No digamos ya cuando se tome la decisión de repescar a Dani Ceballos y Martin Odegaard. El siguiente en la lista es Kubo y hace bien poco llegó Reinier. Uno más al clan de los brasileños. Por si fuera poco en el Madrid no pierden de vista a Eduardo Camavinga. Demasiados puestos ocupados y jugadores repetidos en una plantilla donde Brahim aguanta y está a la espera de que sucede algo que cambie todo. Como una salida masiva de Bale, Lucas Vázquez y James. O que se retrase el plan Odegaard o que Ceballos se cierre en banda de regresar la siguiente temporada. Puede estar en sus planes la posibilidad de aprovechar el bajón o la lesión de otro compañero. La realidad es que lo tiene y lo seguirá teniendo muy difícil.

El fichaje de Brahim Díaz sigue siendo una compra innecesaria en la política de jóvenes del Real Madrid. Llamó la atención que lo dejara salir Pep Guardiola. Desde el club blanco se intentó provocar un rebrote de ilusión con una cara nueva en una época de desinterés y decepción por los malos resultados y la falta de ilusión en la grada. Tenía un perfil atractivo, fresco, en una temporada de crisis donde la afición sentía que el proyecto se iba a la deriva con la salida de Cristiano Ronaldo y el cambio en el banquillo de Solari por Lopetegui. La culpa no es de Brahim Díaz sino de lo precipitado que resultó una operación de 17 millones de euros, en el mes de enero de 2019, cuando cinco meses después era a coste cero. El peligro que corre Brahim es no darse cuenta de que Vinicius y Rodrygo están muy por delante de él. Le conviene escuchar alguna oferta de cesión.

Seguimos sin saber qué es lo que quiere hacer el Real Madrid con Brahim Díaz y a qué aspira el malagueño si mantiene su postura de no salir cedido. Corre peligro de ser un jugador marginal cuando tiene muy buena pinta. Este chico es, desde que llegó, un relleno en la larga plantilla que gestiona Zinédine Zidane. No se puede decir que no tiene nivel para jugar en el Real Madrid, aunque tampoco nos escandalizamos cuando el entrenador le deja en la grada, que suele ser habitual, o en el banquillo. Brahim es un caso a estudiar en el Real Madrid. Tiene clubes que preguntan por su situación y en el Madrid le sugieren que le conviene una cesión. El chico se resiste y pide más oportunidades para hacerse valer, dejarse ver y demostrar sus habilidades.

Vinicius Junior Rodrygo Zinédine Zidane
El redactor recomienda