"El cine español está muy vivo. Vivimos un renacimiento de creatividad"

Su estreno al frente de la dirección del Festival de Málaga el pasado año fue bastante positivo. La vencedora de la Biznaga de Oro el pasado año, Quince años y un día, se alzó con 7 nominaciones a los premios Goya y el pasaporte a los Oscars.Por su parte, Stochkolm, cinta abanderada del nuevo cine, obtuvo 3 nominaciones a los premios Goya, lo que se tradujo en un galardón. Y lo más importante: la pasada edición se cerró con 100.000 visitantes y un impacto económico para la ciudad de Málaga de 1.150.000 euros.

Por eso ahora, visto el buen funcionamiento de su modelo de festival, Juan Antonio Vigar, apuesta por repetir esa foto fija equilibrada y razonada del cine español en la edición de este año, aunque abriéndose a nuevos modelos de coproducción internacional. “Estamos muy contentos con los resultados de la edición pasada. Era un modelo que mostraba a la perfección la realidad del cine español. Estaba constituido por producción convencional o clásica y otras cintas con mirada contemporánea y producción artesanal”, confiesa a El Confidencial.

“Y resulta que nuestra apuesta por ambos extremos fue bien recibida por jurado y público. Salieron películas como Quince años y un día y Stokcholm, ambas bien valoradas, cada una en su rango y que llegaron a los Goya. Ha sido la prueba de que el trabajo estaba bien planteado, se hizo con rigor y de alguna manera intentamos repetir ese modelo”, añade.

“Es importante que tengamos claro que nuestros productores buscan fórmulas más imaginativas y amplias para buscar recursos. Y las coproducciones no sólo están siendo junto a países de Latinoamérica, sino que se está abriendo a otros países. Prueba de ello es que en nuestra foto fija haya este tipo de cintas. El cine español se abre, tiene más capacidad de imaginar, de probar otros cauces. Es una tendencia positiva que debe cristalizarse en éxito”, explica.

Un día más de festival

De esta forma, en la Sección Oficial -que hoy echa andar con el estreno de No llores, vuela-aparecerán cintas con una producción convencional como Kamikaze, Por un puñado de besos e incluso Carmina y Amén, la secuela de Carmina o Revienta, y que este año llega con el apoyo económico de Mediaset de Canal +; o cintas de bajo presupuesto como Purgatorio,A escondidas, 10.000 KM, Dioses y perroso 321 días en Michigan.

Tambiénconviviráncoproducciones internacionales como Anochece en la India, Todos están muertos, Amor en su punto oNo llores, vuela, o cintas rodadas fuera de nuestro país como La vida inesperada. También se presenta la gallega El oro del tiempo, Los fenómenos, y fuera de concursola segunda cinta de Emilio Aragón, Una noche en el viejo México.

Todas ellas competirán durante nueve días –un día más que en la pasada edición- por la Biznaga de Oro, que se entregará el próximo 29 de marzo en el Teatro Cervantes. “Queremos que el encuentro de Málaga con el cine sea extenso. El año pasado ya creamos Málaga de Festival, donde el cine se convierte en protagonista de la cultura. Vivimos más de 150 actividades durante tres semanas que nos llevan así a iniciar un festival vivo”.

“Productores, distribuidores y gente del sector nos decían que la fórmula del estreno en viernes es más adecuada a los intereses generales. Fuimos sensibles a ese hecho y ya hace meses adelantamos un día el festival. La ciudad nos pide más y merece que hagamos todos los esfuerzos. El domingo también será un día hábil mostrando las películas ganadoras de las biznagas”, explica Vigar.

Un impacto positivo

Convertido en referencia del cine español, los números de la pasada edición del Festival de Málaga han sorprendido positivamente a la industria. “No soy amigo de las estadísticas ni que haya solo que valorar eso, aunque sí te digo que es gratificante ver estos indicadores y la valoración del sector. En materia de espectadores tuvimos 22.000 espectadores. Y en lo económico, elfestival generó un impacto importante en la ciudad. Reinvertimos del presupuesto de casi 1,2 millones de euros en empleo directo, restauración, hostelería, servicios. Y la repercusión en medios fue extraordinaria. En la 15 edición se valoró el impacto en 15 millones de euros y la 16 en 22”.

Por todo ello, Vigar cree que “el cine español está muy vivo ahora. No vamos a negar que estamos en un momento difícil de explotación. Pero tenemos un renacimiento de creatividad. O por lo menos así lo denotan las 109 películas vistas. Unas con más aciertos, otras con menos, unas más equilibradas, otras no tanto. Pero las 16 hacen ver que tenemos un cine muy vivo, que interesa, que nos gusta y que espero guste a la prensa y al público”.