Rubiales defiende ante la jueza el traslado de la Supercopa a Arabia: "Este dinero salvó el fútbol"

El expresidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF) Luis Rubiales ha declarado ante la jueza que investiga sus presuntas irregularidades al frente del fútbol español. Uno de los puntos principales del interrogatorio es su decisión de vender a la dictadura de Arabia Saudí la Supercopa de España, que incluyó una comisión de 24 millones para el jugador del Barça Gerard Piqué. Rubiales ha defendido esa decisión en el Juzgado y ha alegado que, antes de esa operación, “casi nadie quería” jugar el torneo y “tenía baja audiencia”. A su entender, la nueva Supercopa situó a la RFEF como “una de las mejores federaciones del mundo y es lo que ha permitido conseguir la asignación de un mundial”. "Este dinero salvó el fútbol… Porque el fútbol en pandemia hubiera muerto".

Esta declaración del que fuera máximo responsable del fútbol español entre 2018 y 2023 se produce dos años después de que El Confidencial desvelase los pormenores de aquel acuerdo, entre otras revelaciones. “La decisión de jugar la Supercopa en Arabia Saudí no es nueva, ya se hizo antes en Marruecos. La Supercopa la gente no quería jugarla porque era en verano y casi nadie quería jugar, tenía baja audiencia. Sin embargo, cuando decidimos llevarlo a Arabia Saudí conseguimos que diera unos beneficios muy importantes a nivel económico, la hemos hecho interesante y a partir de ahora genera unos 40 millones de euros de negocio”.

En ese sentido, ha añadido que “con esa y otras gestiones” pusieron a la Federación de Fútbol de España como una de las mejores del mundo: “Hemos pasado de 140 a 400 millones de facturación. Hemos mejorado la facturación del fútbol femenino y todo ese trabajo a nivel de marketing, a nivel competición, es lo que nos ha llevado a ser una de las mejores federaciones del mundo, y es lo que nos ha permitido conseguir la asignación de un mundial”. Se refiere a la organización del mundial de fútbol de 2030, que recaerá sobre varios países sudamericanos, España, Portugal y Marruecos.

Sobre la participación de Piqué, Rubiales ha declarado que “la decisión de la Supercopa se tomó en junta directiva y está grabado”. “Se graba todo porque hubo conflictos en cuanto a la confidencialidad y posibles incumplimientos y conflictos de intereses por el hecho de que Kosmos (la empresa de Piqué) estuviera ahí. Lo pasamos a compliance y dijo que estaba todo bien y que no había conflicto de intereses y por eso seguimos adelante”, ha relatado, según informan a El Confidencial fuentes conocedoras de su declaración.

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Al comparecer como imputado, Rubiales no tenía que responder a todas las partes ni estaba obligado a decir la verdad. La jueza titular del Juzgado de Primera Instancia número 4 de Majadahonda que instruye el caso, Delia Rodrigo, le investiga por delitos de corrupción en los negocios y administración desleal.

Sus negocios con Nene

La última línea de investigación que provocó la bautizada como operación Brody el 20 de marzo —y la detención de Rubiales el 3 de abril— se centra en supuestas adjudicaciones irregulares de la RFEF a la constructora Gruconsa. La Guardia Civil destaca que la RFEF abonó al menos a esta compañía 2,6 millones por la "adecuación de los estadios" que le había encargado la Junta de Andalucía en 2021, mientras que el Estadio La Cartuja de Sevilla SA (ECSA) le pagó otros 1,1.

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La constructora traspasó después parte de este dinero a Dismatec, una empresa controlada por el amigo de Rubiales y exfutbolista Francisco Javier Martín Alcaide, alias Nene. Esta empresa se lo transfirió posteriormente a otra sociedad llamada GRX Export Pro, en la que el propio expresidente de la RFEF constaba como socio: cuando dirigía la federación, con un 21,25% y, tras abandonar el cargo, con un 50%.

"No sé cuando se constituye la sociedad GRX", ha asegurado este lunes ante la jueza. "Yo como persona física junto a otras siete personas, compañeras de la federación, estábamos explorando la posibilidad de otros negocios como el hotelero. Era algo que llevábamos mucho tiempo pensando. Se crea con dinero de nuestro bolsillo. Es un negocio fácil de llevar".

Sobre las obras de La Cartuja

En cuanto a las obras de La Cartuja, ha negado irregularidad alguna: "Requería de una serie de acondicionamientos y nosotros como entidad privada podíamos contratar a quien quisiéramos", afirmó. "Todo esto lo pasé por el comité económico a finales de marzo o a primeros de abril. Hay un informe técnico del departamento de eventos que dice que tiene que ser Gruconsa, porque a ella se le encomendó en 2020 que hiciera la auditoría técnica de las deficiencias que tenía el estadio para celebrar la Copa del Rey y que cumplió porque UEFA era mucho más exigente".

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Rubiales también ha intentado defender sus negocios con Nene, con quien se encontraba en República Dominicana cuando estalló la operación. "Cuando salgo de la RFEF, le dije a Javier que si podía entrar en el negocio comprando participaciones. Yo no sé del negocio, él es el que gestiona. Dejo de ingresar el dinero de la Federación y, como tengo ahorros, quiero invertir para tener unos ingresos recurrentes y eso es lo que hago", ha afirmado. "Ahora mismo no tengo trabajo. Mis inversiones me las han bloqueado ustedes, y estoy a la espera de ver si puedo ganarme la vida honradamente".

Su ático de lujo en Madrid

Otra de las exclusivas de este periódico tuvo que ver con el disfrute de un ático de lujo en el centro de Madrid, cuando el presidente ya llevaba años residiendo en Madrid por su cargo como responsable del sindicato de futbolistas. Posteriormente, adquirió un domicilio de mayores dimensiones en la calle Ferraz y para pagar la hipoteca recibía una ayuda a la vivienda con fondos federativos al margen de su sueldo anual que rondaba los 600.000 euros.

Rubiales ha explicado que cuando llego a la Federación, su domicilio familiar estaba en Valencia y entonces la Federación le asignó un domicilio. “El domicilio me lo paga la Federación, pagando el alquiler directamente, lo decidió así la asamblea, fue pública. En esa vivienda fui cambiando; primero estuve en Las Rozas y luego en el centro de Madrid. El importe del alquiler no lo recuerdo. Lo pagaba directamente la Federación. Así estuve hasta que se cambió la forma, que consistía en que me pagaban directamente 1.500 euros a mí. Eso fue en una asamblea en octubre de 2021”, ha dicho.

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“Aquí hay dos momentos, uno que es mi vivienda familiar, que está en Valencia, hasta octubre de 2021, la vivienda con mis hijas estaba allí. A partir de que dejo esa vivienda familiar, en la Asamblea de octubre de 2021 deciden pagarme una cantidad fija. Yo no participo en esa Asamblea, es una decisión de ellos”, ha comentado.

Respecto a su posible participación en el espionaje a David Aganzo, el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), David Aganzo, también se ha desmarcado de cualquier irregularidad: "No soy consciente de que la Federación haya pagado ningún espionaje. Ya he explicado que no tengo nada que ver con eso".

Al término de su declaración, la jueza ha impuesto a Rubiales como medida cautelar la obligación de comparecer ante el órgano judicial una vez al mes y cuantas veces sea requerido por el Juzgado. Además, tiene la obligación de solicitar permiso al Juzgado cada vez que quiera salir del territorio nacional; una petición que debe incluir las fechas de salida y regreso, y el domicilio en el que resida durante el tiempo en que esté fuera.