McLaren debuta en la Fórmula E: por qué llega donde otros no quieren o no se atreven

Flashback a noviembre de 2016. El americano Zak Brown llega a un McLaren hundido en la miseria, desarbolado por los problemas internos entre sus accionistas y lacerado por la aventura con Honda en la Fórmula 1. Su misión era salvar al 'soldado Ryan' en la pista, y fuera de ella, debido a una menguante cartera de patrocinadores fruto del fracaso deportivo. Genio del marketing deportivo y ferviente apasionado de la competición, se arremangó la camisa y empezó a trabajar.

Este fin de semana debuta otro de los proyectos con los Brown ha ampliado la organización que dirige desde aquel 2016: la Fórmula E. McLaren debuta este fin de semana en el campeonato de monoplazas eléctricos en la primera cita en Ciudad de México. Pragmático, oportunista y audaz, Brown ha dado un golpe de mano al recoger la estructura de Mercedes, que se retiraba del certamen después de haber conseguido los títulos de las dos últimas temporadas. Tras su entrada en el IndyCar, el Extreme E (llegarán las 24 Horas de Le Mans en 2024 o 25), le ha tocado el turno a la Fórmula E. Adivinen las razones tras semejante estrategia.

Líneas paralelas

Recientemente, saltó el anuncio de Andretti Autosport y Cadillac para intentar desembarcar en la Fórmula 1 ¿Tiene algo que ver este proyecto con los de McLaren y Zak Brown? Se trata de la misma estrategia de expansión, pero desde rampas de lanzamiento diferentes. Amigos personales, ambas organizaciones compartieron el desembarco de Fernando Alonso en 2015 en las 500 Millas. A partir de entonces, se mueven por raíles paralelos con sus respectivos movimientos.

Andretti pretende entrar en la Fórmula 1 como Zak Brown lo ha logrado con McLaren en el IndyCar. Aquel desembarcó hace dos años en el Extreme E (suv eléctricos, campeonato también lanzado por Alejandro Agag) asociado a United Autosports, equipo de la resistencia del que el propio Zak Brown es accionista. Este será la base del futuro lanzamiento de McLaren hacia las 24 Horas de Le Mans. Andretti apunta en la misma línea al asociarse en Estados Unidos con el equipo de Wayne Taylor, para el IMSA americano y de aquí, a la famosa carrera francesa. McLaren debutó en el Extreme E en 2022. Andretti Autosport participa desde la primera temporada en la Fórmula E. Ahora, es el turno de McLaren que se incorpora a la nueva era que inicia el campeonato eléctrico.

Disparar rápido y en la frente

Ciertamente, Brown es un ‘quemado’ de las carreras, pero su visión comercial marca el norte de su brújula estratégica. "Para nosotros supone una gran ventaja comercial, y sobre todo, para nuestros socios, ya que tenemos una amplia gama de oportunidades en competición que les permiten utilizar esta amplia plataforma de McLaren para hacer crecer sus negocios”, ha repetido para justificar el plan de expansión, ahora también en la Fórmula E. Es decir, ha creado una suerte de ‘multinacional’ que no se reduce solo a la ya de por sí a la presencia de la Fórmula 1, con la que ofrece a sus socios comerciales una exposición a la carta según sus intereses y mercados.

“El éxito de la participación en la Extreme E nos ha animado a intentar el salto a la Fórmula E, porque para nosotros la sostenibilidad es muy importante”, explica Brown para justificar el salto al certamen de monoplazas eléctricos. Si el americano tenía ya la escopeta cargada, pudo disparar ante la oportunidad que ofrecía Mercedes al anunciar su retirada a finales de 2021, con efectos a finales de 2022. La organización bajo el ala de Toto Wolff triunfó en dos de los tres años de vida en la disciplina. Ahora, corría el riesgo de desaparecer, o de ser adquirida por terceros. Brown disparó rápido y en la frente.

Ian James comenzó a trabajar hace veinte años en McLaren, y dio el salto a Mercedes para dirigir la aventura del fabricante alemán en la Fórmula E. En sus manos quedó buscar una solución a su retirada, consciente del interés de Zak Brown, quien perseguía una aventura viable en lo deportivo y lo comercial en el certamen. Como él mismo ha reconocido, la experiencia de Alonso en Indianápolis con el equipo de McLaren fue un desastre que, sin embargo, dejó lecciones muy valiosas. McLaren solo se aventuraría en otras disciplinas aliada con actores asentados en cada una de ellas. En este sentido, el equipo huérfano de Mercedes llenaba esta importante casilla. Pero ¿Y la ‘pasta’?

La llegada del Gen3

Había que enhebrar varios hilos en la misma aguja. Ian James logró el apoyo económico de Neon, el proyecto de la impresionante ciudad que está en marcha en Arabia Saudí. Pero al dejar de ser oficial, el equipo perdía su cordón umbilical con Mercedes, al perder la unidad de potencia oficial. También presente en el campeonato, Nissan se convirtió en el suministrador oficial junto a su equipo. Finalmente, Zak Brown acogió a los chicos de Mercedes, que se han trasladado a una nueva sede en Bicester, antes de emigrar más adelante a la sede de McLaren en Woking.

Sin embargo, la entrada en la Fórmula E de McLaren también se produce ante la ventana de oportunidad abierta por la llegada del Gen 3, el nuevo monoplaza que pretende remover moldes tecnológicos y, por ende, resetea el certamen (en su novena temporada de existencia). Con una batería de inferior tamaño, capacidad de regeneración en carrera del 40 por ciento de la energía eléctrica necesaria para completarla, un motor en cada eje para regenerar, desaparición física de los frenos traseros… El nuevo monoplaza ofrece un salto tecnológico cuantitativo espectacular aunque, simultáneamente, está provocando extraordinarios dolores de cabeza a los equipos. McLaren cuenta con la ventaja de la experiencia del grupo humano de Mercedes, que prácticamente sigue bajo los nuevos colores papaya del equipo de Fórmula 1. El equipo británico cuenta ahora con Rene Rast y Jake Hugues como pilotos.

McLaren se une a Maserati, que también se incorpora oficialmente. Y al equipo alemán Abt, que se ha asociado con la marca española Cupra. Sin embargo, el desembarco en la playa está sometido a fuego graneado. Problemas de desarrollo y puesta a punto, funcionamiento de las baterías, falta de componentes fruto de la situación internacional, puesta a punto de los novedosos sistemas… Como sus rivales, McLaren afronta en la Fórmula E un gran desafío en uno de los certámenes más complejos y competitivos del mundo de la competición. Sin embargo, el americano solo necesita mirar alrededor de sus compañeros de parrilla en la Fórmula 1 para hacer en alto la pregunta ¿Alguien ha sido capaz de semejante audacia y ambición desde que llegó al Gran Circo?