Varela: "El PP era una orquesta que tenía los músicos, pero ni partitura ni director"

La moción de censura de Vox ha fracasado en su intento de desbancar a Pedro Sánchez de la presidencia del Gobierno. Su fin quizá no fuera tanto colocar de manera automática a Santiago Abascal como presidente, sino capitalizar el descontento político en España. Como escribió Ignacio Varela en este periódico, "que el momento histórico de máxima emergencia nacional coincida con el de máxima hostilidad hacia los encargados de resolverla solo puede conducir al infierno. De ahí a una impugnación radical del sistema hay un paso. Vox sabe lo que hace con su moción de censura". El colaborador analizó este viernes los grandes temas de la opinión pública durante la última edición de los 'Encuentros de El Confidencial', una iniciativa exclusiva para los suscriptores de este diario.

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Durante su charla con el también periodista Esteban Hernández, Varela apuntó a que la moción de censura presentada por Abascal fue un paso en falso. "Vox dio ayer un paso en falso y ellos eran conscientes. Todas las mociones que se han presentado en la historia de nuestra democracia se han convertido siempre en un examen para el censor más que para el censurado y Abascal no estaba preparado y estoy convencido de que si hubiera podido pararlo lo habría hecho". No obstante, debido a la actual situación de crisis que se está viviendo por la pandemia y la situación económica derivada de la misma, explicó que fue "solo un episodio parlamentario" y que aún está por ver "cuál ha sido su alcance y cuáles serán sus efectos".

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Tras el dicurso de Casado, que muchos le han señalado como el verdadero vencedor de la moción, Varela sostuvo que el Partido Popular ha reaccionado por fin después de vivir "en permanente duda tras la traumática perdida de poder" con la salida de Mariano Rajoy y los debastadores resultados electorales. "El PP era una orquesta que tenía los musicos, pero no tenían ni partitura ni director en quien confiar. Pero Casado ayer presentó lo que puede ser una partitura y encima muestra una imagen de que el partido por fin tiene un líder al que seguir", afirmó. Asimismo, vio necesario esperar para ver si fue un movimiento táctico a la desesperada "para salir de la emboscada que le habían preparado" o si de verdad "obedece a una reflexión táctica" para convertirse en una alternativa de Gobierno sin la necesidad del apoyo de Vox. "La estrategia del partido de Abascal le ha dado a Casado la posibilidad de ganar autonomía estratégica y consolidar su liderazgo".

¿La pública ruptura del PP con Abascal dio a entender una puerta abierta a Sánchez? Varela consideró que esa es una postura equivocada porque en ningún caso se mostró una postura complaciente hacia el presidente del Gobierno. "Casado hace el movimiento que hace porque se ha dado cuenta de que estar ligado a Vox le quitaba eficacia en su lucha contra el PSOE y esto le puede ayudar a ser más duro".

¿Es Vox un partido populista?

Según recordó el analista político, la crisis de 2008 se llevó por delante a mas de 20 gobiernos en toda Europa, por lo tanto, con la actual crisis y los tiempos que se avencinan, "estar fuera del Ejecutivo beneficia a Vox". Sin embargo, tras escuchar el discurso del presidente de esta formación, Valera estimó que "ha cambiado mucho" porque hizo "una colección de todos los discursos populistas del siglo XXI, con una mezcla de Trump, de Bolsonaro, de a veces Salvini". "Hoy este partido representa mucho más una extrema derecha del siglo XXI que ese estereotipo de fascista", explicó.

La crisis de 2008 provocó una crisis en la confianza en la democracia y de eso se aprovechan los nacionalpopulismos

Vaticinó que, a medida que la crisis sanitaria agrave la económica, se va a generar un ejército de clase media empobrecida y de secotres de la sociedad que se sienten abandonados y sin soluciones por parte de los poderes públicos que "provocará una frustración que va a ir a parar en el desahogo de los partidos populistas". Esto provocará el enfrentamiento entre la democracia representativa, "la única democracia que no solo se legitima por autoridad moral sin también por la eficia de gestionar la complejidad de la modernidad", con los nacionalpopulismos.

"La crisis de 2008 provocó que hubiera una crisis en la confianza en la democracia y de eso se aprovechan los partidos y fuerzas que impugnan la democracia representativa y sus instrumentos como es el nacionalpopulismo", expresó y reconoce que la parte más importante del discurso del líder del PP ayer en Congreso fue cuando reconoció que esa era la batalla ideológica real. "La vacuna frente a los Gobierno polarizados es justo la moderación", sentencia.

Sánchez, Iglesias y las próximas elecciones

"Pablo Iglesias demostró que tiene mucho más reflejos que Pedro Sánchez, que es un personaje robótico que parece que se lleva un telepronter al Congreso", comentó antes de agregar que la intervención del líder de Podemos fue inteligente, pero "también demostró la herida que le había provocado el discurso de Casado". "El tiene como idea generar una dinámica de polarización para llegar a 2023 y así poder decir que 'o somos nosotros o es el fascismo", sostuvo y apuntó a que si Casado es capaz de sostener la misma línea que marcó ayer, obligará a los ideólogos del Gobierno, que son Ivan Redondo y Pablo Iglesias, a cambiar su estrategia porque ya no le podrán decir "usted está condenado por la historia a seguir pegado a Vox".

Pablo Iglesias demostró durante el debate que tiene mucho más reflejos que Pedro Sánchez, que es un personaje robótico

La fortaleza que representa Vox en el Parlamento con 52 diputados es debido, según afirmó Varela, a "la gigantesca irresponsabilidad" de convocar de nuevo elecciones en noviembre de 2019. "Eso tuvo unas consecuencias y siempre caerá sobre la conciencia de quienes tuvieron la culpa: Pedro Sánchez y Albert Rivera", señaló y cree que si en ese momento los partidos hubieran tenido mecanismos colectivos de decisión, no se habrían repetido las elecciones porque desde dentro habrían impedido "meterse en ese camino tan disparatado". Ahora, tal y como se conforma el Congreso, el cálculo sobre el que se descansa la estrategia a largo plazo del Gobierno es que si se consigue blindar la alianza entre la izquierda y el bloque nacionalista, se podría garantizar el poder de la izquierda.

Además, recordó que en los partidos políticos en España se han producido dos efectos muy claros en los últimso años: "Un darwinismo invertido, es decir, una selección natural a la inversa para mantener a los mediocres, y, en segundo lugar, las fomraciones han evolucionado hacia la desorganización para convertirse en modelos cesaristas".

La encuestas como instrumento diagnóstico

"Las encuestas no son un instrumento predictivo, solo diagnóstico", expresó Varela. "Cómo vas a preguntarle a la gente a qué partido va a votar si no hay elecciones en un horizonte cercano. Las encuestas tienen un componente de artificialidad", espetó, aunque advierte que sí muestran corrientes de opinión y estados de ánimo de la sociedad.

Según los últimos datos, el analista político observó un empate entre la izquierda y la derecha, que ahora se empieza a desequilibrar a favor del bloque de la derecha, pero "no porque pasen votos de un lado a otro", sino porque parece que "hay un efecto de desmovilización en la izquierda", mientras que la derecha permanece más activa. "Sánchez se mantiene en lo que obtuvo en las elecciones, pero no está siendo capaz de recuperar nada de lo que está perdiendo Unidas Podemos", aclaró.

Sánchez se mantiene en lo que obtuvo en las elecciones y no está siendo capaz de recuperar lo que está perdiendo Podemos

También reflexionó sobre la estrategia de Casado en este sentido porque ante el "claro fracaso" del manejo de la crisis económica y sanitaria por parte del Gobierno en coalición "no se está produciendo ningún trasbase de votos". "Lo lógico hubiera sido que parte de los votantes se pasaran a la alternativa natural que es el PP, aunque solo fuera por darle una oportunidad", declaró y apuntó a que puede ser porque puede "estar triunfando la estrategia de polarización".

Futuros comicios en Cataluña

La primera duda que le surgió a Varela ante las próximos comicios en Cataluña fue si vedaderamente se van a poder celebrar, como pasó en el caso de País Vasco y Galicia, que tuvieron que posponer la celebración por la situación de la pandemia del coronavirus. Una vez superado este escollo, consideró que lo que se está discutiendo realmente es la hegemonía del nacionalismo. "Lo que se está dilucidando es una guerra brutal entre las fuerzas independentistas y eso es lo que realmente se está jugando". El analista también sugirió que lo más peligroso de la votación es la idea que están inoculando de que si obtienen el 51% de los votos, eso les legitima a hacer otra declaración de independencia y es un porcentaje fácilmente alcanzable.

Sobre la oposición de Ciudadanos, consideró que "el partido se puso al borde de la extinción en las elecciones de 2019" por la estrategia "disparatada" de Albert Rivera. Eso les ha hecho tener que buscar su espacio propio para no convertirse solo en un satélite del Partido Popular destinado a su absorción. "Esa vía les permite un crecimiento, pero en ningún caso les va a llevar a los niveles anteriores", expresó, aunque sí consideró que "sí hace el discurso más conectado con el interés general del país", pero le falta volumen al partido.

Un mensaje para Bruselas

Varela se mostró positivo ante el resultado de la moción de censura porque cree que es "el primer mensaje saludable que España manda a Europa en mucho tiempo". "Que 300 diputados de 350 hayan dicho no a la extrema derecha ha sido bueno". Además, apuntó a que "no encontraremos otro momento en la historia" en el Europa tenga una influencia tan decisiva en los actores políticos como el actual. "A Sánchez le ha asustado la reacción de Bruselas ante su reforma del CGPJ y seguro que Casado a recibido mensajes claros y contundentes sobre su relación con la extrema derecha... Bruselas está condicionando para bien la política española".

Que 300 diputados de 350 hayan dicho no a la extrema derecha ha sido bueno un mensaje claro para Bruselas

Ahora Casado tiene un plan que hacer a tres años y no debe esperar a que la crisis destroce el Gobierno actual, tal y como ha pasado en el resto de ocasiones. "Le ha costado trabajo entenderlo pero, ahora que sabemos que este Ejecutivo llegará hasta 2023, con o sin Podemos, todos los planes del dirigente del PP tienen que estar centrados en esas elecciones, cuando además podrían empezar a aparecer los primeros brotes verdes de la crisis que vamos a pasar", afirmó, aunque también comentó que se están viviendo unos niveles de imprevisibilidad increíbles y que el juego es precisamente eso.

La pandemia y la toxicidad política

La situación que estamos viviendo hoy, al borde de declarar otro estado de alarma y acompañado por toque de queda, deriva, según Varela, en dos decisiones de esta primavera. La primera, la retirada del apoyo del PP a la prórroga del estado de alarma cuando los hospitales estaban en pleno apogeo. Y, posteriormente, cuando Sánchez salió a anunciar que "el virus estaba derrotado" y que lo dejaba en manos de las comunidades autónomas. "Provocó una desescalada totalmente prematura".

Si bien sabemos poco de este virus, el colaborador de El Confidencial observó una relación proporcional entre la expansión del mismo y la toxicidad política y puso de ejemplo la situación en Madrid y en Cataluña. No osbtante, teme que la crisis a la que estamos abocados pueda poner en peligro el sistema democrático actual al poder llevar a la gente a confundir la eficiencia con los regímenes autoritarios.

Aquí se esta engendrando un movimiento de cólera social y Vox está preparando el recipiente para recibirlos

"A lo largo de la historia han demostrado que su propia rigidez los hacen brutalmente inficientes", expresó. Consideró así la democracia como el sistema más eficaz, aunque "ha sido incapaz de responder a los retos y grandes crisis del siglo XXI", por lo que la gente se ha sentido "desprotegida " y cuando esto pasa suelen terminar "reclamando un salvador". "Aquí se está engendrando un movimiento de cólera social y Vox está preparando el recipiente para recibirlos".