China desarrolla un sistema para hacer que sus cañones láser lancen ataques infinitos
El descubrimiento permitiría extender el uso de estas armas en combate y hacerlas más eficientes en su tarea de destruir o inutilizar objetivos enemigos como drones, misiles o aviones
Científicos de la Universidad Nacional de Tecnología de Defensa, en China, aseguran haber creado un sistema de refrigeración para las armas láser de gran potencia que les permitiría funcionar sin interrupciones. El descubrimiento puede permitir extender el uso, la potencia y el alcance de un arma que cada vez va teniendo más impacto en las guerras modernas.
Los ejércitos llevan cerca de seis décadas intentando crear armas láser de gran potencia que les permitan alcanzar sus objetivos a la velocidad de la luz sin gastar mucho dinero. Los cañones láser más modernos, como el que acaba de presentar la compañía aeroespacial y de defensa estadounidense, Lockheed Martin, llegan ya a los 500 kW de potencia. Y su efecto es cada vez mayor como arma de defensa ante un gran abanico de amenazas.
"Desde la invención del primer láser de rubí en 1960, la gente ha estado entusiasmada con la transición de la energía cinética a la energía láser para la proyección rápida de energía a la velocidad de la luz, soñando con que los rayos láser se conviertan en 'rayos de la muerte' que puedan acabar instantáneamente con sus objetivos", afirma el equipo especializado en armas láser en un artículo publicado el la revista china Acta Optica Sinica, del que se ha hecho eco el medio hongkonés South China Morning Post.
Los investigadores aseguran que esos 60 años han pasado y la aplicación de sistemas láser de alta energía no ha tenido el éxito que se esperaba, fundamentalmente porque su poder destructivo no cumplía con las expectativas creadas. Su alcance máximo, dicen, es de sólo unos pocos kilómetros y necesitan tiempos de funcionamiento contínuo más largos para alcanzar el poder destructivo suficiente para que merezca la pena su uso.
Un arma potente, pero muy sensible
Las grandes potencias como China y EEUU llevan tiempo fabricando y perfeccionando estas potentes armas. El láser de alta energía viaja a la velocidad de la luz y es capaz de destruir o inutilizar objetivos que se mueven con rapidez como los drones, misiles y aviones. También pueden usarse para tumbar las comunicaciones, los sistemas de navegación y vigilancia del enemigo, así como en objetivos que se encuentren fuera del planeta como los satélites.
Los investigadores explican que los cañones láser generan un haz de luz de alta energía mediante un proceso llamado emisión estimulada, que consiste en excitar átomos o moléculas en un medio, como un cristal o un gas, para que pasen a un estado de mayor energía. Para dirigir y controlar ese haz de luz, el sistema emplea un preciso, pero delicado sistema de espejos y lentes.
El equipo explica que incluso un mínimo movimiento o vibración pueden hacer que el haz se desvíe de su objetivo. Además, cuando el rayo láser atraviesa el aire va calentando el gas que encuentra a su paso, haciendo que se expanda y cree un flujo turbulento.
Cómo funciona el nuevo sistema
Los científicos militares chinos han desarrollado un nuevo sistema de refrigeración interno de la trayectoria del haz que sopla gas a través del arma para eliminar el calor residual y mejorar la su limpieza. Su uso, aseguran, permitirá “producir haces de alta calidad no sólo en el primer segundo, sino también mantenerlos indefinidamente". Además el sistema puede extender el tiempo de uso del arma durante las misiones, aumentar su alcance y su poder destructor y, al ser un diseño compacto, reducir la logística y los costes.
Sin embargo, el dispositivo tiene margen de mejora. Sus creadores alertan de que el sistema de refrigeración todavía puede introducir turbulencias y vibraciones, que pueden afectar a la calidad del haz si no se construye correctamente. Esas turbulencias pueden hacer que el rayo se disperse y distorsione, reduciendo su eficacia y precisión.
A pesar de esto, el equipo afirma haber probado el sistema de manera exhaustiva en varias armas láser todavía en fase de desarrollo y ha cumplido las especificaciones de rendimiento exigidas por los militares.
"Se trata de un gran avance en la mejora del rendimiento de los sistemas láser de alta energía", explica el equipo. "Hasta ahora no se había informado de muchos diseños avanzados ni de los progresos de la investigación sobre gestión térmica de soplado de aire dinámico en China. Esta es la primera vez que algunos de los diseños y resultados de las pruebas [han salido] a la luz pública".
Científicos de la Universidad Nacional de Tecnología de Defensa, en China, aseguran haber creado un sistema de refrigeración para las armas láser de gran potencia que les permitiría funcionar sin interrupciones. El descubrimiento puede permitir extender el uso, la potencia y el alcance de un arma que cada vez va teniendo más impacto en las guerras modernas.