Es noticia
La banca 'sana' sólo paga 500 millones en impuestos, el 5% de su beneficio de 2013
  1. Empresas
VOLVIÓ A ENTRAR EN PÉRDIDAS EN ESPAÑA

La banca 'sana' sólo paga 500 millones en impuestos, el 5% de su beneficio de 2013

Los bancos agrupados en la AEB pagaron sólo 488 millones en impuestos el pasado año, el 4,95% de los 9.841 de beneficio bruto que obtuvieron en 2013

Foto: El expresidente de la Asociación Española de la Banca (AEB) Miguel Martín. (EFE)
El expresidente de la Asociación Española de la Banca (AEB) Miguel Martín. (EFE)

Los bancos agrupados en la AEB –los bancos 'sanos' que no han requerido ayudas a excepción de CaixaBank– pagaron sólo 488 millones en impuestos en 2013, el 4,95% de los 9.841 millones de beneficio bruto que obtuvieron en el ejercicio pasado, según datos de esta asociación. Esta reducida aportación a las arcas públicas obedece a los créditos fiscales generados por las fuertes pérdidas sufridas en 2012. Aunque el año pasado sirvió para salir del hoyo, el sector siguió muy tocado, puesto que volvió a pérdidas en España en el tercer y cuarto trimestres, y su rentabilidad apenas superó el 4%.

Según las cuentas del sector presentadas ayer por el ya expresidente de la AEB, Miguel Martín, la banca obtuvo un resultado antes de impuestos de 9.841 millones que, tras pagar los citados 488 millones, se quedó en 9.353. A eso se restan los minoritarios y da un resultado atribuido de las entidades de 7.274 millones. Esta cifra compara con unas pérdidas de 2.825 millones en 2012 para estas mismas entidades (si se toman los resultados de la totalidad del sistema en España, sin contar los negocios internacionales, la pérdida fue de 68.744 millones).

Ese 5% de impuestos se sitúa muy por debajo del 15% de tipo efectivo del Impuesto de Sociedades en nuestro país, pero no se diferencia mucho de lo que pagan las grandes empresas del Ibex. Estas se benefician de grandes deducciones por internacionalización, por I+D+i y, hasta el año pasado, por los gastos financieros derivados de su enorme endeudamiento. En el caso de los bancos no se trata de deducciones, sino de los créditos fiscales generados por las pérdidas de 2012.

Como es sabido, en ese ejercicio se aprobaron los famosos Reales Decretos Guindos, que imponían fortísimas provisiones a todas las entidades para cubrir su exposición al ladrillo. Estas provisiones provocaron las pérdidas generalizadas del sector en España ese año. Según la normativa del Impuesto de Sociedades, cuando una empresa tiene pérdidas, aparte de no pagar impuestos ese año, puede utilizarlas para reducir los impuestos que pagará en el futuro cuando vuelva a beneficios; es lo que se denomina bases imponibles negativas (BIN), que es lo que han hecho las entidades en 2013, de ahí que hayan pagado tan pocos impuestos.

Miguel Martín (i) da la enhorabuena al nuevo presidente de la AEB, José María Roldán. (EFE)
Las BIN son una parte de los famosos DTA, es decir, activos fiscales diferidos, que la banca ha podido apuntarse como capital a partir de este año gracias a la reforma de la norma aprobada por el Gobierno a finales del pasado. El resto de los DTA provienen de las provisiones dotadas más allá de las pérdidas del ejercicio, que son gastos pero no se pueden deducir fiscalmente, y los compromisos por pensiones de las entidades con sus empleados. En total, el sector tiene 50.000 millones en DTA y la nueva norma le garantiza la recuperación de 30.000 (las BIN no están aseguradas): aunque no obtenga beneficios suficientes para compensar esa cantidad en 18 años (plazo de la norma actual), recuperará lo que le falte en el año 19; y si quiebra, el Estado pondrá ese dinero para paliar la situación. Esa garantía de recuperación es lo que permite que computen como capital, como sucede en el resto de grandes países europeos.

2013, un año mucho peor de lo que parece

Más allá de las cuestiones fiscales, la situación de la banca 'sana' al cierre de 2013 dista mucho de ser buena pese a la vuelta a beneficios: "2013 fue un año malo", reconoció Martín en la presentación de las cifras. Esta situación proviene de un margen de intereses que cayó el 11,6%, lo que implica que el negocio típico bancario se desplomó por culpa de la caída del crédito, del descenso del Euribor y de los todavía elevados costes de financiación, tanto mayorista como de la remuneración de los depósitos (aunque descendieron a finales de año). Ahora bien, la caída de provisiones tras el fin de los Decretos Guindos fue superior a la del margen (del 40,6%), y también hay que contar con los ingresos del carry trade –operativa en deuda pública con dinero casi gratis de la barra libre del BCE–, que aumentaron el 20,1%. Esto es lo que permitió al sector salir de pérdidas.

No obstante, esta recuperación está cogida con alfileres. Según las cifras de la AEB, el resultado de sus bancos en España volvió a ser negativo en el tercer y cuarto trimestres del ejercicio, debido a la caída de los resultados de operaciones financieras (el carry trade) por la venta masiva de deuda de cara a los test de estrés y al nuevo incremento de las provisiones por la obligación de pasar a mora la mayoría de los créditos refinanciados.

La consecuencia de esta evolución y del reforzamiento del capital exigido por las normas de Basilea III es un ROE (rentabilidad sobre recursos propios) del 4,43%, lo que se sitúa a una distancia sideral del coste del capital, que supera el 12% en algunas entidades, según Marín. Un negocio es rentable si el ROE supera el coste de capital, de ahí que el gran reto del sector en los próximos años sea recuperar una rentabilidad de entre el 10% y el 15%, niveles anteriores a la crisis. Las principales entidades, encabezadas por el Santander, han presentado planes para tratar de volver a esos niveles. Sin embargo, Marín asegura que, para ello, es necesario que se cree un mercado financiero europeo de verdad sin barreras de entrada; sin ello, la única salida para ser más rentable es ganar cuota de mercado a costa de los demás, lo que supone que habrá ganadores y perdedores.

Los bancos agrupados en la AEB –los bancos 'sanos' que no han requerido ayudas a excepción de CaixaBank– pagaron sólo 488 millones en impuestos en 2013, el 4,95% de los 9.841 millones de beneficio bruto que obtuvieron en el ejercicio pasado, según datos de esta asociación. Esta reducida aportación a las arcas públicas obedece a los créditos fiscales generados por las fuertes pérdidas sufridas en 2012. Aunque el año pasado sirvió para salir del hoyo, el sector siguió muy tocado, puesto que volvió a pérdidas en España en el tercer y cuarto trimestres, y su rentabilidad apenas superó el 4%.

Asociación Española de Banca (AEB) José María Roldán Cristóbal Montoro
El redactor recomienda