La jueza investiga un ático de lujo con piscina privada comprado por Rubiales en 2021

La jueza que investiga el acuerdo secreto entre Luis Rubiales y Gerard Piqué para celebrar la Supercopa de España en Arabia Saudí y pactar una comisión de 24 millones de euros ha puesto el foco en un ático de lujo comprado en 2021 por el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) por un precio aproximado de dos millones de euros. La instructora del caso, Delia Rodrigo, ha requerido información sobre la hipoteca que constituyó el dirigente federativo para adquirir el inmueble y rastrea el origen de otros fondos utilizados presuntamente en la operación.

El sumario del caso de los llamados Supercopa Files, al que ha tenido acceso El Confidencial, incluye una tasación de la vivienda comprada por Rubiales que fue realizada por la consultora inmobiliaria CBRE como parte del proceso para la solicitud de la hipoteca. El nombre del máximo responsable del fútbol nacional aparece en el documento. También figuran un plano y varias fotografías de la finca, entre ellas, una imagen de una piscina privada en la terraza, un solario en las mismas dependencias, varias instantáneas del salón, el pasillo distribuidor de la vivienda y su puerta de acceso y panorámicas del gimnasio y la piscina comunitaria, la fachada y el portal del edificio.

Según el informe de CBRE, Rubiales compró una vivienda de 160 metros cuadrados distribuidos en dos plantas de un edificio de la calle Ferraz, en Madrid, otros 89 metros cuadrados de terraza en el mismo inmueble, un trastero de siete metros cuadrados y dos plazas de garaje de 29 metros cada una. La consultora concluyó el 9 de febrero de 2021 que el valor conjunto de estos bienes ascendía a 2.013.119 euros, aunque advirtió de que se trataba de una tasación conservadora por los efectos de la pandemia en el mercado inmobiliario.

Tras la tasación, Rubiales pidió una hipoteca a Bankinter. Los documentos de esta operación también están incorporados a las diligencias. La titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda y la Fiscalía Anticorrupción sospechan que el presidente de la RFEF pudo usar dinero de origen opaco para hacerse con esta propiedad. El importe de la hipoteca ascendió a unos 1,6 millones de euros. Los otros 400.000 euros habrían sido pagados al contado. El Ministerio Público ha comprobado que Piqué abrió cuentas en Bankinter en fechas cercanas a la compra del ático.

Apenas un año antes, Rubiales selló la celebración de la Supercopa de España en Arabia Saudí durante un periodo de seis años. Por cada edición del torneo, la RFEF se aseguró unos ingresos de 40 millones de euros. Esa cifra disparó el salario variable que percibía Rubiales hasta mayo de 2022. Pero el responsable del fútbol también obligó a las autoridades de Riad a pagar una comisión adicional del 10% (cuatro millones de euros) a Piqué por cada uno de esos ejercicios. De ese modo, el hasta ahora defensa del FC Barcelona se garantizó 24 millones de euros en “concepto de éxito” por su supuesta labor de intermediación.

El organismo federativo ha sostenido hasta ahora que no tuvo ningún tipo de relación con Piqué, pero la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) ha concluido en un informe —que también forma parte de la causa y fue adelantado por El Mundo— que los contratos de la Supercopa revelan que la RFEF y Piqué diseñaron estos acuerdos para ocultar la vinculación entre ambas partes y que, en la práctica, el exjugador actuó como agente comercial de la Federación.

Antes de mudarse a esta casa, Rubiales residió en un apartamento de lujo situado en la planta 29 de una torre de la plaza de España, de Madrid. La RFEF se hizo cargo de los 3.100 euros mensuales que costaba el alquiler de ese inmueble, como desveló El Confidencial el pasado abril. La normativa interna de la Federación vetaba ese pago en especie porque, al menos hasta octubre de 2020, era necesario que el dirigente que percibía esa ayuda tuviera su domicilio habitual fuera de la Comunidad de Madrid para poder disfrutarla. La IGAE ha comprobado ahora que Rubiales tenía su domicilio habitual en Madrid como mínimo desde junio de 2019, por lo que estuvo percibiendo esa ayuda de forma irregular durante más de un año, según los técnicos de Hacienda.

La instructora del caso ha ordenado nuevas diligencias en los últimos días, a petición de la Fiscalía Anticorrupción, para aclarar movimientos bancarios de Piqué en Andorra y rastrear posibles gastos de carácter personal abonados con tarjetas corporativas de la RFEF, entre ellos, partidas relacionadas con una fiesta celebrada en un chalé de Salobreña (Granada) en agosto de 2020. También ha requerido documentación sobre el espionaje al presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), David Aganzo, a través de una empresa pantalla.