El triunfo de Fernando Alonso en Mónaco: es tu mayor rival quien te pone la medalla

¿Habría ganado Fernando Alonso el Gran Premio de Mónaco? El día anterior, el español recordaba la evidencia tras su gran actuación en los clasificatorios: "¿Quién hubiera imaginado esto hace dos meses?". Efectivamente, que se planteara la primera pregunta este fin de semana resultaba señal inequívoca del horizonte alcanzado por el español y su equipo en 2023. No solo en entrenamientos, también en la carrera.

¿Se equivocaron ambos al montar el neumático liso en vez del de lluvia cuando arreció la lluvia en la vuelta 52? Parecía abrirse entonces una pequeña ventana de oportunidad. Fue la única bala disponible. Realmente, el triunfo de Alonso hubiera sido como enhebrar una aguja al primer intento y en un par de segundos. "Si Fernando hubiera montado el intermedio, hubiera estado mucho más ajustado", revelaba posteriormente Christian Horner, el responsable de Red Bull.

Entrara o no el hilo por la aguja, Fernando Alonso sigue acumulando un impresionante rendimiento. Si en Mónaco el piloto puede marcar diferencias, el español subió el listón: segundo puesto y quinto podio. Aunque remota la opción, se mantiene en la pugna por el título, erigiéndose en la única esperanza frente a Red Bull a estas alturas del campeonato. Mercedes se bajó del carro en la primera carrera, y Ferrari —Sainz lo mascullaba al terminar el gran premio—, sin reconocerlo expresamente, tampoco tiene armas.

Nada que hacer

Una última vuelta de locura el sábado cuajó gran parte del mérito en Mónaco de Alonso. El domingo se trataba de ir estratégicamente a la contra de Max Verstappen, y esperar. "La única opción que teníamos de ganar era hacer algo diferente a ellos, cogimos las duras para ir muy largos en la primera parada y nos beneficiara un coche de seguridad o algo". Demasiado pronto descubrió que al RB19 y a Verstappen no se le sopla por ritmo ni siquiera en la pista que, a priori, sería flanco débil del monoplaza que ha ganado todo este año.

Cuarta vuelta: dos segundos y medio de ventaja del neerlandés. Vuelta 16: a seis segundos. Vuelta 30: a casi 11 segundos. "Ellos iban más rápido que nosotros, Max nos sacó ventaja con los medios, no tuvo graining y paró en la misma vuelta que nosotros, así que lo intentamos, pero no éramos suficientemente rápidos hoy". Pronto quedó claro que Verstappen controlaba la carrera a placer. La facilidad con la que dejó atrás a Alonso evaporó de inmediato las esperanzas de Aston Martin para echarle un gancho a su rival con el undercut. La carrera se convertía así en un trámite que solo podría romperse con algún factor inesperado.

La única bala

La lluvia vino a revolucionar el último tercio. Primero fueron unas gotas. En dos curvas, la 7 y 8. Aston Martin tomó acertadamente la iniciativa, también forzado ante la pérdida de temperatura en las zonas húmedas de un neumático ya muy amortizado. Llamó antes a Alonso que Red Bull a Verstappen. La conversación de Alonso con su equipo revelaba la incertidumbre la decisión a tomar. "Sí, las curvas 7 y 8 probablemente están para intermedios, el resto de la pista está para [neumáticos] de seco, creo", le informaba el piloto a su equipo. "Ok, entramos en esta vuelta", le comunicó su ingeniero, la 55.

"Pondremos medios", le decía instantes más tarde este ante la información del mapa y del piloto en la pista. "Vale, pero chequear a la gente con intermedios", contestó Alonso con la mosca tras la oreja. Se montaron neumáticos lisos. Pero tan pronto salió a la pista, la lluvia comienza a arreciar y se comprende el error. Imposible mantenerse en el asfalto. Alonso necesitó una segunda parada para montar los mismos neumáticos que Red Bull sí puso a Verstappen a la primera.

¿Cuál habría sido el diferencial entre la vuelta de Alonso con intermedios mientras Verstappen sufría con los secos bajo una pista mojada? ¿Cuánto tiempo habría recuperado Alonso en la primera vuelta del holandés con los neumáticos de agua? ¿Se habría colocado Alonso primero, y ganado el gran premio? De haberlo conseguido, hubiera ido de un segundo arriba o abajo. El hilo de la aguja debía haber entrado a la primera, sin dudar ni fallar.

"Si Fernando hubiera montado los intermedios..."

"Para mí, estaba muy claro que la pista en esa vuelta que paramos estaba completamente seca, salvo las curvas 5, 6 y 7. Entonces, ¿por qué vamos a poner los intermedios, cuando estaba completamente seco, el 99% de la pista?", justificaba después Alonso, "paré para montar neumáticos de seco, el pronóstico era una lluvia pequeña, era lo que teníamos en el radar como equipo. Ese minuto y medio que llevó en pasar por las curvas 5, 6, 7 y 8, cambió todo por completo y cayó muchísima agua. Estaba muy mojado cuando llegué a esas curvas". Alonso asumió su cuota de responsabilidad. "Es un poco decisión de todos, pero un poco más del piloto".

Prueba del peligro para Red Bull de un hipotético acierto de Alonso fueron las palabras de Cristian Horner al terminar. "Quizás habíamos dado una vuelta de más antes de pasar a los intermedios. Creo que si Fernando hubiera elegido los intermedios, habría sido mucho más apretado y habría ejercido más presión sobre nuestra parada en boxes", reconocía el británico. "Pero, afortunadamente, escogió el neumático liso justo cuando empezaba a llover". En Aston Martin estarán rumiando con la única bala que tuvieron para ganar el Gran Premio de Mónaco. Que no dispararon.

"Ha estado encendido todo el fin de semana"

En todo caso, la ventana de oportunidad hubiera sido mínima. Sin embargo, que se abriera en la sexta carrera ya era todo un éxito para Alonso y Aston Martin. Aunque la medalla definitiva para ilustrar el valor de su actuación se la puso el rival: "Pensábamos que Ferrari iba a ser aquí nuestro principal rival, pero Fernando ha estado encendido todo el fin de semana. Quiero decir, increíble". Es decir, quien puso contra las cuerdas a los líderes del campeonato, seis triunfos en seis pruebas, fue Fernando Alonso.

El asturiano sigue escribiendo con mano férrea su guion para 2023. "Nosotros, a seguir igual. No somos los más rápidos, pero tampoco lo éramos en 2010 y llegamos a Abu Dabi como líderes. No éramos los más rápidos en 2012 y llegamos con opciones a Brasil. Este es el camino que vamos a tener, sin pensar demasiado en el Mundial, pero tampoco olvidarlo. Un par de problemas de mecánicos o lo que sea de Max, como ha tenido Pérez aquí, que no ha tenido puntos, y rápidamente recortas. Vamos a ser lo más constantes posible, a no cometer errores, hacer nuestro trabajo. Hoy el mejor resultado posible era segundo, e hicimos segundo, es lo que mejor sabemos hacer". La próxima estación: Gran Premio de España.