Aston Martin, en rojo en la era pre Alonso: pérdidas de 61 millones pese a ingresar 261 millones en 2022

Aston Martin preparaba en 2022 un plan ambicioso de cara a los próximos años que le permitiera competir de tú a tú con RedBull, Mercedes y Ferrari por el título de Fórmula 1. El fichaje de Fernando Alonso era el colofón de un proyecto que ya ha empezado a dar sus primeros resultados en el asfalto con el piloto asturiano al volante, y que el pasado año incrementó sus ingresos un 31%, hasta 227,18 millones de libras (261,5 millones de euros).

El auge en el negocio de la escudería es más que considerable teniendo en cuenta su facturación antes de la pandemia, gracias a la mejora en los ingresos por patrocinio, el prize money y un aumento de las subvenciones del gobierno británico. De este modo, desde 2019 la cifra de negocio se ha casi triplicado, tan sólo mermada en 2020 a causa de la propia crisis sanitaria. La entonces llamada Racing Point no superaba los 85 millones de libras (97,6 millones de euros) de ingresos; pero por el camino, además del cambio de nombre de la escudería, se produjo la entrada en el capital del empresario Lawrence Stroll, padre del compañero de equipo de Alonso, Lance Stroll.

De este modo, la empresa Yew Tree Overseas Limited se hizo con un 16,7% de Aston Martin Lagonda tras invertir 182 millones de libras (207 millones de euros) en 2020. Tampoco se puede pasar por alto que a mediados de 2022 el fabricante de automóviles realizó una ampliación de capital de 653 millones de libras (749 millones de euros), en la que se dio entrada al fondo soberano de Arabia Saudí (PIF), con una inversión de 93 millones de libras (106 millones de euros). Tras esta operación, la firma de Stroll aumentó su porcentaje de acciones hasta el 18,3% mientras que PIF se hizo con el 16,7% del total. La valoración de la escudería se cifra en 1.100 millones de dólares (1.038 millones de euros), según datos de Sportico.

En búsqueda de nuevo copatrocinador principal

El auge del negocio comercial es uno de los factores principales que explican el aumento de facturación de Aston Martin. Durante 2022, la escudería sumó nuevas marcas impulsadas por la mejora de resultados deportivos y, por el hecho de que el fichaje de Alonso se anunciara a mitad de temporada, lo que le permitió exprimir previamente el tirón comercial del piloto asturiano.

Asimismo, la llegada del capital saudí no es casual, ya que en 2022 la escudería firmó a la petrolera saudí Aramco como copatrocinadora principal. Pese a que se desconocen los detalles económicos del acuerdo, la empresa saudí se sumó a Cognizant que aporta entre 20 millones de libras (22,8 millones de euros) y 30 millones de libras (34,2 millones de euros) anuales.

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De cara al próximo año, la tecnológica estadounidense ha dado un paso atrás en el pool de patrocinadores y, pese a extender su contrato, dejará de ser title sponsor. Esta decisión abre la puerta a que la petrolera saudí aumente su peso en la escudería y asuma ser el title sponsor en solitario a partir de 2024. El acelerón comercial experimentado en 2022 también se reprodujo con la llegada de marcas como Hugo Boss, XP, o Porto Seguro, entre otras.

Sin embargo, una de las alianzas más importantes para el futuro del equipo es la que selló este verano con Honda como proveedor de motores a partir de 2026, con la entrada de la nueva regulación de motores. La compañía japonesa se encargará de suministrar y diseñar las unidades de potencia en exclusiva para Aston Martin, hasta la temporada 2030, relevando a Mercedes.

Roto de 200 millones

Pese al crecimiento de la estructura en los últimos años, en su debe está la búsqueda de la rentabilidad. Tras incrementar un 22% sus números rojos en 2022, hasta 52,9 millones de libras (60,7 millones de euros), Aston Martin ya acumula un agujero en las cuentas de 176,21 millones de libras (202,2 millones de euros) desde 2019.

El déficit no deja de incrementarse, entre otras cosas porque la estructura de Gaydon (Reino Unido) ha comprometido inversiones millonarias en proyectos como el de la nueva fábrica, cuya primera fase ya ha terminado y cuyo desembolso total se cifra en 267 millones de libras (306 millones de euros). Esta inversión también incluye un campus de casi 40.000 metros cuadrados. El equipo completó el traslado a su nueva sede este verano, pese a que todavía se está construyendo el nuevo túnel de viento.

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A ello se le suma un incremento en los costes del 29,5% interanual, aupado por mayores gastos administrativos, y a causa de la mayor inversión requerida en el monoplaza en el primer año de la nueva normativa. El gasto en personal se incrementó ligeramente, pasando de 49,1 millones de libras a 51,44 millones de libras, pese a disminuir el número de empleados en ocho personas. Con la disponibilidad de mayores instalaciones en la nueva fábrica, la compañía espera duplicar su plantilla de los 449 empleados con los que contaba en 2022 alrededor de un millar a medio plazo.

Además, a finales de 2022 se formalizaron algunos cambios en los puestos directivos de la escudería, como el fichaje del director de aerodinámica de Red Bull, Dan Fallows, ahora director técnico en Aston Martin; o el que fuera jefe de aerodinámica de Mercedes, Eric Blandin. También cabe destacar la llegada del expiloto español Pedro de la Rosa como embajador del equipo y la de Amadeo Felisa procedente de Ferrari, como consejero delegado de la empresa matriz, Aston Martin Lagonda.

*Artículo publicado originalmente en 2Playbook.com