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Vueling implanta el reconocimiento facial para embarcar en avión: así funciona y a quién se envían tus datos
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Vueling implanta el reconocimiento facial para embarcar en avión: así funciona y a quién se envían tus datos

De momento este sistema, que Aena ya probó en Barajas con anterioridad, está disponible para varias aerolíneas como Vueling, Iberia, Air Europa y Binter

Foto: Vueling implanta el reconocimiento facial para embarcar en avión: así funciona y a quién se envían tus datos (EFE/Irene Martín Morales)
Vueling implanta el reconocimiento facial para embarcar en avión: así funciona y a quién se envían tus datos (EFE/Irene Martín Morales)

Hace unos años, Iberia y AENA probaron en el Aeropuerto de Barajas un sistema de reconocimiento facial que permitiría a los usuarios de avión viajar sin necesidad de mostrar sus documentos a través de filtros de seguridad y puertas de embarque. Ahora, la aerolínea Vueling, en colaboración con AENA, ha implantado oficialmente su propio sistema de reconocimiento facial para que los viajeros ahorren tiempo en sus vuelos directos.

Como indica Vueling en su página web, este servicio ya se encuentra disponible en los aeropuertos de Barcelona, Madrid, Menorca, Palma de Mallorca, Ibiza, Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria. Además, en colaboración con otras aerolíneas, como Iberia, Air Europa y Binter, basta con registrarse mediante la aplicación en una de ellas para poder emplear este sistema en las otras tres.

Foto: Orb, el dispositivo para escanear el iris creado por Worldcoin. (Reuters/Annegret Hilse)

Para registrarse en el sistema de reconocimiento facial hay que descargarse la aplicación de Vueling y buscar la opción de Biopass o Reconocimiento Facial. Esta opción también estará disponible en el momento de hacer el check-in si se dispone de una reserva. Basta con hacerse un selfie y el sistema relacionará nuestros datos a nuestra fotografía, para reconocer nuestro rostro cuando lleguemos al aeropuerto y vayamos a pasar un control.

Los datos podrán ser requeridos por un juez

El responsable del tratamiento y la seguridad de los datos biométricos, de contacto e identificativos de los viajeros corre a cargo de AENA. Este método de identificación será opcional para todos los viajeros y solo aquellos que hayan dado su consentimiento podrán emplearlo. A su vez, un viajero registrado biométricamente podrá seguir empleando el sistema de identificación manual siempre que quiera.

AENA guardará los datos identificativos y la imagen selfie, como máximo, hasta un año desde su último uso o hasta que el usuario ejerza su derecho a su eliminación. A su vez, en su política de privacidad informan que, si bien el uso de estos datos será exclusivamente para la identificación biométrica, podrán ser requeridos “para la formulación, ejercicio o defensa de reclamaciones” o por “la Administración Pública, Jueces y Tribunales durante el periodo de prescripción de sus derechos u obligaciones legales”.

Hace unos años, Iberia y AENA probaron en el Aeropuerto de Barajas un sistema de reconocimiento facial que permitiría a los usuarios de avión viajar sin necesidad de mostrar sus documentos a través de filtros de seguridad y puertas de embarque. Ahora, la aerolínea Vueling, en colaboración con AENA, ha implantado oficialmente su propio sistema de reconocimiento facial para que los viajeros ahorren tiempo en sus vuelos directos.

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