"Mantendremos el séptimo puesto": la FIA da la razón a Fernando Alonso y a Alpine

La gran remontada de Fernando Alonso en el Gran Premio de Estados Unidos no fue en balde. La reunión de los equipos y la FIA (Federación Internacional de Automovilismo) mantenida el jueves por la tarde hora local no admitió inicialmente el recurso de Alpine, pero sí revisó a continuación el proceso de admisión de la reclamación de Haas. Según dicha revisión, se determina que el equipo americano interpuso fuera de plazo su protesta, ya que los comisarios de Austin no tenían razones para haber extendido media hora más el plazo que establece el artículo 13.3.5 del Código Deportivo internacional. "Los comisarios determinan que la Protesta Original no era admisible", se explicaba en referencia a la apelación de Alpine, aunque determina que "la Decisión en el Documento 61 es nula. No se aplicará ninguna penalización al Coche 14, y la clasificación final será revisada y reeditada".

"El equipo da la bienvenida a la decisión tomada por los comisarios antes mencionados, por la cual el Coche 14 restablece su séptimo lugar y seis puntos de la carrera. Esperamos continuar nuestro trabajo colaborador junto con la FIA para garantizar que el espectáculo de carreras se mantenga con la más elevada calidad”, se felicitaba Alpine tras la reunión con la FIA, que terminó anulando la sanción interpuesta tras la carrera americana.

Una clave fue que Alpine solo tuvo conocimiento en la reunión del jueves de que un oficial de la FIA, en Control de Carrera, había dado a Haas "una hora" para formalizar la protesta, según explica la resolución que 'absuelve' a Fernando Alonso y al equipo francés. Para el equipo francés, ese plazo contravenía claramente lo prescrito en el Código Deportivo Internacional, que solo admite 'media hora'. No existía ninguna justificación legal ni imposibilidad física que justificara ampliar el plazo al equipo americano para interponer su reclamación.

Pocas horas antes de hacerse pública la resolución, Fernando Alonso se había mostrado extremadamente confiado y "optimista de que mantendremos el séptimo puesto", según declaraba en la rueda de prensa oficial del gran premio mexicano. “Si esta es la decisión correcta a tomar (la confirmación de la sanción), abrirá un gran problema para el futuro en la Fórmula 1. Creo que el 50, 60, 70% de los coches se tendrán que retirar cuando tengan un dispositivo aerodinámico que no esté correcto, porque el monoplaza será inseguro”, avisaba el piloto español. “Entonces, este es un día muy importante para nuestro deporte. No me importa el séptimo puesto, ya que no estoy peleando por el campeonato, pero si esto sigue adelante no queremos abrir esa caja (de los truenos, venía a decir)”. Finalmente, no se abrió.

Las bazas de Alpine

En su intervención en la rueda oficial de la FIA, Alonso explicó la situación desde su punto de vista y el de Alpine, con la certeza de que un final feliz para ambos. “Obviamente, fue muy decepcionante. Fue una montaña rusa de emociones para mí el pasado domingo", rememoraba Alonso sobre todo lo vivido durante y después de la prueba, "empezamos atrás, remontamos a la sexta posición, tuvimos el accidente, atrás de nuevo, luego séptimos y, por la noche, de nuevo fuera de los puntos. Así que fue arriba y abajo durante todo el día”. “Creo que hay un par de cosas que están muy claras que se hicieron mal por su parte (de los comisarios y la FIA)", explicaba al respecto del procedimiento, como finalmente se ha confirmado, "por eso estoy muy seguro de que volveremos a ser séptimos en Austin. Si al final no lo somos, seguro que me explicarán por qué y lo veremos claro. Así que estoy muy relajado al respecto”.

Alonso explicaba las razones de su confianza. “En primer lugar, no se puede apelar las sanciones de tiempo, así es como están escritas las reglas, lo cual es bueno, porque cualquiera que sea la decisión que tomes, no puedes apelar. Me encantaría tener algo así cuando piloto”, explicaba Alonso, recurrimos, básicamente, porque la reclamación estaba fuera de plazo y, además, había un par de cosas. La FIA no me mostró la bandera negra y naranja, por lo que debían pensar que era seguro seguir conduciendo el monoplaza”, explicaba Alonso. “Luego, el coche pasó por el parque cerrado, pasó todas las verificaciones técnicas, recibió luz verde en el parque cerrado. Y, luego, la protesta (de Haas) llegó demasiado tarde. Entonces, creo que no hay duda de que no fue la decisión correcta a tomar”.

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En el epígrafe "Observaciones", la última resolución de la FIA también alegaba "su preocupación de que al Coche número 14 se le permitiera seguir en la pista con el retrovisor colgando suelto, y recomienda que se establezcan procedimientos para monitorizar tales asuntos, y cuando sea necesario, requerir que se rectifique el problema como se ha hecho en múltiples ocasiones en el pasado, bien llamando al equipo por la radio, o sacando la bandera negra y naranja, requiriendo que el coche vuelva a boxes para que el problema sea reparado".

"Fue un momento desafortunado"

Según Alonso, la esperanza de que formalmente prosperara el recurso de Alpine se centraba -como así fue- en la demora de 24 minutos para interponer la reclamación fuera de plazo por parte de Haas, como incluso reconocía el comunicado sancionador. “También se abrirá (la caja de los problemas) porque, si veinte minutos es demasiado tarde es demasiado tarde. ¿Es un mes demasiado tarde? ¿Es una hora demasiado tarde? ¿Son diez años? ¿Cuándo es demasiado tarde? Esto es algo que creo que no podemos permitirnos”.

Quizás porque contó con atisbos de información previa o solo por confianza ante la dudosa legitimidad de la sanción, Alonso mostró su confianza en la nueva gestión de la Federación Internacional bajo la presidencia de Ben Sulayem. “La FIA ha sido muy transparente con nosotros este año. Creo que el nuevo liderazgo, también con Mohammed, está haciendo las cosas un poco diferentes al pasado. Hay un par de cosas que no se hicieron mal por su parte, por lo que estoy muy seguro de que volveré a ser septimo en Austin. Si al final no lo soy, seguro que me explicarán por qué y lo veremos claro. Así que, estoy muy tranquilo al respecto. Tengo plena confianza en que lo decidirán (revertir la sanción)”.

Alonso también se refirió al incidente con Lance Stroll y dio su versión sobre lo ocurrido: "Hablamos después de la carrera en su garaje. Luego, en la sala de comisarios, porque tuvimos que acudir, y no ha cambiado mi perspectiva. Lo mismo en la sala de comisarios, y lo mismo ahora. Fue un momento desafortunado de la carrera. Los dos nos fuimos simultáneamente hacia la izquierda, yo cogí el rebufo hasta el último momento, no había DRS en las primeras vueltas después del coche de seguridad, asi que tuve que coger el rebufo agresivamente en el último momento, me volví a la izquierda, él también para protegerse, y nos tocamos. Creo que fue un momento muy desafortunado y, en cierto modo, su penalización fue bastante dura, pero así son las cosas”.